El fiscal pide 23 a?os de prisi¨®n para Barrionuevo y Vera
Entiende que los imputados en el 'caso Marey' aceptaron combatir a ETA "con sus propias armas"
Jos¨¦ Mar¨ªa Luz¨®n, fiscal del caso Marey -que investiga el secuestro del ciudadano franc¨¦s Segundo Marey Sempere a manos de los GAL en 1983-, hizo ayer p¨²blicas sus conclusiones provisionales, en las que pide un total de 23 a?os de prisi¨®n para el ex ministro del Interior Jos¨¦ Barrionuevo y el ex secretario de Estado para la Seguridad Rafael Vera. Acusa a ambos de pertenencia a banda armada, detenci¨®n ilegal y malversaci¨®n de fondos p¨²blicos y reclama penas similares, por encima de los 20 a?os, para otros ex altos cargos de la c¨²pula socialista de Interior que, seg¨²n su informe, aceptaron combatir a ETA fuera de la ley y "con sus propias armas", ante el auge del terrorismo y tras el "detonante" del secuestro y asesinato del capit¨¢n de Farmacia Alberto Mart¨ªn Barrios.
Al igual que para Barrionuevo y Vera, el fiscal del Supremo ha pedido fuertes penas para el grupo de responsables policiales implicados en el sumario matriz del caso GAL que jugaron el papel de arrepentidos y fiaron su l¨ªnea de defensa a la inculpaci¨®n de sus superiores, con el ¨¢nimo de llegar hasta el ex presidente Felipe Gonz¨¢lez. Las peticiones para este grupo, que convinieron una estrategia de refuerzo y apoyo a los intereses de las acusaciones, son de 22 a?os para el ex director general de Seguridad Juli¨¢n. Sancrist¨®bal y de 21 a?os para el exjefe del Mando ¨²nico para la Lucha Antiterrorista, Francisco ?lvarez y el ex jefe superior de Polic¨ªa de Bilbao, Miguel Planchuelo.El fiscal pide tambi¨¦n penas que totalizan 16 a?os de c¨¢rcel para el ex secretario general de los socialistas vizca¨ªnos, Ricardo Garc¨ªa Damborenea, -hoy en la ¨®rbita del PP-, 12 a?os para el ex polic¨ªa Jos¨¦ Amedo y ocho para Michel Dom¨ªnguez y otros cuatro polic¨ªas que custodiaron a Marey durante su secuestro. Est¨¢ previsto que el juicio comience hacia el mes de enero, y el tribunal estar¨¢ integrado por la Sala Segunda en pleno.
Conmoci¨®n en el PSOE
La dureza de las penas solicitadas, 178 a?os en total para doce procesados, caus¨® sorpresa en medios judiciales y una fuerte conmoci¨®n en medios del PSOE, al que el fiscal menciona expresamente en las primeras l¨ªneas de su escrito. Luz¨®n atribuye exclusivamente a los "ambientes pol¨ªticos gubernamentales y del PSOE" el origen de la idea de luchar contra ETA "con sus propias armas" y "al margen de limitaciones legales, con actuaciones en el sur de Francia".El fiscal deriva el delito de malversaci¨®n del hecho de haber utilizado un mill¨®n de francos franceses, procedentes de los fondos reservados del Ministerio del Interior, para el pago de los mercenarios franceses y de los gastos originados por el secuestro.
El ministerio p¨²blico aprecia en Barrionuevo, Vera, Sancrist¨®bal, ?lvarez y Planchuelo la agravante de prevalimiento de su cargo p¨²blico en el delito de pertenencia a banda armada. Sin embargo, pide que se mantenga la situaci¨®n de libertad bajo fianza en que est¨¢n los procesados.
Luz¨®n sit¨²a el origen de las acciones en el a?o 1983, "ante el auge del terrorismo procedente de ETA" y dado "el convencimiento de la escasa colaboraci¨®n que en la lucha antiterrorista prestaba Francia, por algunos considerada como santuario o burladero de los terroristas".
Seg¨²n el fiscal, el servicio secreto Cesid lleg¨® a elaborar un estudio te¨®rico sobre posibles actos de represalia, en el que se examinaban las ventajas e inconvenientes de la realizaci¨®n de acciones armadas a uno y otro lado de la frontera, en el que se conclu¨ªa que "la forma de acci¨®n m¨¢s aconsejable es la desaparici¨®n por secuestro".
"Aceptada entre distintos mandos del ministerio del Interior", prosigue el fiscal, la posibilidad de acciones contra ETA y su entorno, se produjo el 5 de octubre de ese mismo a?o el secuestro del capit¨¢n de Farmacia Alberto Mart¨ªn Barrios por la banda terrorista, "lo que sirvi¨® de detonante para el inicio de tales actividades".
Barrionuevo y Vera, puestos de acuerdo con Damborenea, con el que hab¨ªan celebrado varias reuniones, autorizaron a Sancrist¨®bal, entonces gobernador civil de Vizcaya, a que "organizara el secuestro en Francia de alg¨²n miembro de ETA que tuviera la suficiente informaci¨®n en relaci¨®n al secuestro del se?or Mart¨ªn Barrios, concret¨¢ndose el objetivo en Larretxea Go?i".
Siempre con la aprobaci¨®n de Barrionuevo y Vera, contin¨²a el fiscal, Sancrist¨®bal encomend¨® la operaci¨®n a Francisco ?lvarez, delegado de la Lucha Antiterrorista para el Pa¨ªs Vasco y Navarra, quien, despu¨¦s de una labor de vigilancia en la que particip¨® Amedo, envi¨® a Francia a un inspector y tres miembros de los GEO (Grupo Especiales de Operaciones) que intentaron el secuestro sin conseguirlo y fueron detenidos y encarcelados por las autoridades francesas.
Fracasada la acci¨®n y tras hallarse el cad¨¢ver de Mart¨ªn Barrios, los dirigentes de Interior acordaron realizar un nuevo secuestro en Francia, aunque sin intervenci¨®n de funcionarios espa?oles. El nuevo objetivo fue Mikel Luj¨²a Gorostiola, considerado destacado miembro de ETA y la acci¨®n ser¨ªa ejecutada por dos mercenarios franceses , Mohand Talbi y Jean Pierre Echalier.
Pero el d¨ªa se?alado para el secuestro, el 4 de diciembre de 1983, Talbi y Echalier llamaron a la puerta de Segundo Marey, en su domicilio de Hendaya, y confundi¨¦ndole con Luj¨²a, le metieron por la fuerza en un autom¨®vil y emprendieron la marcha en direcci¨®n a Espa?a.
Tras diversas peripecias, el paso a Espa?a por la frontera navarra de Dantxarinea fue facilitado por Amedo, quien se dirigi¨®, con los secuestradores y su v¨ªctima, a una caba?a proxima a Colindres (Cantabria). Por el camino se les unieron los inspectores Julio Hierro y Francisco, Saiz Oceja, a quienes Francisco ?lvarez encomend¨® la misi¨®n de acompa?arles dici¨¦ndoles que se trataba "de una cuesti¨®n de Estado, respaldada por el Gobierno y de ¨ªndole secreta".
"Asentimiento del ministro"
Conocido el error, tanto por comunicaci¨®n de Vera como de Amedo, se reunieron Sancrist¨®bal, Garc¨ªa Damborenea, ?lvarez y Planchuelo, quienes se mostraron "de acuerdo en continuar el secuestro, con objeto de conseguir la liberaci¨®n del inspector y geos detenidos en Francia". Sancrist¨®bal se lo comunic¨® a Barrionuevo, "obteniendo el asentimiento del ministro".El escrito del fiscal detalla varios comunicados que se redactaron en los d¨ªas siguientes, en los que se exig¨ªa la liberaci¨®n de los cuatro detenidos en Francia bajo la amenaza de ejecutar a Marey, que hab¨ªa quedado, custodiado por Saiz Oceja y los inspectores Luis Hens y Jos¨¦ Ram¨®n Corujo.
El d¨ªa 8 de diciembre fueron liberados en Francia el inspector y los geos espa?oles por decisi¨®n de la Corte de Acusaci¨®n de Pau. Dos d¨ªas despu¨¦s, "decididos a liberar a Marey", Sancrist¨®bal comunic¨® con Barrionuevo, "que mostr¨® su conformidad".
Garc¨ªa Damborenea redact¨® un comunicado en el que idearon poner como firma "GAL Grupos Antiterroristas de Liberaci¨®n", que fue traducido al franc¨¦s y colocado en el bolsillo de Marey al ser liberado. Finalmente, trasladaron a Marey a Francia, dej¨¢ndole de madrugada un kil¨®metro m¨¢s all¨¢ de la frontera. Michel Dom¨ªnguez avis¨® a la polic¨ªa gala por tel¨¦fono y les advirti¨® que acudieran pronto, debido al intenso fr¨ªo reinante.
Durante los diez d¨ªas que dur¨® el secuestro de Marey, sus guardianes le tuvieron con una capucha en la cabeza, alz¨¢ndosela cuando ten¨ªa que comer. A causa del encierro, Marey sufri¨® un "estre?imiento rebelde", hundimiento de la resistencia f¨ªsica, adelgazamiento de siete kilos y debilitamiento de la masa muscular "y sobre todo", a?ade el fiscal, una reacci¨®n de terror con neurosis "que hace al paciente desear la muerte". El fiscal describe tambi¨¦n una bronquitis cr¨®nica y afecciones como conjuntivitis, escoriaciones y saba?ones a causa del fr¨ªo.
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