Los cineastas franceses ven peligrar la excepci¨®n cultural
La llamada "excepci¨®n cultural", es decir, el derecho a no tratar las "obras del esp¨ªrit" como meras mercanc¨ªas y, por consiguiente, la necesidad de proteger la creaci¨®n en los pa¨ªses que creen autodefinirse en parte gracias a su peculiaridad cultural, vuelve a estar en peligro. Eso es lo que han denunciado en los reci¨¦n finalizados Rencontres Cin¨¦matographiques de Beaune (Francia) los profesionales aIl¨ª reunidos
En 1993, la negociaci¨®n del GATT (Acuerdo General sobre Tarifas Aduaneras y Comercio) renunci¨® a incluir dentro del acuerdo liberalizador el sector cultural y todos los productos audiovisuales. Ahora, el AMI (Acuerdo Multilateral sobre Inversiones) amenaza con convertir en papel mojado los sistemas de ayuda, de cuotas, de derechos de autor o de reglamentaci¨®n de inversiones que garantizan la supervivencia de la producci¨®n cultural audiovisual en distintos pa¨ªses europeos.
El AMI es un proyecto nacido en el seno de la OCDE (Organizaci¨®n para la Cooperaci¨®n y el Desarrollo Econ¨®mico) que ha de servir para liberalizar las inversiones en todos los pa¨ªses miembros. En nombre de una "convergencia t¨¦cnica", que hace que la l¨ªnea telef¨®nica pueda servir tanto para una conversaci¨®n entre amigos como para enviar im¨¢genes, se quiere equiparar a la publicidad, la edici¨®n, los contenidos inform¨¢ticos o la creaci¨®n audiovisual. "Un filme no es un fax", dicen los cineastas reunidos en Beaune.
Para los profesionales de la imagen, "los gobiernos de los Estados de la OCIDE, as¨ª como de la UE, han de aceptar la excepci¨®n cultural teniendo en cuenta la referencia establecida en los principios y l¨ªmites del GATT, as¨ª como una exclusi¨®n plena y completa del AMI de los derechos de propiedad intelectual".
Ambig¨¹edad de Espa?a
Los pa¨ªses que desean que el AMI no haga excepci¨®n cultural alguna son, sobre todo, EE UU y Jap¨®n, no en vano los dos grandes dominadores del mercado mundial audiovisual. Francia, Irlanda, Grecia, Canad¨¢, B¨¦lgica y Australia desean que se mantengan las medidas de proteccionismo cultural. Alemania no se manifiesta abiertamente debido a que, por su estructura federal, ¨¦sa es una competencia que corresponde a cada land, Reino Unido y Espa?a mantienen una posici¨®n ambigua, m¨¢s pr¨®xima a la de Estados Unidos que a la de la mayor¨ªa de sus socios europeos.Para ei cineasta espa?ol Fernando Trueba, presente en Beaune, "hay que movilizarse en favor de la excepci¨®n cultural como ya lo hicimos en 1993. Y hay que luchar tambi¨¦n para que la Comis¨ª¨®n Europea ponga en pie, aunque sea a t¨ªtulo experimental, un fondo europeo de garant¨ªas que respalde la financiaci¨®n, a trav¨¦s de bancos y financieras privadas, de una producci¨®n cinematogr¨¢fica europea". Luciana Castellina, presidenta de la Comisi¨®n de Relaciones Exteriores del Parlamento Europeo, record¨® que "de las 22 pel¨ªculas que m¨¢s ¨¦xito han tenido este a?o en Europa, 20 son estadounidenses"
Babelia
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