El director del Cesid intentan tranquilizar a los agentes secretos ante el juicio de las escuchas

El director general del Cesid, Javier Calder¨®n, ha difundido una nota interna para tranquilizar a sus 1.700 agentes ante el pr¨®ximo juicio por las escuchas del servicio secreto. Calder¨®n reconoce que el procesamiento de seis funcionarios del centro, tres de ellos en activo, ha generado una "inquietud generalizada" en el Cesid. La nota omite pronunciarse sobre la ilegalidad de las escuchas o las responsabilidades del ex director del Cesid Emilio Alonso Manglano y del ex jefe operativo Juan Alberto Perote, pero defiende a los funcionarios que se limitaron a "cumplir con su deber".

La decisi¨®n de la titular del Juzgado de Intrucci¨®n n¨²mero 43 de Madrid, Ana Mar¨ªa P¨¦rez Marug¨¢n, de ordenar la apertura de juicio oral -f¨®rmula equivalente al procesamiento en el procedimiento abreviado- contra todos los miembros del antiguo Gabinete de Escuchas del Cesid ha ca¨ªdo como un mazazo en el servicio secreto. Hasta el punto de que su m¨¢ximo responsable, Javier Calder¨®n, se ha sentido obligado a difundir una nota interna para serenar los ¨¢nimos.Aunque los antiguos miembros del centro que se sentar¨¢n en el banquillo para responder de un presunto delito de interceptaci¨®n de comunicaciones privadas -penado con hasta seis meses de arresto e inhabilitaci¨®n- son ocho, la circular de Calder¨®n evita pronunciarse sobre el comportamiento de Manglano y Perote y se refiere ¨²nicamente a los seis funcionarios del Gabinete de Escuchas que, afirma, se limitaron a "cumplir con su deber".

La circular reconoce la "sorpresa" con que se ha recibido la decisi¨®n de la juez -sobre todo, porque el fiscal se limit¨® a acusar a Perote, exonerando a los dem¨¢s- y la "inquietud generalizada" que ha provocado entre los miembros del Cesid. Para paliarla, Calder¨®n anuncia que dichos funcionarios tendr¨¢n "todo el respaldo" del centro y expresa su confianza en que ser¨¢n finalmente exonerados de toda responsabilidad.

El director del Cesid tambi¨¦n explica a sus subordinados que ha advertido al Gobierno sobre las "repercusiones para la operatividad del centro" que puede tener una decisi¨®n como la que ha adoptado la juez.

Un alto cargo del Ministerio de Defensa explic¨® que no se trata de defender la "obediencia ciega" y que los funcionarios no pueden escudarse en el cumplimiento del deber cuando reciben ¨®rdenes delictivas. Record¨®, sin embargo, que la propia juez archiv¨® inicialmente el caso por considerar que no hab¨ªa delito. "No se puede pedir a una secretaria que sea capaz de dilucidar la legalidad de una orden que ofrece dudas incluso a los propios jueces. Ning¨²n servicio del mundo puede funcionar si los agentes se arriesgan a sentarse en el banquillo por cumplir las ¨®rdenes de sus superiores", agreg¨®.