Un juez de EE UU pone en libertad a la ni?era brit¨¢nica condenada a perpetuidad por un jurado

El juez Hiller Zobel anunci¨® ayer una decisi¨®n salom¨®nica. Rebaj¨® el duro veredicto del jurado de Cambridge (Massachussets), pero sin declarar inocente a Louise Woodward. La joven canguro brit¨¢nica, seg¨²n el juez, es responsable de la muerte del beb¨¦ norteamericano Matthew Eappen, pero de modo indirecto. No fue autora de un asesinato con intenci¨®n y malicia, sino de un homicidio involuntario. El juez estim¨® que los 279 d¨ªas que ha pasado en prisi¨®n son castigo suficiente y la puso en libertad. Zobel us¨® el privilegio que tienen los jueces norteamericanos para alterar la decisi¨®n de un jurado

El homicidio involuntario lleva aparejado una condena m¨¢xima de 20 a?os de prisi¨®n, pero el juez puede establecer el tiempo de privaci¨®n de libertad que estime conveniente. Zobel anunci¨® anoche que considera que los nueve meses que ha pasado Woodward en prisi¨®n son un castigo suficiente y la puso en libertad, aunque sin concederle el derecho a salir de EE UU. La ni?era se hab¨ªa vuelto a declarar inocente y el fiscal hab¨ªa vuelto a exigir que pasara 15 a?os como m¨ªnimo entre rejas. La noticia fue acogida con entusiasmo en Elton, la localidad brit¨¢nica de donde es originaria Woodward.El pasado 30 de octubre, tras deliberar durante dos d¨ªas y medio, el jurado de Cambridge, compuesto por nueve mujeres y tres hombres, declar¨® a Louise Woodward culpable de asesinato en segundo grado, es decir con intenci¨®n y malicia, del ni?o al que cuidaba. Woodward fue condenada a cadena perpetua, una pena de la que tendr¨ªa que cumplir al menos 15 a?os antes de poder obtener la libertad provisional.

El magistrado de Cambridge tambi¨¦n intent¨® ayer algo completamente nuevo: comunicar su decisi¨®n a trav¨¦s de Internet. Tal era la expectaci¨®n despertada que el juez Zobel, pese a definirse como un "un hombre cl¨¢sico" en sus ideas y sus costumbres, crey¨® oportuno recurrir al m¨¢s nuevo modo de comunicaci¨®n de masas. Sin embargo, un problema de corriente el¨¦ctrica en el ordenador del tribunal impidi¨® que el texto del juez fuera difundido por correo electr¨®nico a la hora anunciada. La comunicaci¨®n se hizo, pues, al modo tradicional, con copias difundidas a los presentes.

"Despu¨¦s de una intensa y fr¨ªa reflexi¨®n", escribi¨® el juez, "he llegado a la firme certeza moral de que ser¨ªa una alteraci¨®n de la justicia permitir que, con estas pruebas, esta acusada siga siendo considerada autora de un asesinato en segundo grado".

"Guiado por la raz¨®n y por la conciencia", Zobel rebaj¨® el veredicto a homicidio involuntario.

La decisi¨®n del jurado popular de Cambridge provoc¨® desde el primer momento la ira de mucha gente en Estados Unidos. Con las pruebas aportadas por la acusaci¨®n durante la vista, no qued¨® probado m¨¢s all¨¢ de cualquier duda razonable que, el pasado 4 de febrero, Woodward zarandeara al beb¨¦ hasta golpear su cabeza contra un objeto duro. En el Reino Unido ese sentimiento fue acompa?ado de la convicci¨®n de que la xenofobia, el hecho de que Woodward sea extranjera, pes¨® mucho en la dura sentencia del jurado. Cambridge es una zona con una fuerte implantaci¨®n irlandesa y donde los brit¨¢nicos no son muy populares.

Mientras numerosas movilizaciones populares ped¨ªan clemencia para Woodward en uno y otro lado del Atl¨¢ntico, el juez Zobel escuch¨® el martes de la pasada semana las alegaciones en contra de la decisi¨®n del jurado presentadas por los abogados de la ni?era. ?stos le pidieron que absolviera y dejara en libertad a la muchacha, o convocara un nuevo juicio. Tras la audiencia, el juez ten¨ªa otras dos opciones: mantener la sentencia de asesinato en segundo grado o reducirla a homicidio involuntario.

La denuncia de los padres

Woodward es una joven brit¨¢nica que el pasado a?o se estableci¨® en EE UU y entr¨® a trabajar como au pair en el hogar de Sunil y Deborah Eappen, con la tarea de cuidar a sus dos hijos peque?os, entre ellos el reci¨¦n nacido Matthew.El pasado 4 de febrero, Matthew, estando al cuidado de la ni?era, entr¨® en coma. El beb¨¦, de ocho meses, fue trasladado a un hospital infantil donde se le diagnostic¨® m¨²ltiples traumatismos craneales y donde falleci¨® al cabo de cinco d¨ªas.

Los padres del beb¨¦ acusaron a la canguro brit¨¢nica de haberlo maltratado el d¨ªa de autos. Las razones citadas para esa conducta eran el enfado de Woodward porque los Eappen le hab¨ªan probidido seguir saliendo de noche a tomar copas y asistir a conciertos musicales, y su incapacidad para lidiar con los lloros de Matthew.

En el juicio fueron presentados testimonios m¨¦dicos contradictorios que no probaron de modo suficiente que Louise Woodward golpeara intencionadamente al beb¨¦ el d¨ªa en que entr¨® en coma.

En cambio, s¨ª que fueron aportadas pruebas que retrataron a la ni?era como poco interesada en su trabajo y fr¨ªa en su relaci¨®n con los ni?os a su cargo. El matrimonio Eappen afirma que, durante los cinco d¨ªas en que el beb¨¦ luch¨® contra la muerte, Louise ni le visit¨® ni se interes¨® por su suerte.