Mariano Barb¨¢cid negocia volver a Espa?a para crear un Centro Nacional del C¨¢ncer
El Instituto Carlos III busca las infraestructuras y la financiaci¨®n
El Instituto Carlos ha emprendido un nuevo intento, que espera definitivo, por recuperar para la ciencia espa?ola al qu¨ªmico manchego Mariano Barbacid, residente en Estados Unidos desde hace 24 a?os. Este proyecto oficial consiste en crear un Instituto Nacional del C¨¢ncer, dirigido por el propio Barbacid, que aglutine un buen plantel de cient¨ªficos e integre los distintos trabajos de investigaci¨®n b¨¢sica y cl¨ªnica avanzada. En estos momentos se discuten las infraestructuras m¨¢s adecuadas y las fuentes de financiaci¨®n para que la iniciativa sea viable.
Mariano Barbacid, de 47 a?os, cesar¨¢ pr¨®ximamente como vicepresidente de investigaci¨®n de Bristol Myers Squibb, en Princeton (EE UU), compa?¨ªa farmac¨¦utica en la que ha ejercido una intensa actividad de investigaci¨®n b¨¢sica contra el c¨¢ncer en los ¨²ltimos a?os. Al tiempo que otras ofertas formuladas desde los centros m¨¢s relevantes en este campo en Estados Unidos, Barbacid estudia la que puede devolverle definitivamente a su pa¨ªs. Como miembro de un joven equipo de investigadores del Instituto Nacional del C¨¢ncer en Maryland, Barmbacid salt¨® a las primeras paginas de la ciencia internacional en 1982 al identificar el primer oncogen humano. A partir de este punto, su trabajo ha con sistido en una persecuci¨®n sin cuartel de f¨¢rmacos que consigan inhibir estos genes y con ello impedir el crecimiento tu moral. Algunos de ellos, a¨²n en experimentaci¨®n animal, han ofrecido ya resultados es peranzadores. Este cient¨ªfico, portavoz incansable de todos sus colegas espa?oles introducidos en la ciencia y la medicina de EE UU que reclaman m¨¢s medios para la investigaci¨®n en Espa?a, est¨¢ ahora dispuesto a volver. Pero no a un despacho. No se comprometer¨¢, comenta uno de sus colaboradores, hasta que no le asegure-n unas garant¨ªas m¨ªnimas, t¨¦cnicas y financieras, para que pueda hacer lo que m¨¢s le interesa: investigar.
Plan estrat¨¦gico
Mariano Barbacid, que ayer particip¨® en Madrid en una reuni¨®n internacional sobre c¨¢ncer organizada en el hospital Ram¨®n y Cajal, evit¨® hacer ning¨²n tipo de declaraciones.El proyecto de crear un Centro Nacional del C¨¢ncer es una vieja idea acariciada por Barbacid. Y la iniciativa en negociaci¨®n tendr¨ªa como modelos el Memorial Sloan Kettering Center y el M. D. Anderson de Estados Unidos, centros integrales en los que se hace investigaci¨®n b¨¢sica de alta calidad y tratamiento cl¨ªnico muy avanzado. Los onc¨®logos espa?oles e investigadores b¨¢sicos se quejan desde hace a?os de la falta de un plan estrat¨¦gico a escala nacional que coordine los trabajos existentes en c¨¢ncer, muchos de los cuales se quedan a mitad de realizaci¨®n por falta de objetivos claros o, simplemente de dinero para seguir.Las negociaciones se desarrollan en estos momentos con un fuerte impulso de la direcci¨®n del Instituto Carlos III, dependiente del Ministerio de Sanidad. Dado que el nuevo organismo tendr¨¢ un car¨¢cter nacional, las primeras conversaciones se han llevado a cabo con los dirigentes auton¨®micos. Dos aspectos que ser¨¢ preciso solucionar vienen dados por la infraestructura que acoger¨¢ el futuro instituto y sus fuentes de financiaci¨®n. En un principio se barajaron para instalar el embri¨®n del centro dependencias del Centro Nacional de Biotecnolog¨ªa o del Instituto de Investigaciones Biom¨¦dicas del CSIC. Pero ninguna de estas instalaciones le parecieron las adecuadas al propio Barbacid, que descartaba cualquier tipo de soluci¨®n provisional, seg¨²n han comentado a EL PA¨ªS fuentes cercanas a la negociaci¨®n.' En estos momentos el candidato con m¨¢s opciones es el edificio del antiguo hospital Victoria Eugenia, de la Cruz Roja.
Sobre la financiaci¨®n cantidades que a buen seguro no ser¨¢n nada desde?ables para un proyecto de esta envergadura, se buscan f¨®rmulas que no resten fondos p¨²blicos a los ya destinados a la investigaci¨®n sanitaria, y que permitan, como sucede en pa¨ªses como EE UU, una colaboraci¨®n, en proyectos conjuntos, con las empresas privadas.
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