Gervasio S¨¢nchez muestra el horror de las minas antipersonas
Desde 1995, Gervasio S¨¢nchez opt¨® por contribuir con sus fotos a la campa?a para la prohibici¨®n de la fabricaci¨®n y difusi¨®n de las minas antipersonas. Durante este periodo fotografi¨® las zonas con mayor saturaci¨®n de estos artefactos. Actualmente hay 200 millones en el mundo. Hizo causa com¨²n con la Unesco y las ONG que colaboraron en la realizaci¨®n de una exposici¨®n de 66 fotos, que ahora se muestra en el C¨ªrculo de Bellas Artes.
Parad¨®jicamente fue el encargo de una revista del coraz¨®n la que puso en contacto a Gervasio S¨¢nchez (C¨®rdoba, 1959) con un submundo de horror y desolaci¨®n en Kuito (Angola) en 1995, y as¨ª lo explica: "All¨ª fui testigo, durante dos semanas, de las secuelas provocadas por las minas antipersonas; ej¨¦rcitos de mutilados, formados por hombres, mujeres y ni?os, se paseaban por un enclave de ruinas modernas; hab¨ªan sobrevivido a un cerco m¨¢s brutal que el de Sarajevo". S¨¢nchez es, adem¨¢s de un excelente narrador, un activista que se encuentra entre los mejores fot¨®grafos de guerra del mundo, seg¨²n John Berger, quien lo compara con Robert Capa en un reivindicativo texto incluido en el libro Vidas minadas, que acompa?a a la exposici¨®n que con el mismo t¨ªtulo qued¨® inaugurada ayer en el C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid. Ma?ana tambi¨¦n en este espacio presentar¨¢n esta publicaci¨®n los escritores Antonio Mu?oz Molina y Josefina Aldecoa, y el actor Carmelo G¨®mez.La experiencia de Angola fue el comienzo de un proyecto desarrollado durante dos a?os en los pa¨ªses m¨¢s minados de la tierra con este tipo de artefactos, fabricados exclusivamente para herir o mutilar, no para matar (Angola, Mozambique, El Salvador, Nicaragua, Afganist¨¢n y Bosnia-Herzegovina). Tanto el libro como la exposici¨®n conforman un relato con las historias personales de siete v¨ªctimas pertenecientes a estas ¨¢reas, cada una de ellas convertida en arquetipo de esos 70 nuevos mutilados que todos los d¨ªas amanecen en el mundo por causa de las minas antipersonas. Con el autor colaboraron, adem¨¢s de la Unesco, organizaciones humanitarias no gubernamentales -Interm¨®n, Manos Unidas y M¨¦dicos sin Fronteras- que dedican gran parte de sus activos a la reparaci¨®n de los efectos causados por esta suerte de asesinos de pl¨¢stico. Seg¨²n la ONU, se necesitar¨ªan 1.100 a?os y un presupuesto de 33.000 millones de d¨®lares para eliminar las minas sembradas actualmente.
Huir de lo superficial
La crudeza de las im¨¢genes captadas por S¨¢nchez participa del mejor y m¨¢s realista periodismo gr¨¢fico realizado en las grandes contiendas de este siglo, cuando a¨²n la capacidad de s¨ªntesis de una foto en blanco y negro no se hab¨ªa visto adulterada por los relatos de la televisi¨®n. "En este trabajo trato de huir de la superficialidad con que son presentados los problemas que afectan al Tercer Mundo por la mayor¨ªa de los medios de comunicaci¨®n, especialmente por la televisi¨®n", afirma el fot¨®grafo.Confiesa estar cansado de fotografiar moribundos y an¨®nimos; por ello "he intentado evitar en este proyecto que sus protagonistas se Viesen como un problema lejano de negritos de ?frica o de unos ni?os de ojos rasgados del sureste asi¨¢tico. Quer¨ªa que todo el mundo se sintiera reflejado en este espejo cruel de la verdad".
Vidas minadas. Fotograf¨ªas de Gervasio S¨¢nchez. C¨ªrculo de Bellas Artes (Marqu¨¦s de Casa Riera, 2; metro Banco). Hasta el 14 de diciembre. Mesa redonda, jueves 27, a las 20.00. C¨ªrculo de Bellas Artes. Presentaci¨®n del libro Vidas minadas.
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