El gui¨®n de siempre

Louis Van Gaal se sali¨® con la suya sin que el partido perdiera el tono emotivo, la carga ambiental, el car¨¢cter volc¨¢nico que siempre ha presidido los Bar?a-Atl¨¦tico. Gan¨® el equipo azulgrana sin apuros de tiempo ni remontadas heroicas. El Atl¨¦tico se remiti¨® al ¨¢rbitro, el m¨¢s joven de primera (30 a?os), para explicar su inferioridad. La fiesta cul¨¦ fue tan completa que el entrenador, en un gesto de clemencia con la grada, le regal¨® tres minutos a Iv¨¢n de la Pe?a.El choque tuvo el gui¨®n de siempre. Medio partido fue para el Atl¨¦tico y el otro para el Bar?a. Muy acostumbrada ya a este paisaje, la hinchada azulgrana dormit¨® un tiempo y despert¨® tras el descanso. Hasta el empate nadie abri¨® la boca. No hab¨ªa ni rastro de L?Elefant Blau en quinientos metros a la redonda -el grupo estuvo localizado y abrigado en las afueras del estadio en un intento de evitar gestos desestabilizadores sobre el encuentro-; los Boixos Nois entraron, salieron y volvieron al Camp Nou, con un minuto de silencio entremedio, para recordar a uno de sus compa?eros fallecido en un accidente; Gil, malhumorado con su equipo, dej¨® al palco en paz con su ausencia. Y Van Gaal, adem¨¢s, no es el mismo como espectador -presenci¨® el 5-4 de Copa desde la tribuna- que como entrenador -no hay manera de que deje la carpeta-.

El clima abrigaba al Atl¨¦tico. La presi¨®n rojiblanca revent¨® al Bar?a. Privado de pies, por la falta de extremos, y tapada la l¨ªnea de pase, por el encarcelamiento de Celades y Guardiola, el grupo azulgrana transit¨® por la cancha tiritando. Tuvo, de todas maneras, mucha paciencia. Negoci¨® un buen resultado para el acto segundo. No necesit¨® m¨¢s de tres vueltas de partido para encender el partido. Lleg¨® el empate, la expulsi¨®n de Santi, la entrada en escena de Pizzi, un penalti de moviola, un tercer gol muy v¨¢lido y, la grada, a coro, cantando Iv¨¢n de la Pe?a ante la sordera del entrenador.

Toda la liturgia de los Bar?a-Atl¨¦tico se hab¨ªa disparado pese a que la carga futbol¨ªstica del choque qued¨® muy rebajada por las ausencias de notables como Figo, Rivaldo, Andrei, Juninho, Vieri o Caminero. La funci¨®n, sin embargo, qued¨® embargada por la salida de escena del Atl¨¦tico, maltratado en la segunda parte por un colegiado que en el primer tiempo marc¨® muy encima al Bar?a.

El penalti acab¨® con las pretensiones rojiblancas y la expulsi¨®n de Santi le dej¨® a la intemperie. Diezmado, sobrevivi¨® como pudo ante el delirio de la hinchada azulgrana. El cul¨¦ celebrar¨¢ la Navidad con el liderato pese a tener un partido menos que los dem¨¢s.