Apasionante historia para los peque?os
A pesar de alg¨²n antecedente ilustre, sobre todo en el terreno de la animaci¨®n, no cuenta el cine catal¨¢n con una s¨®lida tradici¨®n de cine para ni?os. Por eso es una doble y muy satisfactoria sorpresa este filme de Rosa Verg¨¦s, que le ha salido redondo.El desaf¨ªo era m¨²ltiple para Verg¨¦s despu¨¦s de su tropiezo en Souvenir. De una parte, contar una historia para ni?os de corta edad, pero sin que el resto de la familia se aburriese con el asunto. De otra, su poca familiaridad para adaptarse a este tipo de cine..., adem¨¢s de los problemas a ¨¦l inherentes, desde seleccionar el elenco hasta trabajar con ni?os, tarea siempre dif¨ªcil.
De todo ello, Verg¨¨s sale bien airosa.Adem¨¢s de no renunciar a la ambici¨®n tem¨¢tica, como es el hilvanar una historia centrada en un concepto tan abstruso -para chicos y para grandes- como es el tiempo y su manipulaci¨®n, la directora nos obsequia, complicaci¨®n a?adida, con un verdadero musical encubierto, que, a partir de las extraordinarias coreograf¨ªas de Marta Almirall, termina por apuntalar brillantemente la atm¨®sfera entre on¨ªrica y surreal que el tema persigue.
Tic tac
Direcci¨®n: Rosa Verg¨¦s. Gui¨®n:R. Verg¨¦s y Edmon Roch. Fotograf¨ªa: Tom¨¢s Pladevall. M¨²sica: J. M. Pag¨¢n. Coreograf¨ªa: Marta Almirall. Producci¨®n: Vict¨®ria Borr¨¢s para Avanti Fil¨ªns y TV-3. Espa?a, 1997. Int¨¦rpretes: Sergi Ruiz, Laia Sol¨ªs,Mart¨ª Milla, Luciano Federico, Llu¨ªsa Castell, Jordi Boixaderas, Carlota Soldevila, Amau Vilardeb¨®. Madrid: cine Paz.
Magn¨ªfico ejemplo
El resultado es una pel¨ªcula c¨¢lidamente recomendable, uno de esos raros ejemplos de un filme para ni?os que se convierte tambi¨¦n en un apasionante ejercicio para adultos. Sin efectos especiales deslumbrantes, sino a partir de una l¨²cida reivindicaci¨®n de la imaginaci¨®n como motor de cualquier ficci¨®n, sea para grandes como para peque?os; una partitura magistral de J. M. Pag¨¢n; unos n¨²meros musicales de magn¨¦tica plasticidad, a cargo de la compa?¨ªa de danza Roseland, y la inmediata, instant¨¢nea espontaneidad de los jovenc¨ªsimos autores, Tic tac es no s¨®lo la pel¨ªcula para ni?os m¨¢s estimulante de la cartelera, sino tambi¨¦n la perfecta explicitaci¨®n de que las v¨ªas por las que debe transitar el cine Catal¨¢n est¨¢n (casi) todas abiertas y por explorar. Chapeau, pues, para el esfuerzo, que no debiera quedarse s¨®lo en este aislado y magn¨ªfico ejemplo.
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