Una Nochevieja de r¨¦cord

La Nochevieja de este a?o ha batido todos los r¨¦cords. Ha sido la m¨¢s celebrada de todos los tiempos: la Asociaci¨®n de Salas de Fiestas y Discotecas asegura que 700.000 personas tomaron la ciudad. En la Puerta del Sol se acumul¨® m¨¢s vidrio roto que nunca: unos 10.000 kilos, 2.000 m¨¢s que el a?o pasado, seg¨²n el Ayuntamiento. La Operaci¨®n Limpieza arranc¨® a las 3.45 y finaliz¨® a las 5.00, momento en el que la plaza se abri¨® al tr¨¢fico. El concejal de Limpieza, Luis Molina, capitane¨® un ej¨¦rcito de 25 barrenderos. Unos 200 agentes de la polic¨ªa vigilaron ese punto, pero no pudieron evitar que 12 personas resultaran heridas por otros tantos botellazos.El reloj de la Puerta del Sol marc¨® las 12 campanadas en 37 segundos, la misma velocidad que en 1996 y 20 segundos m¨¢s lento que en 1997. Al reloj no lo dejaron solo ni un segundo del ¨²ltimo d¨ªa del a?o. Un equipo de siete expertos en maquinarias y engranajes de relojes se encarg¨® de que las agujas caminaran al ritmo exacto hasta que lleg¨® el a?o nuevo.

Botellas al aire

De ellos depend¨ªa la entrada de a?o de las miles de personas que aguardaban las campanadas en la plaza. La mayor¨ªa, extranjeros, sobre todo italianos. Un hombre celebr¨® la llegada del nuevo a?o ba?¨¢ndose desnudo en una de las fuentes de la plaza. Algunos desaprensivos lanzaron botellas de cava al aire sin preocuparse de qui¨¦n iba a recibir el impacto del vidrio al caer. Doce personas resultaron con brechas a causa de los botellazos. Las ambulancias del Samur las atendieron all¨ª mismo. Los cerca de doscientos agentes de las fuerzas de seguridad que rodearon la plaza c¨¦ntrica de Madrid no impidieron esos incidentes.Por otro lado, tras varios decenios de silencio, el reloj de la fachada del Ayuntamiento de M¨®stoles (196.500 habitantes) silb¨® las 12 campanadas, informa Susana Moreno. Medio millar de vecinos despidi¨® el a?o 1997 en la plaza consistorial a un ritmo algo m¨¢s, r¨¢pido que el de quienes siguieron los dictados del reloj de la Puerta del Sol. Despu¨¦s de las uvas, se descorcharon 500 botellas de cava madrile?o cedidas por su fabricante. Hubo chocolate con churros.

Fiestas de Nochevieja las hubo de todo tipo, desde las que se celebraban en oscuras y fr¨ªas naves industriales con m¨²sica bakalao hasta las de edificios okupados o las de los bares de copas y salas de fiestas.

En Las Rozas hubo una muy especial: la de gente solitaria. Acudieron 500 personas de todo tipo. Hab¨ªa parejas de m¨¢s de 80 a?os, ni?os en cochecito y j¨®venes adolescentes. Viudas y viudos, divorciadas y divorciados, separadas y separados de la Agrupaci¨®n de Familias Monoparentales de Las Rozas dejaron atr¨¢s los recuerdos, malos o buenos, y se dedicaron a bailar, algunos en brazos de nuevas parejas.

Como Julio, de 81 a?os, que persigui¨® a Paquita, de 42, durante toda la noche: "Es muy joven y lleva minifalda", dijo. Se conocieron en el autob¨²s que les llev¨® de la Residencia para la Tercera Edad de Las Rozas. "No se ha despegado de m¨ª en toda la noche", coment¨® Paquita. Despu¨¦s de bailar un pasodoble, Julio se jact¨®, con sonrisa p¨ªcara: "Ya me siento m¨¢s animado".

De las cinco fiestas anunciadas sin el permiso del Gobierno regional, s¨®lo se celebr¨® la de Las Lomas, en la localidad de Boadilla del Monte.