Clinton anuncia que EE UU eliminar¨¢ el d¨¦ficit presupuestario en 1999

Estados Unidos alcanzar¨¢ el tan deseado objetivo de equilibrar sus finanzas p¨²blicas en 1999, Tres a?os antes de lo previsto. Bill Clinton confirm¨® ayer que la desaparici¨®n del d¨¦ficit, por primera vez desde 1969, es el elemento central del proyecto de presupuestos para 1999 que presentar¨¢ a comienzos de febrero. A partir de entonces, a?adi¨®, las finanzas p¨²blicas de EE UU conocer¨¢n super¨¢vit. Republicanos y dem¨®cratas ya han comenzado a polemizar sobre el destino de los futuros super¨¢vit.

El mantenimiento del buen estado de salud de la econom¨ªa norteamericana, que ya por su s¨¦ptimo a?o consecutivo de crecimiento, es la clave de estos planes presidenciales. De hecho, el incremento de los ingresos fiscales provocado por el crecimiento en todos los frentes de la actividad es la causa principal del final prematuro del d¨¦ficit. El pasado a?o, Clinton y la mayor¨ªa republicana del Congreso pactaron un programa presupuestario tendente a conseguir el equilibrio en el a?o 2002, pero las cosas han ido mejor que lo previsto.El d¨¦ficit presupuestario se situar¨¢ a finales del actual a?o fiscal de 1998 en unos 20.000 millones de d¨®lares (unos tres billones de pesetas al cambio actual), unos 22.600 millones de d¨®lares menos que lo calculado en el proyecto negociado el pasado a?o por la Casa Blanca y el Congreso. Esa cifra es considerada pr¨¢cticamente insignificante frente a los m¨¢s de 1,7 billones de d¨®lares del presupuesto norteamericano (260 billones de pesetas). El a?o fiscal en EE UU va del 1 de octubre al 31 de septiembre.

M¨¦rito compartido

El final de los d¨¦ficit anunciado por Clinton es considerado por The New York Times como el equivalente en las finanzas p¨²blicas del pa¨ªs a lo que fue la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn para su pol¨ªtica exterior. "El d¨¦ficit", recuerda ese peri¨®dico, "ha gobernado las pol¨ªticas dom¨¦sticas tanto como el desaf¨ªo sovi¨¦tico la pol¨ªtica exterior, reduciendo los deseos dem¨®cratas de un mayor gasto y limitando los deseos republicanos de rebajas fiscales".Clinton le otorga el m¨¦rito del final anticipado del d¨¦ficit tanto a su pol¨ªtica econ¨®mica -dirigida por el secretario del Tesoro, Robert Rubincomo al "trabajo duro y la productividad del pueblo norteamericano". Pero advierte que har¨¢ todo lo que est¨¦ en su poder "para evitar que se utilice un super¨¢vit futuro como pretexto para volver a las pol¨ªticas fallidas del pasado". Clinton recuerda que, entre 1981 y 1992, durante las presidencias republicanas de Ronald Reagan y George Bush, las finanzas p¨²blicas de EE UU ahondaron su crisis con una combinaci¨®n de reducciones de impuestos para las empresas y los particulares de rentas altas y nuevos gastos militares.

''Nos gastamos el dinero, multiplicamos por cuatro la deuda, hicimos subir los tipos de inter¨¦s y arrastramos al pa¨ªs a un terrible agujero, del que ahora estamos saliendo a duras penas", dice Clinton en referencia a sus dos predecesores. Su conclusi¨®n es: "Tenemos que mantener el esfuerzo".

Gasto social

Clinton no contempla proponer nuevas rebajas de la presi¨®n fiscal y desea aprovechar la salud presupuestaria para incrementar "modestamente'' el gasto social. Quiere reducir la edad a partir de la cual los norteamericanos se pueden beneficiar de los servicios p¨²blicos de sanidad para la tercera edad (Medicare) y restablecer algunas de las ayudas alimentarias para inmigrantes legales que fueron eliminadas por la presi¨®n de la mayor¨ªa republicana del Congreso. Se trata, seg¨²n su portavoz, Mike McCurry, "de ampliaciones modestas de programas ya existentes y cuya financiaci¨®n no obligar¨¢ a recurrir al super¨¢vit proyectado".Los republicanos, de acuerdo con su filosof¨ªa, proponen nuevas rebajas de la presi¨®n fiscal. No obstante, Newt Gingrich, el presidente de la C¨¢mara de Representantes, cree que EE UU deber¨ªa pasar varios a?os de super¨¢vit. Ese super¨¢vit, dice, tendr¨ªa que ser utilizado para enjugar la deuda del Gobierno federal, que actualmente alcance los 5,4 billones de d¨®lares (826 billones de pesetas).