Algo de miedo

Doy por supuesta la libertad de criterio que debe regir en los art¨ªculos de opini¨®n de los colaboradores de EL PA?S, pero en su columna M¨¢s Vicente Verd¨² ha sobrepasado los l¨ªmites que tal libertad puede ofrecer en una publicaci¨®n cuyo talante democr¨¢tico est¨¢ fuera de toda duda.No entro en la l¨®gica indignaci¨®n contra ETA, que comparto plenamente. Ni siquiera entro en afirmaciones tan infortunadase ,como las que su colaborador vierte sobre el papel de la Ertzaintza sobre la folcl¨®rica ense?a de Euskadi, o sobre las sospechas de connivencia con el terrorismo que supone a poderes y autoridades vascas, aunque dichas afirmaciones bastar¨ªan para constatar la falta de equidad que sobre el tema mantiene.

Donde no puedo evitar manifestar mi absoluto rechazo e indignaci¨®n es en la propuesta de que como ocurrir¨ªa en "cualquier pa¨ªs civilizado", el Ej¨¦rcito deber¨ªa intervenir. Quiz¨¢ el concepto de "civilizaci¨®n" al que se refiere sea el mismo al que recientemente se ha referido el se?or Fungairi?o. A lo peor es que se est¨¢ creando escuela en torno a la necesidad de que el Ej¨¦rcito "proteja" a su sociedad como propone, el articulista.

Si esto es as¨ª, desde luego estoy seguro de que EL PA?S estar¨¢ en el lugar adecuado, y ah¨ª se fundamentan mis dudas acerca de que el articulista sea un adecuado colaborador. M¨¢s bien con soflamas como la comentada tendr¨ªa un papel m¨¢s que destacado en un peri¨®dico cuyo enfrentamiento con el que usted dirige justifica, entre otras cosas, nuestra fidelidad como lectores de EL PA?S.