Baile de cifras

Juan Cambreleng se?ala que en el caso de los t¨ªtulos que ofreci¨® St¨¦phane Lissner en el periodo en el que ¨¦l" gestionaba el Real, las cifras no son coincidentes con las de su antecesor porque hay partidas que Lissner no inclu¨ªa. Concretamente se?ala que los 153 millones de pesetas que Lissner dec¨ªa que val¨ªa Turandot son inferiores a su cifra de 204, porque no incluye ni el coro ni el ballet, y ¨¦l s¨ª. En el caso de La zorrita astuta, donde hay una diferencia de 28 millones, Cambreleng recuerda que se ha tenido que contratar a una escolan¨ªa de ni?os cantores franceses, lo que encarece el espect¨¢culo."Hay un principio general, que es que yo tengo un presupuesto general y no me puedo pasar; puede que en un concepto la cifra vaya por arriba pero en otros tiro a la baja y de esta manera se compensa todo", se?ala el gerente del Real, quien presupuest¨® 144,9 millones para traer la ¨®pera Tannh?user, de Wagner, con producci¨®n del Teatro de la Maestranza, de Sevilla, con un alquiler de la producci¨®n situado en 18 millones, aunque la semana pasada ha llegado a un nuevo acuerdo y la traer¨¢ por 10. "Entre esa reuni¨®n del patronato y el pasado d¨ªa 15 hubo contraofertas, y hemos llegado a un nuevo acuerdo", afirma.

Otros t¨ªtulos que presentan el mismo problema son L'elisir d'amore, con una diferencia de 45 millones, o el ballet de Pina Bausch, que mientras para Lissner val¨ªa 75 millones, para Cambreleng vale 100. En cualquier caso, ¨¦ste se?ala que no son equiparables las partidas y, por tanto, no se est¨¢ hablando de los mismos conceptos de gastos: "Sin olvidar que un director esc¨¦nico o una compa?¨ªa pueden solicitar figurantes y otras cosas que hay que facilitarles y encarecen todo; lo importante es que al final las cuentas sean claras".