Ritmos, africanos en el f¨²tbol regional

En el f¨²tbol existe, desde no hace mucho, el otro extranjero. Es el que juega en Regional por pura afici¨®n. Madrid ha incorporado el ritmo africano a sus partidos de barrio o pueblo en la competici¨®n territorial. La mitad de los for¨¢neos que juegan en Regional proceden de ?frica,y sus or¨ªgenes o proyectos futbol¨ªsticos son muy diversos.Hay inmigrantes que dedican su poco tiempo libre a practicar una afici¨®n universal que en ?frica ha evolucionado extraordinariamente en los ¨²ltimos 20 a?os. Tambi¨¦n existe el estudiante que cuenta con el apoyo econ¨®mico de sus padres o el hijo de inmigrante nacido en Espa?a.

En total, en el f¨²tbol regional juegan 23 africanos. De ellos, 10 son de Marruecos, 8 de Guinea, 2 de Argelia, y Senegal, Libia y Liberia tienen 1 representante

Mohamed Sellami, argelino de 40 a?os, es el abanderado de los que buscan el profesionalismo. Trabaja tambi¨¦n en hosteler¨ªa. Entrena al Villaverde, equipo de Preferente. Sellami lleg¨® a jugar dos mundiales con las elecci¨®n de Argelia, el de Espa?a 82 y el de M¨¦xico 86. Cree que en su categor¨ªa "hay buen nivel futbol¨ªstico". Su meta est¨¢ en un equipo de Primera o Segunda. Est¨¢ totalmente integrado en Madrid y considera que el f¨²tbol es parte importante:"Gracias al deporte estoy muy bien. Me ha abierto muchas puertas". Est¨¢ casado con una madrile?a de Carabanchel, con quien tiene dos hijos peque?os.

Villaverde no ha tenido reparos en dar oportunidades a los africanos y cuenta tambi¨¦n con dos guineanos, los hermanos Mbuamangongo, Andr¨¦s, de 23 a?os, y Donato, de 20. El primero ha llegado a jugar en Segunda B con el Aranjuez. Tienen otro hermano, Tom¨¢s, de 24 a?os, que juega en Segunda Regional, en el Uni¨®n Manzanares. Los tres viven en el mismo piso y su punto en com¨²n es el f¨²tbol, ya que despu¨¦s estudian tres carreras diferentes. Tomas, ingenier¨ªa qu¨ªmica; Andr¨¦s, psicolog¨ªa, y Donato, farmacia. Viven en Espa?a desde adolescentes. Nacieron en Estados Unidos, residieron en Mozambique durante dos a?os y pasaron su ni?ez en Guinea, lugar de origen de su familia. El trabajo de su padre como diplom¨¢tico les hizo ser tan viajeros. Andr¨¦s est¨¢ seguro de, que va a triunfar, pero cree que las normativas de la Federaci¨®n Madrile?a de F¨²tbol limitan mucho a los extranjeros. "Tuve la oportunidad de militar en el Real Madrid y en el Rayo Vallecano, pero como no era espa?ol no quisieron contar conmigo para no tener problemas" dice. Estas limitaciones s¨®lo permiten jugar a los extranjeros mayores de 23 a?os en Tercera Regional. Sellami tambi¨¦n se queja: "Mi hermano vino con 22 a?os a Espa?a y era muy bueno. Ten¨ªa un nivel de Primera o Segunda, pero se tuvo que conformar con jugar al f¨²tbol sala con amigos hasta que se lesion¨® en un tobillo. Ahora trabaja en hosteler¨ªa o alba?iler¨ªa". Hace 10 d¨ªas sufri¨® un accidente mientras trabajaba en un chalet de Las Rozas. "Estuvo a punto de matarse".

Marruecos es el pa¨ªs que m¨¢s jugadores aporta. El m¨¢s destacado es Abdelali Faghani. Tiene 27 a?os y juega en el Moralzarzal, de Primera Regional. Seg¨²n su presidente, es muy bueno. Se lleva un peque?o salario del f¨²tbol, unas 20.000 pesetas, ali?adas con el apoyo de la junta directiva a la hora de alquilar un piso o comprar un coche. Trabaja en una tienda de saneamientos. Mustapha el Hichou, por su parte, tiene 20 a?os y naci¨® en Espa?a. Juega en La Mancha B, de Tercera Regional.

El liberiano David Kuro, de 33 a?os, juega en el Don Bosco B. Es el capit¨¢n del equipo y est¨¢ casado con una espa?ola. Vino cuando su pa¨ªs estaba en guerra. El senegal¨¦s Manuel Sow, de 27 a?os, lleva aqu¨ª cinco a?os y juega en el Guadalix, de Tercera. Se ha enamorado de una espa?ola y de la forma de vida de Espa?a: "El racismo es menor que en otros pa¨ªses, y me gusta la simpat¨ªa de la gente".

Amin Eshaghi, libio, de 21a?os, tiene gran proyecci¨®n enel f¨²tbol, seg¨²n el presidente de su equipo, Escuela de F¨²tbol de Barrio del Pilar. Hasta el pasado jueves, final del Ramad¨¢n, lo pas¨® muy mal. Recuerda que el d¨ªa de Reyes, cuando se lesion¨® en un partido: "Para quitarme el fr¨ªo, el presidente me quer¨ªa dar un caldo, pero le dije que no. El entrenador le tuvo que aclarar que en el mes de Ramad¨¢n no pod¨ªa ingerir nada hasta la noche".