El presidente de Banesto reclama una mayor flexibilidad en el mercado laboral

El presidente de Banesto, Alfredo S¨¢enz, se uni¨® ayer a la voces que reclaman m¨¢s flexibilidad en el mercado laboral. S¨¢enz, en el curso de una junta de accionistas que dur¨® cuatro horas, alert¨® contra el peligro que supone que las entidades bancarias se enzarcen en guerras de precios para ganar cuota de mercado e hizo especial ¨¦nfasis en la necesidad de controlar el riesgo. Adem¨¢s, dijo que no sabe qu¨¦ planes tiene el Santander, m¨¢ximo accionista de Banesto, para la entidad que preside, aunque no apuesta por las grandes integraciones inmediatas.

Alfredo S¨¢enz, tras glosar el buen momento por el que atraviesa la econom¨ªa espa?ola y dar por descontado que Espa?a cumplir¨¢ los criterios de Maastricht, afirm¨® que la convergencia "tambi¨¦n deber¨ªa producirse en materia de empleo"."Para ello", explic¨®, "Espa?a, como pa¨ªs, debe ser capaz de incrementar su tasa de productividad; de potenciar la formaci¨®n a todos los niveles; de favorecer la movilidad geogr¨¢fica de los trabajadores dentro del pa¨ªs y entre pa¨ªses; en definitiva, de desactivar todo lo que se oponga a la innovaci¨®n, a la generaci¨®n de oportunidades y de flexibilidad".

El presidente de Banesto dedic¨® parte de su intervenci¨®n ante la junta de accionistas de la entidad, celebrada ayer en Madrid y a la que acudi¨® el presidente del Santander, Emilio Bot¨ªn, a advertir del riesgo de las guerras de precios. "Donde probablemente el sector ha cometido un error es en la utilizaci¨®n del precio del cr¨¦dito, en un entorno de tipos a la baja, como factor de competitividad en orden a conseguir cuota de mercado a toda costa", dijo, para, a continuaci¨®n, defender un control muy riguroso del riesgo. De hecho, S¨¢enz adelant¨® que la estrategia de Banesto ser¨¢ centrarse en el mercado dom¨¦stico, pero dedicando una atenci¨®n muy especial al riesgo.

Tras la exposici¨®n de S¨¢enz se abri¨® el turno de preguntas, que dur¨® dos horas y fue utilizado por un total de 23 accionistas. ?stos mostraron su malestar por la ausencia de dividendo, preguntaron por el futuro de la participaci¨®n del Santander y plantearon la posibilidad de que el banco arbitre alguna medida especial respecto a los cr¨¦ditos concedidos a accionistas y empleados para comprar acciones de la entidad en la macroampliaci¨®n de 130.000 millones de pesetas de la ¨¦poca de Mario Conde. Algunos accionistas esgrimieron argumentos y plantearon preguntas similares a las que utilizan los abogados de Mario Conde y del resto de los imputados en el juicio oral que se sigue por el caso Banesto.

S¨¢enz, tajante, dijo que se repartir¨¢ dividendo en 1999, tal vez con una reducci¨®n de nominal y devoluci¨®n de capital a los accionistas, y que los pr¨¦stamos utilizados para comprar acciones "se tienen que pagar".