La convocatoria de un refer¨¦ndum la ley del aborto en Portugal

El Partido Socialista de Portugal ha aceptado la propuesta socialdem¨®crata de convocar un refer¨¦ndum sobre el aborto, una semana despu¨¦s de que el Parlamento luso aprobara el proyecto de las Juventudes Socialistas (JS) que despenaliza interrumpir el embarazo en las diez primeras semanas. El pacto ha sido calificado de "vergonzoso" por los comunistas y las asociaciones progresistas, que lo consideran "una grave desautorizaci¨®n de la Asamblea de la Rep¨²blica, el pilar b¨¢sico de la soberan¨ªa popular".

Las conspiraciones pol¨ªticas en Portugal alcanzan proporciones ins¨®litas, sorprendentes y, en algunos casos, casi alarmantes. En este ¨²ltimo, algunos diputados del propio partido del Gobierno reconocen en privado que "el cambalache pol¨ªtico sobre el aborto supone una aut¨¦ntica tomadura de pelo sin precedentes".No es para menos. Durante la noche del pasado mi¨¦rcoles, el pleno del Parlamento aprob¨® el mencionado proyecto socialista, que el a?o pasado se rechaz¨® por un solo voto. La victoria hab¨ªa desatado la euforia de los diputados socialistas m¨¢s progresistas que, ?por fin!, ve¨ªan aprobada una ley por la que hab¨ªan luchado durante a?os. Las asociaciones progresistas para la planificaci¨®n familiar daban por cerrado el ciclo de la anterior ley, similar a la espa?ola, "pero que, aplicada de forma muy restrictiva por la clase m¨¦dica, ha provocado en Portugal, cerca de 20.000 abortos clandestinos al a?o y se ha convertido en una de las primeras causas de mortalidad de las mujeres".

Vana ilusi¨®n. Veinticuatro horas despu¨¦s, el portavoz del grupo parlamentario socialista, Francisco Assis, admit¨ªa que el Gobierno que dirige el primer ministro Antonio Guterres, cat¨®lico pr¨¢cticante y opuesto "como ciudadano" a la liberalizaci¨®n del aborto, estaba estudiando la propuesta del l¨ªder del PSD (de orientaci¨®n liberal-conservadora), Marcelo Rebelo de Sousa, para convocar un refer¨¦ndum sobre el caso. Todo ello a cambio de un pacto para la reelecci¨®n del Tribunal Constitucional y la realizaci¨®n simult¨¢nea de las consultas sobre Europa y la regionalizaci¨®n.

En la madrugada de ayer, tras cinco horas de debate, el grupo parlamentario socialista, el secretariado nacional y la comisi¨®n pol¨ªtica del PS aceptaban la convocatoria de la citada consulta si el PSD respetaba todos los t¨¦rminos del acuerdo.

Las reacciones no se han hecho esperar. El secretario general del Partido Comunista, Carlos Carvalhas, considera el pacto como "una verg¨¹enza y un descr¨¦dito para los socialistas al aceptar un refer¨¦ndum a cambio de acuerdos sobre otras instituciones" y "una verg¨¹enza para el propio Tribunal Constitucional".