Preg¨®n con gafas de sol

Como cab¨ªa esperar, los encargados de abrir el carnaval de este a?o llevaban gafas oscuras, pero el p¨²blico que casi abarrotaba la plaza de la Villa a las siete de la tarde identific¨® a la perfecci¨®n a los reporteros del programa Caiga quien caiga, pregoneros del carnaval. Gracias a las mujeres, las mayores ovaciones se las llev¨® Javier Mart¨ªn. "Traigo el encargo de mi hija de hacerle una foto", dijo una de ellas, m¨¢quina en mano.

Como cab¨ªa esperar tambi¨¦n, hubo cr¨ªticas al alcalde. "Y que aguante mecha, porque para eso les ha tra¨ªdo", dijo otra, resolutiva. Juanjo de la Iglesia defendi¨® a los peatones: "Aunque parezca mentira, existen. ?ltimamente son dif¨ªciles de localizar, porque el alcalde les afea su conducta diciendo: ?Para qu¨¦ me gasto yo millones en t¨²neles? ?Para que el se?orito vaya andando?". Mario Caballero la tom¨® con el deporte: "En alguna ocasi¨®n se ha dicho, que s¨®lo engendra peligro. Por eso las disposiciones de nuestro alcalde, con buen criterio, dificultan la pr¨¢ctica deportiva... Desplacemos al oso de su ¨¢rbol disfraz¨¢ndole de vaca para que se vaya a pastar al Bernab¨¦u o al Calder¨®n mientras usamos el madro?o como cu?a". Javier Mart¨ªn record¨® la movida: "Que nuestro alcalde, con toda su corte y el resto de la familia del PePe, traigan de nuevo aquellos d¨ªas gloriosos de la movida madrile?a, cuando cualquier rinc¨®n era un carnaval". Y a?adi¨®: "Que estos d¨ªas riamos en las discotecas que a¨²n no han sido cerradas o en los teatros que a¨²n son teatros". Y Sergio Pazos proclam¨®: "Ahora la norma es transgredir la norma. Ahora todo vale, caiga quien caiga".