Los dos iguales

En la localidad de Legan¨¦s, ah¨ª al ladito de Madrid, han montado su primera feria de invierno. Para abrir boca sirvieron un "sensacional mano a mano" con dos novilleros punter¨ªsimos. Miguel Abell¨¢n, triunfador de la temporada, y El Juli, triunfador tambi¨¦n, aunque en tierras mexicanas, donde dice que ha hecho correr r¨ªos de baba a los manitos.De tan atrayente festejo era l¨®gico esperar una confrontaci¨®n de diferentes estilos. Pues no. Abell¨¢n y Juli, Juli y Abell¨¢n, son tal para cual. ?No hay ninguna diferencia entre ellos?, preguntar¨¢ el inquieto aficionado. Puestos a afinar, alguna hay. El Juli es m¨¢s fino, exhibe alguna dosis de empaque, y alguna vez se le desmaya la manita. Abell¨¢n es m¨¢s tosco, tiene menos aromas y parece m¨¢s enterado. Pero los dos abusan del derechazo hasta el mareo, manejan torpemente la mano izquierda, esconden la pierna para evitar la peligrosa cargaz¨®n de la suerte y meten el pico de la muleta una vez s¨ª y otra tambi¨¦n. Dos toreritos iguales. M¨¢s de lo mismo.

Ambos tuvieron delante una novilladita al borde de la invalidez que, a excepci¨®n del sexto, que era un novillo de verdad, no ofreci¨® especiales problemas. Pod¨ªan haber intentado hacer algo m¨¢s art¨ªstico e inspirado. Y no quisieron... O no supieron.

Miguel Abell¨¢n estuvo vulgar y sin acoplarse con su primer novillo, que probaba y punteaba un tantico. Entendi¨® al segundo de su lote, al que pas¨® con buena t¨¦cnica para terminar con aburridos mantazos. Y sac¨® un mont¨®n de vulgares e interminables series con la derecha a su tercero, sin tener en cuenta que el novillo ten¨ªa corto el viaje.

El Juli tuvo dos cabritas y un novillo m¨¢s serio. Demostr¨® buen gusto y torer¨ªa con el capote, pero luego les hizo la faena de todos: despegado, con el pico y a base de derechazos, muchos derechazos. Parece que no ha venido a ense?ar nada.

Aprovech¨® las escasas fuerzas de sus dos primeros enemigos con sendas faenas de derechazos a destajo y una ¨²nica tanda con la izquierda, sin temple ni mando. Un pase de pecho le sali¨® con pureza y autenticidad. Ese es el camino.

Desarmado

El Juli no pudo con el sexto. Lo dej¨® sin picar y sufri¨® las consecuencias. Intent¨® los inevitables derechazos y fue desarmado repetidas veces. Opt¨® por abreviar.Legan¨¦s ha levantado la feria de invierno en su plaza cubierta. En ella, los festejos adquieren un aire de velada de boxeo que desconcierta al espectador habitual de la fiesta. Los fumadores pasivos sufren la amenaza de las nubes de humo que recorren el ambiente y la charanga desafina con m¨¢s estruendo que en una plaza al aire libre. Qu¨¦ le vamos a hacer. Paciencia.