Dos exculpados hace nueve meses por una prueba de ADN siguen en prisi¨®n

En junio de 1997 los avances gen¨¦ticos permitieron demostrar la inocencia de dos ciudadanos marroqu¨ªes que llevaban seis a?os encarcelados en la prisi¨®n de Can Brians (Barcelona) por varias violaciones. Nueve meses despu¨¦s de descubrirse el error judicial, ambos siguen en prisi¨®n. El fiscal jefe de Catalu?a, Jos¨¦ Mar¨ªa Mena, no cree que haya que revisar su caso. Uno de los encarcelados, Abderrazak Mounib, comenz¨® el viernes su quinta huelga de hambre. Los hechos se remontan a octubre de 1991, cuando en varias comarcas catalanas se produjo una oleada de asaltos a parejas que hab¨ªan buscado con sus coches la intimidad de lugares apartados. El 11 de noviembre la polic¨ªa detuvo en la habitaci¨®n de su pensi¨®n de Terrassa a Ahmed Toummouch, emigrante marroqu¨ª de 40 a?os y alba?il de profesi¨®n. Dos d¨ªas despu¨¦s fue detenido Abderrazak Mounib, vendedor ambulante de 39 a?os. La investigaci¨®n estuvo plagada de irregularidades. Por ejemplo: Toummouch fue visto esposado por las v¨ªctimas antes de ser sometido a la rueda de identificaci¨®n y la foto de Mounib se public¨® en varios peri¨®dicos antes de que compareciera ante sus supuestas v¨ªctimas. En 1995 se reprodujo la ola de ataques, por la cual se termin¨® deteniendo en Manresa a Antonio Garc¨ªa Carbonell, de etnia gitana, al que entre otras cosas se le ocuparon varios objetos robados a las v¨ªctimas de los asaltos. Lo m¨¢s sorprendente: el individuo detenido era una fotocopia de Ahmed Toummouch. Las pruebas de ADN de los restos de semen de las prendas de una de las mujeres violadas en 1991 revelaron la culpabilidad de Garc¨ªa Carbonell y la inocencia de los marroqu¨ªes. La condena fue revocada. Pero a¨²n ten¨ªan pendientes otras tres sentencias por violaci¨®n. La cuesti¨®n es que en esos otros casos no hay rastros de semen que analizar.