"El deporte nacional es pedir al contribuyente"
Esperanza Aguirre prefiere mantener a raya la complejidad de los temas que aborda y, a sus 46 a?os, se desenvuelve en la pol¨ªtica con trato encantador y esp¨ªritu combativo. Con la excepci¨®n de las humanidades, desgrana los muchos asuntos educativos pendientes con un deje cansino que deja a un lado al pasar a la cultura. Sobrelleva malamente rematar la jornada teniendo que volver a casa a vestirse de largo y cambiar de bolso cuando lo exige el gui¨®n de la ministra de Cultura. "Menos mal que los trajes me los van regalando uno mi madre y otro mi t¨ªa", confiesa.Pregunta. ?Por qu¨¦ ha pedido cuestionario previo?
Respuesta. Mis colaboradores cumplen con su trabajo. Me parece perfecto lo que ellos pidan.
P. En la comunidad universitaria se oye que usted es ahora la que m¨¢s entiende de universidades en el ministerio. ?Es un elogio o una cr¨ªtica a su habilidad para elegir colaboradores?
R. Las personas de mi equipo son catedr¨¢ticos con m¨¢s de 15 a?os de experiencia. Que procedan de las aulas y no de la gesti¨®n no quiere decir que no conozcan la universidad, al contrario.
P. Parece que las reformas universitarias vienen con f¨®rceps.
R. Hay dos problemas urgentes y otros dos m¨¢s profundos, de m¨¢s largo plazo. Es urgente modificar los planes de estudio para reducir el n¨²mero de asignaturas. Respecto al profesorado, tambi¨¦n es urgente modificar la Ley de Reforma Universitaria. Pero un Gobierno minoritario no puede reformarla sin apoyo parlamentario. Lo primero est¨¢ pendiente de informes y se aprobar¨¢ en breve. Lo segundo est¨¢ en fase de negociaci¨®n parlamentaria.
P. ?Y a largo plazo?
R. Est¨¢n el problema de la financiaci¨®n y el de la coordinaci¨®n del sistema para garantizar la movilidad de los estudiantes, de forma que puedan estudiar en la universidad que elijan.
P. ?Qu¨¦ responde cuando los rectores piden dinero?
R. A m¨ª nunca me lo piden, salvo los dos que me lo pueden pedir: los de la UNED y la UIMP. La responsabilidad financiera es de las comunidades aut¨®nomas, que tienen las competencias.
P. Pero los rectores piden.
R. En Espa?a, el deporte nacional es pedir dinero al contribuyente.
P. ?Son pedig¨¹e?os?
R. No. Digo que todo el mundo quiere m¨¢s financiaci¨®n del bolsillo del contribuyente, pero son las Cortes las que deciden.
P. Los rectores achacan al Gobierno falta de liderazgo.
R. Eso era en septiembre. Le veo muy atrasado, porque ahora, seg¨²n usted, dicen que soy la que m¨¢s sabe de universidades.
P. El titular de la ¨²ltima entrevista que concedi¨® a EL PA?S, en diciembre de 1996, era: "A m¨ª no me aterra la palabra privatizar". ?Ha cambiado algo?
R. En absoluto. Al contrario. Este Gobierno ha hecho privatizaciones exitosas de las que me siento muy orgullosa. El tama?o del sector p¨²blico tiene que disminuir, porque incide en la competitividad, de la econom¨ªa. Otra cosa es el mundo educativo en el que nunca hemos planteado privatizaciones.
P. Si usted es candidata a la alcald¨ªa de Madrid, como se oye, no podr¨ªa sacar adelante el plan de humanidades. ?En ese caso, habr¨¢ merecido la pena semejante pol¨¦mica social?
R. Merece la pena la batalla por mejorar la ense?anza de las humanidades. Estoy decidida a hacer todo lo que est¨¦ en mi mano. Y, adem¨¢s, el debate me parece enormemente positivo.
P. ?Y la alcald¨ªa?
R. No creo que nadie se haya planteado que yo sea candidata. En la vida no puede descartarse nada a largo plazo, pero en las pr¨®ximas elecciones no lo creo.
P. Sus recientes declaraciones sobre el fundamentalismo en la sociedad vasca, ?fueron educativas o preelectorales?
R. Yo no habl¨¦ de educaci¨®n ni de l¨ªderes. Dije que hay mucho dogmatismo y mucho fundamentalismo instalado en la sociedad vasca. Y que un dogma instalado all¨ª es que la historia vasca es de antagonismo con el resto de Espa?a. La historia del Pa¨ªs Vasco es de solidaridad, generosidad y participaci¨®n en el proyecto com¨²n.
P. Usted sab¨ªa que iba a desencadenar una pol¨¦mica.
R. Siempre hablo por convicciones.
P. Hablando de convicciones, ?repetir¨ªa aquella dura conferencia de mayo, en el Club Siglo XXI, en la que acus¨® a los socialistas de condenar a la ignorancia a una generaci¨®n de espa?oles?
R. Lo que dije es que la Ley Org¨¢nica de Ordenaci¨®n General del Sistema Educativo (LOGSE) es una ley flexible de la que se ha hecho una interpretaci¨®n unidireccional: mirando solamente el principio de comprensividad [no segregaci¨®n de alumnos por rendimiento u otras causas]. Pero la ley consagra otro principio que puede resolver los problemas de una comprensividad exagerada: el de atenci¨®n a la diversidad. Ah¨ª nos estamos concentrando. Sigo pensando, como entonces, que no hay que confundir la igualdad de oportunidades con la igualdad de resultados, que no es posible por naturaleza humana.
P. ?Le han parecido tan malos como esperaba los resultados de la evaluaci¨®n sobre la secundaria?
R. Yo no prejuzgaba el resultado. He cumplido con mi deber: poner a disposici¨®n de la sociedad una radiograf¨ªa de lo que saben los chicos. Me parece muy preocupante comprobar el elevado porcentaje de chicos que no entienden lo que leen, que tienen muchas dificultades en la expresi¨®n escrita, que cometen muchas faltas de ortograf¨ªa o que tienen unos niveles muy bajos en historia, matem¨¢ticas y lengua. Por eso tomo medidas para mejorar la calidad de la ense?anza. Durante muchos a?os se ha estado midiendo la calidad de la ense?anza por los medios materiales empleados. Lo importante son los resultados. Por eso es importante el diagn¨®stico.
P. Usted ha garantizado que los colegios con jornada ¨²nica no cerrar¨¢n por la tarde. ?Ser¨¢ posible sin financiaci¨®n y plantilla suplementarias?
R. En ning¨²n caso se cerrar¨¢n por a tarde, contrariamente a lo que EL PA?S atribuy¨® al ministerio sin fundamento y provocando alarma entre los padres. La flexibilizaci¨®n del horario, que no su reducci¨®n, se har¨¢ cuando lo pida el 75% de los padres. No dude que resolveremos los problemas t¨¦cnicos caso por caso.
P. ?Y la alternativa a la religi¨®n? Si los tribunales dicen que no sea curricular ni evaluable...
R. No dicen eso. Dicen que no es inconstitucional que haya contenidos no evaluables. No que los evaluables sean inconstitucionales.
P. ?Y qu¨¦ har¨¢?
R. Establecer una asignatura de ¨¦tica c¨ªvica y ¨¦tica en valores que cubra ese vac¨ªo de formaci¨®n en los ni?os cuyos padres no quieren que den religi¨®n cat¨®lica.
P. ?Reabrir¨¢ el tema del precio de los libros de texto?
R. Lo que me gustar¨ªa es que los descuentos en los libros de texto fueran libres. Pero no desconozco que el mundo editorial es muy sensible sobre el asunto. No obstante, se ha conseguido algo muy positivo: que haya descuentos del 12%.
P. ?Es infundada la impresi¨®n de que ¨²ltimamente se siente usted muy metida en las alturas pol¨ªticas y le aburren los temas concretos?
R. Me apasionan los tenlas concretos. Otra cosa es que haya temas que s¨®lo interesen a un sector muy concreto, no tanto a la poblaci¨®n espa?ola.
P. ?Por ejemplo?
R. La reforma de las humanidades. Interesa a todos los ciudadanos. La prueba es que en tres meses se han publicado casi 700 art¨ªculos de opini¨®n.
P. ?C¨®mo va la cosa?
R. El Congreso me dijo en diciembre: "Usted ha precocinado el plato sin que yo estuviera en la cocina. Como quiero estar en la cocina, vuelva a empezar". As¨ª lo interpreto. Y tambi¨¦n me ha dicho: "Antes de volver a empezar, haga un dictamen". El dictamen va por muy buen camino, porque el presidente de la comisi¨®n, Juan Antonio Ortega y D¨ªaz-Ambrona, har¨¢ todo lo que est¨¦ en su mano para lograr el m¨¢s amplio consenso.
"Zamora no se gan¨® en una hora"
Pregunta. ?Hay acuerdo en la comisi¨®n Obispado-Cultura para integrar el claustro de los Jer¨®nimos en el plan del Prado?R. Hay acuerdo. El obispado accede a dejarnos el uso del claustro de los Jer¨®nimos y de su subsuelo. Nos ceden el usufructo del claustro y subsuelo a cambio de las obras que ellos necesiten en el centro parroquial y en la iglesia de los Jer¨®nimos.
P. ?Tienen ustedes un presupuesto concreto para rematar esa negociaci¨®n?
R. Si lo digo ser¨ªa el titular de la entrevista, y no lo pienso decir, porque ser¨ªa una estimaci¨®n y el proyecto definitivo no est¨¢ acabado. Lo ¨²nico que puedo contar es que el presidente del Gobierno ha garantizado 10.000 millones para inversiones de cultura para los pr¨®ximos a?os. Para las necesidades del Prado no hay problemas de dinero ni incompatibilidades urban¨ªsticas. Van a ganar la iglesia, el Prado y la ciudad.
P. Si no hay problema de dinero, ?qu¨¦ ocurre?
R. Zamora no se tom¨® en una hora. Nosotros tratamos de armonizar los intereses del arzobispado con los del museo.
P. Siguiendo con museos, ¨²ltimamente ha habido dos importantes ceses de directores de centros de arte contempor¨¢neo: Gloria Moure y Miquel Molins. No es su competencia directa, pero ?qu¨¦ opina de ello como ministra?
R. No es mi competencia, pero EL PA?S ya me ha propinado un editorial al calor de los ceses, no fuera a ser que yo saliera viva.
P. En el caso de Galicia, Gloria Moure ha sido destituida por la Xunta que preside su partido...
R. No veo qu¨¦ problema hay en que cambie un Gobierno por leg¨ªtima voluntad de los ciudadanos y que cambien a la directora. Por ejemplo, yo: ha cambiado el Gobierno, ha cambiado la tendencia pol¨ªtica del Gobierno (no en el caso de Galicia), pero ah¨ª est¨¢ Jos¨¦ Guirao, que sigue al frente del Reina Sof¨ªa, por cierto, un ilustre militante del PSOE.
P. Guirao se ha convertido en su bandera de la tolerancia.
R. Cuando queda alguien, es la bandera de la tolerancia, y cuando hay ceses, la culpa la tengo yo. El tema es que ha habido unas elecciones, han cambiado a la Moure. ?Qu¨¦ pasa con los directores de museos? ?Son cargos vitalicios?
P. Mi pregunta era si usted, como ministra de Cultura, ten¨ªa alguna opini¨®n.
R. La respuesta es que no me preocupan esos ceses porque los cargos de direcci¨®n no son vitalicios. Me interesa mucho que ponga que, personalmente yo, no he relevado al director del centro Reina Sof¨ªa.
P. ?Por qu¨¦ lo ha mantenido?
R. Si ceso, que ceso. Si no, por qu¨¦ los mantengo. Bueno, yo creo que ha pacificado la gesti¨®n del Reina, aunque eso no quiere decir que renuncie a relevar a Pepe Guirao el d¨ªa de ma?ana. Tambi¨¦n puede ocurrir que yo ma?ana deje de ser ministra. Lo que no entiendo es por qu¨¦ el relevo de un director de museo desde el punto de vista del peri¨®dico EL PA?S equivale a sectarismo en la cultura u opresi¨®n en el mundo cultural.
P. Eso no se ha dicho as¨ª.
R. El editorial se titulaba... [Cultura reaccionaria]. Hab¨ªan dado al bot¨®n del topicazo, pero menos mal que publicaron la carta de Manolo Soriano, el jefe de prensa. ?Y se dec¨ªa que yo hab¨ªa cesado a Lissner!, cuando aqu¨ª, en este mismo despacho, me he tirado hasta las doce de la noche intentando convencerle para que no se fuera. ?Y me acusan de cesar a Lissner! ?El colmo!
P. Hay invitaciones a la dimisi¨®n que encubren un cese.
R. El patronato aprob¨® al se?or Lissner su programaci¨®n y su presupuesto. Se fue porque le fall¨® Lonin Maazel y porque su Parsifal no iba a ser lo que ¨¦l ten¨ªa previsto y por otras razones, pero no porque yo se lo pidiera. Le ped¨ª en todos los tonos que se quedase porque a m¨ª me interesaba much¨ªsimo que inaugur¨¢ramos el Real con la misma persona que hab¨ªa hecho la programaci¨®n, pero no quiso. ?Que EL PA?S diga otra cosa es el colmo de los colmos!
P. Ya que estamos con el Teatro Real, hay un convencimiento general de que mantiene usted un pulso con el secretario de Estado de Cultura, Miguel ?ngel Cort¨¦s, sobre la permanencia de Cambreleng.
R. Cuando se fue Lissner, Cort¨¦s estaba encantado y yo no, pero los dos estuvimos de acuerdo en que la persona ideal para sustituirle era Cambreleng, una vez que yo hab¨ªa perdido la batalla de retener a Lissner. Por ahora la afici¨®n est¨¢ muy contenta y el teatro a rebosar. La ejecutiva puso pegas a la programaci¨®n que present¨® en diciembre. Cambreleng lo ha reconocido y se ha quedado en poner m¨¢s ¨®peras espa?olas y trabajar m¨¢s con escen¨®grafos espa?oles.
P. ?Quiere decir que usted y la afici¨®n est¨¢n con Cambreleng frente a Cort¨¦s?
R. No digo eso. Miguel ?ngel tiene todas mis competencias delegadas en esta materia. Es el presidente de la comisi¨®n ejecutiva y, como tal, hab¨ªa cosas en la programaci¨®n que no le gustaban, y hace muy bien en decirlo. Tiene toda mi confianza. La prueba es que Cambreleng ha cambiado la programaci¨®n. Una cosa es hacer la programaci¨®n de un teatro en funcionamiento y otra abrir un monstruo de esta naturaleza. Lissner se fue diciendo: "Madame, vous n'avez pas un teatre!". El reto de no tener un teatro y de que no se iba a abrir lo ha cumplido Cambreleng de forma admirable.
P. ?Qu¨¦ opini¨®n le merece el hecho de que Espa?a sea uno de los pa¨ªses en los que m¨¢s t¨ªtulos se editan y menos se lee?
R. Ha habido un ligero pero significativo cambio de tendencias, y creo que la fusi¨®n de los dos ministerios tendr¨¢ efectos positivos. Tenemos un plan para impulsar las bibliotecas escolares y una campa?a de fomento de la lectura en colaboraci¨®n con libreros y editores. Creo que la televisi¨®n puede hacer mucho por el fomento de la lectura. Todos dicen que el boom de Mar¨ªas en Alemania se debe a un programa de televisi¨®n.
P. De ¨¦l se habl¨® en el programa de Reich Ranicki, programa de un prestigio literario que no tenemos aqu¨ª.
R. S¨ª hay uno: el de S¨¢nchez Drag¨®.
P. No parece comparable.
R. Es un programa que est¨¢ muy bien. Vi uno interesant¨ªsimo sobre el 98.
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