El Mallorca frena en seco la marcha triunfal del Celta

La jugadas de estrategia, del Mallorca hundieron al Celta, que sigue sin ganar en el Luis Sitjar. Los cuatro goles isle?os fueron de jugadas a bal¨®n parado, una asignatura pendiente para los gallegos, tal como reeconoci¨® su entrenador, Javier Irureta, en los vestuarios. El equipo balear fren¨® en seco la marcha c¨¦ltica de un gran partido, muy abierto y de claro signo ofensivo.Un error en defensa y la sorprendente decisi¨®n del colegiado Jap¨®n Sevilla, que orden¨® repetir un penalti que Diezma le, hab¨ªa detenido a Amato ya que hasta cuatro jugadores gallegos pisaron el ¨¢rea antes de que golpeara el argentino, aniqluilaron al Celta en la primera parte. La ventaja de dos goles en el marcador fue un castigo excesivo para los hombres que dirige Irureta, y una recompensa exagerada para el Mallorca.

El equipo de H¨¦ctor Cuper, simplemente, se hab¨ªa aprovechado de la desmedida ambici¨®n c¨¦ltica -los visitantes jugaron siempre al ataque- para moverse a sus anchas, sobre todo por la parte izquierda donde corre Stankovic.

El equipo gallego apost¨® con decisi¨®n temeraria por el juego ofensivo, y en esa ruleta loca de la fortuna le toc¨® la peor parte. Primero recib¨ªo el latigazo del gol de Ezquerro, un jugador que ya contribuy¨® de forma significativa a la eliminaci¨®n del Celta de la Copa del Rey, marcando un gol clave en Bala¨ªdos. Despu¨¦s carg¨® con los inexcrutables designios arb¨ªtrales, al ser castigado con un penalti que los colegiados pocas veces sancionan -agarr¨®n de ?scar Vales a Amato a la salida de un c¨®rner- Y por si esto fuera poco, tuvo que asistir impotente a una nueva decisi¨®n de Jap¨®n Sevilla, que orden¨® repetir el penalti que Diezma le hab¨ªa detenido a Amato. Su compatriota Mena se encarg¨® de hacer subir el segundo gol al marcador.

Otro equipo se hubiese hundido, porque todo transcurri¨® al filo del descanso. Pero no el Celta, llamado esta temporada a realizar grandes gestas y que lucha por una plaza en las competiciones europeas. Los c¨¦lticos fueron un vendaval en la reanudaci¨®n, y en un abrir y cerrar de ojos empataron el partido. Ya estaban en el terreno de juego S¨¢nchez y Ratkovic y el Celta dio un cambio radical: puso la directa, y arroll¨® a un Mallorca sorprendido por la poderosa reacci¨®n. El equipo de Cuper deambul¨® grogui por el campo durante varios minutos, y su rival no supo o no quiso rematarlo. Amato sac¨® la casta para colocar el 3-2 en el marcador en otro cabezazo espectacular y cerr¨® la cuenta Stankovic con un fenomenal lanzamiento de falta directa. El Celta ya no tuvo respuesta.