Milosevic acepta la mediaci¨®n de Gonz¨¢lez

, El ministro de Exteriores yugoslavo, Zivadin Jovanovic, calific¨® ayer de aceptables los t¨¦rminos fijados en la conferencia de Bonn para la mediaci¨®n del ex presidente del Gobierno espa?ol Felipe Gonz¨¢lez. ?Hemos notado que Gonz¨¢lez es presentado ahora como representante de la UE y de la Organizaci¨®n para la Seguridad y la Cooperaci¨®n en Europa (OSCE) para Yugoslavia; eso quiere decir que se ha asumido la postura yugoslava de que no haya extranjeros en lo que se refiere a Kosovo?, explic¨® Jovanovic. Belgrado ya hab¨ªa advertido antes que su provincia del sur es ?un asunto interno?.El telediario serbio de anoche hab¨ªa abierto poco antes sus titulares asegurando que en Bonn ?se conden¨® el terrorismo alban¨¦s y se pidi¨® a los kosovares que inicien negociaciones?. La incapacidad del Grupo de Contacto para acordar una pol¨ªtica com¨²n frente a los excesos serbios en Kosovo es agua de primavera para el presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, y su nuevo Gobierno de ex comunistas y ultranacionalistas, pese a que no se han producido todav¨ªa reacciones oficiales. Ante la firme oposici¨®n rusa -un aliado hist¨®rico de Belgrado- y la evidente desgana de sus socios europeos, Washington se ha quedado solo solicitando la imposici¨®n de nuevas sanciones que, seg¨²n los expertos, no har¨ªan mucho m¨¢s da?o a la preag¨®nica econom¨ªa serbia. ?Ninguna de las represalias de las que se ha hablado tendr¨ªa un impacto directo a corto plazo en la vida de los ciudadanos?, advierte Ljubomir Madzar, un respetado economista serbio.

El Grupo de Contacto ha hecho finalmente suya la opini¨®n de los ministros de Exteriores alem¨¢n y franc¨¦s, que aseguraron la semana pasada en Belgrado que el r¨¦gimen serbio hab¨ªa cumplido una buena parte de las exigencias occidentales sobre Kosovo. Pero ni las fuerzas especiales se han retirado de la provincia sure?a -donde el martes una nueva operaci¨®n serbia en la zona de Decani se sald¨® con un n¨²mero todav¨ªa desconocido de v¨ªctimas-, ni existe libertad de movimientos en Kosovo, ni se ha iniciado un ?di¨¢logo incondicional? con los albaneses para devolverles la autonom¨ªa ni, mucho menos, se acept¨® en su momento la inmediata mediaci¨®n internacional.

Antes al contrario, el nuevo Gobierno nombrado el martes, calificado por grupos opositores como un ?gabinete de guerra? o la definitiva ?fascistizaci¨®n de Serbia?, incluye en una de sus vicepresidencias a Vojislav Seselj -el jefe de la extrema derecha, que a¨²n rechaza a estas alturas los acuerdos de Dayton- y otorga a los suyos del Partido Radical 13 carteras. Una de las explicaciones que se barajan es que Milosevic sabe que tendr¨¢ que hacer concesiones sobre Kosovo, y prefiere tener al ultranacionalista Seselj engolosinado en el poder antes que en la oposici¨®n. El l¨ªder alban¨¦s Ibrahim Rugova, que venci¨® abrumadoramente en las elecciones parlamentarias y presidenciales el domingo en Kosovo, ya se ha reunido con un consejo de notables para perfilar una plataforma negociadora con el r¨¦gimen de Belgrado.