Los GRAPO ponen dos bombas en una antigua aseguradora de Cord¨®n
Los GRAPO volvieron a actuar en Madrid 20 d¨ªas despu¨¦s de haber atentado contra tres oficiales de Hacienda. Ayer lo hicieron colocando dos artefactos en la aseguradora m¨¦dica Previasa, una antigua empresa de Publio Cord¨®n, el financiero secuestrado hace m¨¢s de mil d¨ªas por esta organizaci¨®n terrorista. Uno de los artefactos estall¨®, sin causar heridos entre los 50 empleados, mientras que el otro fue desactivado. La polic¨ªa estableci¨® artefactos un enorme cerco en el c¨¦ntrico barrio de Salamanca, que entorpeci¨® el tr¨¢fico durante cuatro horas.
Una llamada an¨®nima recibida sobre las 11.15 de la ma?ana en la sede de Previasa, en el n¨²mero 76 de la calle del Pr¨ªncipe de Vergara, avis¨® a los empleados de la colocaci¨®n de un artefacto en esas oficinas y anunci¨® su estallido para 10 minutos despu¨¦s. Tambi¨¦n alert¨® de otra bomba (aunque sin especificar en qu¨¦ ciudad) colocada en una cl¨ªnica del grupo Quir¨®n, que pertenece en un 84% a la fainilia Cord¨®n.Los empleados desalojaron ordenadamente el edificio de Madrid y, seg¨²n denunciaban ayer, tuvieron que insistir durante varios minutos para que los servicios de urgencia de la polic¨ªa respondieran a sus llamadas telef¨®nicas.
Apenas 10 minutos despu¨¦s de que los trabajadores salieran del inmueble, hizo explosi¨®n una bomba de escasa potencia depositada en el rellano de la tercera planta, causando destrozos en el ascensor y resquebrajando varios tabiques. Los da?os se estiman en varios millones.
La polic¨ªa, que ten¨ªa acordonada la zona, ampli¨® el cerco y cort¨® el tr¨¢fico en el tramo de la calle de Pr¨ªncipe de Vergara comprendido entre las calles de Juan Bravo y Mar¨ªa de Molina, ante la sospecha de que pod¨ªa existir al menos un segundo artefacto.
Sobre las dos de la tarde, los artificieros hallaron esta segunda bomba en el rellano de la quinta planta del edificio, justo debajo de una antigua vivienda de la familia Cord¨®n que actualmente est¨¢ en proceso de rehabilitaci¨®n. Los artificieros colocaron un cebo para hacer estallar el artefacto, pero ¨¦ste no se activ¨®, ante lo que decidieron desmontarlo.
Pilar Muro, esposa del secuestrado Publio Cord¨®n, que se hallaba en Madrid por tener acordada una entrevista oficial, acudi¨® a la zona al enterarse del atentado para mostrar su solidaridad con los ex empleados de su marido. Previasa fue adquirida el 11 de febrero por la firma alemana Deutsche Krakenversicherung (DKV), una de las m¨¢s importantes de Europa en el sector de seguros m¨¦dicos. No tiene ninguna vinculaci¨®n con Cord¨®n.
Los dos artefactos, tanto el que estall¨® como el que fue desactivado, estaban compuestos de un kilo de cloratita. Al menos el que explot¨® fue introducido en el edificio oculto dentro de un macetero, sin despertar sospechas, por lo que la polic¨ªa revent¨® despu¨¦s todo los maceteros del inmueble para comprobar que no escond¨ªan m¨¢s explosivos.
El titular de Interior, Jaime Mayor Oreja, declar¨® que los GRAPO s¨®lo buscan "notoriedad" aprovechando "la importancia l¨®gica que se da en Espa?a a los fen¨®menos terroristas". Seg¨²n el ministro, "los GRAPO ni han reaparecido ni han dejado de existir; est¨¢n donde est¨¢n". El delegado del Gobierno en Madrid, Pedro N¨²?ez Morgades, tambi¨¦n pidi¨® "que no se d¨¦ demasiada transcendencia" a esta nueva acci¨®n de la organizaci¨®n.
Los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre reemprendieron oficialmente su actividad el pasado 13 de marzo con la colocaci¨®n de dos bombas en sendas oficinas de Hacienda de Madrid y una tercera en otra de Alcobendas que fue desactivada. Con anterioridad, en concreto el 30 de enero, se produjo otro atentado con explosivos en una empresa de trabajo temporal sita en la avenida de Am¨¦rica, que, seg¨²n fuentes de Interior, fue inspirado por los GRAPO. El pasado 27 de marzo, el dirigente de los GRAPO Enrique Cuadra Echeand¨ªa aprovech¨® su comparecencia en la Audiencia Nacional para advertir de las "graves consecuencias" que acarrear¨¢ la negativa del Gobierno a responder a la "voluntad de negociaci¨®n" de su organizaci¨®n.
Los GRAPO y dos agentes del Cesid, en nombre del Gobierno, mantuvieron hasta hace un a?o repetidos contactos tendentes a la disoluci¨®n de este grupo, que acabaron sin acuerdos. Frente a la postura de Interior de no dar importancia a estos atentados, los dirigentes del grupo advierten que est¨¢n "muy cabreados" y que el pr¨®ximo a?o acabar¨¢n de cumplir condena casi la mitad de sus 50 reclusos.
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