Estados Unidos y Cuba

El presidente ha anunciado, como gesto generoso y arrogante, la atenuaci¨®n del embargo o bloqueo econ¨®mico. que mantiene su pa¨ªs contra Cuba desde 1961. Las medidas anunciadas se refieren a la reanudaci¨®n de vuelos, curiosamente llamados humanitarios, y a la autorizaci¨®n del env¨ªo de 1.200 d¨®lares anuales por cada ciudadano norteamericano con destino, en ambos casos, a la mayor de las Antillas. En esta declaraci¨®n se a?ade que permanecer¨¢ el embargo, as¨ª como la aplicaci¨®n de la tristemente conocida ley Helms-Burton.Para interpretar el fondo y las verdaderas intenciones de dicha decisi¨®n es necesario conocer lo siguiente: en EE UU existen actualmente agentes ilegales clandestinos, que proporcionan el env¨ªo de divisas con destino a personas radicadas en Cuba mediante el cobro de una elevada tasa que justifica su riesgo por la operaci¨®n fraudulenta. Asimismo, se vienen realizando viajes desde EE UU con destino a M¨¦xico, Bahamas, Honduras, Panam¨¢, etc¨¦tera, como lugares de escala para su posterior traslado y estancia en territorio de la isla de Cuba. Estas situaciones han dado lugar a que tanto las entidades bancarias como las compa?¨ªas a¨¦reas presionaran al Gobiemo estadounidense, para evitar situaciones anormales desde el punto de vista de sus intereses econ¨®micos, por un lado, y por otro, porque esas actuaciones representan un fraude y una evasi¨®n de divisas perjudicial para los intereses de la Secretar¨ªa del Tesoro de Estados Unidos. Hay un tercer elemento a considerar, si cabe, de gran importancia social, consistente en una fuerza arrolladora creciente, de important¨ªsimos colectivos de congregaciones religiosas, fundamentalmente compuestas por evangelistas, organizadas en torno al movimiento Pastores por la Paz, que lidera el reverendo de color Lucios Walker, los cuales luchan contra el bloqueo, presionando y exigiendo al Gobierno el env¨ªo a Cuba de distintos materiales, especialmente medicinas. Por tanto, esta medida propagand¨ªstica de Estados Unidos lo hace exclusivamente en defensa de sus propios intereses y no como un acto humanitario. Esto no es m¨¢s que un subterfugio y un burdo maquillaje. Lo que tiene que hacer EE UU es levantar el bloqueo o el embargo a Cuba para dar con ello cumplimiento a la resoluci¨®n de las Naciones Unidas de noviembre de 1997, avalada por la inmensa mayor¨ªa de los Estados miembros y con s¨®lo tres votos en contra; lo dem¨¢s es propaganda barata cargada de hipocres¨ªa- Asturias