No todo fue erial

Acaba de publicarse un libro titulado El maestro en el erial. Ni lo he le¨ªdo, ni pienso hacerlo. La lectura de varias de las cr¨ªticas de que ha sido objeto -la de Vargas Llosa, la de S¨¢nchez C¨¢mara, la de Molinuevo,"Ia de Senabre, la de Conte- me ha bastado para tomar esa decisi¨®n. Pero, debo decirlo, me ha dolido que dos de ellas, procedentes de autores tan frecuentemente l¨²cidos, objetivos y certeros, Vargas Llosa y Conte, hayan dado por bueno el uso del t¨¦rmino "erial" para designar toda la producci¨®n intelectual y literaria de Espa?a durante la dictadura franquista. Conforme con que se vitupere cuanto en el orden cultural -y, por supuesto, en el pol¨ªtico- directamente hicieron o suscitaron Franco y sus gobernantes. Pero la amplia porci¨®n de la sociedad espa?ola que con fruici¨®n o sin ella acept¨® durante cuatro d¨¦- cadas las decisiones y las actividades culturales del franquismo, ?era toda Espa?a? Hace no pocos a?os, con autoridad superior a la m¨ªa -entre otras cosas, porque desde 1939 ¨¦l sufri¨® la abierta hostilidad del bando vencedor en la guerra civil-, Juli¨¢n Mar¨ªas public¨® un noble y documentado art¨ªculo para mostrar, frente a los que un¨¢nimemente llamaban "p¨¢rarno" a la realidad cultural de Espa?a durante el franquismo, significativamente titulado La vegetaci¨®n del p¨¢ramo. Pues bien: a riesgo de repetir muchos de los nombres por ¨¦l aducidos en abono de su tesis, consignar¨¦ a vuelapluma algunos de los espa?oles que en ese "erial" hicieron pensamiento y literatura dignos no s¨®lo de estima, tambi¨¦n de exportaci¨®n. He aqu¨ª mi lista.

Escribieron filosof¨ªa: Ortega, Ors, Zarag¨¹eta, Zubiri, Mar¨ªas, Rodr¨ªguez Hu¨¦scar, Par¨ªs, Bueno, Tr¨ªas. Prosa literaria: Baroja, Azor¨ªn, Rosa Chacel, Cela, Torrente Ballester, Delibes, S. Ferlosio, Ana Mar¨ªa Matute, Gironella, Carmen Mart¨ªn Gaite, M. Rodoreda. Teatro: L¨®pez Rubio, Jardiel Poncela, Mihura, Buero Vallejo. Filolog¨ªa rom¨¢nica: Men¨¦n- dez Pidal, Garc¨ªa Blanco, D¨¢maso Alonso, Rafael Lapesa, Mart¨ªn de Riquer, L¨¢zaro, Alvar, Alarcos. Filolog¨ªa cl¨¢sica: Tovar, Fdez. Galiano, Luis Gil, Rodr¨ªguez Adrados, Lasso de la Vega, S¨¢nchez Ruip¨¦rez. Arabismo: As¨ªn Palacios, Gonz¨¢lez Palencia, Garc¨ªa G¨®mez. Poes¨ªa: D¨¢maso Alonso, Gerardo Diego, Vicente Aleixandre, Luis Rosales, Gabriel Celaya, Blas de Otero, Gil de Biedma, Carlos Bouso?o, Jos¨¦ Hierro, ?ngel Gonz¨¢lez. Psicolog¨ªa: Yela y Pinillos. Historia del arte y de la cultura: G¨®mez Moreno, S¨¢nchez Cant¨®n, Lafuente Ferrari, Julio Caro Baroja, Cam¨®n Aznar. Y no menciono, para no pecar de prolijo, los historiadores, los m¨¦dicos, los juristas, los matem¨¢ticos, los f¨ªsicos, los qu¨ªmicos y los naturalistas que durante el franquismo han hecho, cada uno en su campo, ciencia dignamente exportable.

Pues bien: salvo alguno, aceptador m¨¢s bien ir¨®nico del r¨¦gimen de Franco, todos los dem¨¢s fueron de modo m¨¢s o menos ostensible -no pocos, todo lo manifiestamente que el r¨¦gimen permit¨ªa- cultural y pol¨ªticamente hostiles al franquismo. ?Puede entonces llamarse "erial", como no sea por ignorancia, a la realidad cultural de aquella Espa?a? (Queda aparte, claro est¨¢, la menci¨®n de la valiosa obra de los intelectuales espa?oles forzados al exilio).