Los alemanes acusados de colaborar con ETA, en libertad condicional
El tribunal alem¨¢n de Wiesbaden que juzga a Heike Schubbert, de 34 a?os, y a Gary Siemund, de 33, ciudadanos alemanes sospechosos de haber colaborado con el comando Madrid de ETA, acord¨® ayer ponerles en libertad condicional. Consideran los jueces que en el caso de Schubbert no existe riesgo de fuga y que se presentar¨¢ a las sesiones del juicio oral que se celebra contra ella. Estima tambi¨¦n el tribunal que las sospechas contra Siemund no son suficientemente fuertes. El juicio contra ambos contin¨²a en Wiesbaden.
Los dos acusados de participar en la preparaci¨®n de un atentado con explosivos y transgredir la ley alemana sobre control de armas se encontraban en prisi¨®n preventiva (desde abril del a?o pasado Siemund y desde julio Schubbert). La vinculaci¨®n de ambos con la banda terrorista sali¨® a relucir con motivo de una explosi¨®n accidental en un piso en Madrid, situado en la calle de Polibea, que hab¨ªa alquilado la pareja y serv¨ªa de alojamiento al comando Madrid. Las autoridades espa?olas los presentaron en un primer momento como peligrosos integrantes de la banda alemana Baader Meinhof y afirmaron que hab¨ªan salido en estampida del piso de Madrid al producirse la explosi¨®n. Luego result¨® que al menos Siemund no se encontraba en Madrid, ten¨ªa una coartada perfecta y se present¨® casi en el acto a la polic¨ªa alemana. El comportamiento de Schubbert resulta m¨¢s sospechoso, porque tard¨® tres meses en entregarse.
El juez alem¨¢n acord¨® mantener en prisi¨®n a Siemund, para quien en un primer momento tanto su defensor como el fiscal hab¨ªan pedido la libertad condicional. Ahora, el tribunal considera que no s¨®lo Siemund, contra quien las pruebas presentadas por la polic¨ªa espa?ola parecen poco consistentes a los jueces alemanes, sino que tambi¨¦n Schubbert merece la libertad condicional por considerar que no existe riesgo de fuga. El juicio contra los supuestos colaboradores alemanes de ETA comenz¨® el 31 de marzo en Wiesbaden con unas medidas de seguridad ins¨®litas en la ciudad, que recordaban la histeria colectiva desencadenada en los d¨ªas de la apoteosis de la banda Baader Meinhof. En la primera sesi¨®n el tribunal ofreci¨® un pacto a los acusados, consistente en aceptar una condena m¨ªnima, a cambio de un reconocimiento de culpa: tres a?os a Schubbert y a?o y medio a Siemund con libertad condicional.
Shubbert acept¨® el pacto y Siemund se mantuvo en su postura de negarse a declarar. No se ha aclarado c¨®mo los dos alemanes, que estudiaban en Espa?a, pudieron pagar los alquileres y fianzas del piso.
Esto no fue suficiente para el tribunal alem¨¢n y el vicepresidente Olaf Zickler constataba: "En el marco de la investigaci¨®n se advierten considerables contradicciones". El peri¨®dico. Frankfurter Rundschau, que dedica al proceso una informaci¨®n considerable, citaba a un funcionario alem¨¢n que reprochaba a sus colegas espa?oles haber enviado un "mont¨®n de informaciones que se contradicen". El mismo peri¨®dico subtitulaba: "La causa oral contra dos supuestos colaboradores alemanes de ETA sufre las consecuencias de la chapucera investigaci¨®n de las autoridades espa?ola
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.