Una filtraci¨®n de datos de Telef¨®nica dinamita la red del Cesid en el Pa¨ªs Vasco

El descubrimiento de las escuchas del Cesid en la sede de HB en Vitoria no s¨®lo ha provocado una crisis pol¨ªtica y un proceso judicial, sino que ha dinamitado gran parte de la estructura del servicio secreto en el Pa¨ªs Vasco. El diario Egin, pr¨®ximo a HB, public¨® ayer la identidad real de uno de los agentes presuntamente implicados en las escuchas, as¨ª como los nombres y domicilio de sus familiares y una foto de su vivienda en Madrid. La informaci¨®n tiene su origen en una filtraci¨®n de datos confidenciales de Telef¨®nica, que dispone de los n¨²meros a los que se llamaba desde el piso del Cesid.

Mario C. G., de 29 a?os, es la identidad real de uno de los miembros del Cesid que espiaban la sede de HB en Vitoria, seg¨²n public¨® ayer Egin. El diario difundi¨® fotograf¨ªas del domicilio del agente, en una urbanizaci¨®n de la localidad madrile?a de San Sebasti¨¢n de los Reyes, as¨ª como los nombres y la direcci¨®n de sus padres y sus dos hermanos, en la capital de Espa?a. Los redactores se presentaron por sorpresa a primera hora del s¨¢bado en la vivienda madrile?a de Mario C. G., quien avis¨® de inmediato al servicio secreto, que mont¨® un despliegue de protecci¨®n, seg¨²n explicaba el citado peri¨®dico en su edici¨®n de ayer.

Hasta el 31 de marzo, el agente, bajo la identidad ficticia de Mario Corcuera Fern¨¢ndez, resid¨ªa de forma casi permanente en el piso desde el que se interceptaban las l¨ªneas telef¨®nicas de HB. Acud¨ªa a las reuniones de la comunidad de vecinos y una vez visit¨® el local de la coalici¨®n con la excusa de una fuga de agua.

La juez que investiga el caso ya dispon¨ªa de su identidad, pues los esp¨ªas olvidaron en su precipitada huida un documento con su nombre aut¨¦ntico: seg¨²n algunas fuentes, se trata de una n¨®mina,seg¨²n otras, de una revista a la que estaba suscrito. El agente es un funcionario civil o un contratado laboral del servicio secreto, ya que no figura en las escalillas de personal de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil.

La revelaci¨®n del nombre verdadero de este miembro del Cesid plantea un grave problema de seguridad, que podr¨ªa resolverse facilit¨¢ndole una nueva identidad lo que resulta m¨¢s complejo de lo que parece- o busc¨¢ndole un destino en el extranjero, aunque a corto plazo deber¨¢ permanecer a disposici¨®n de la juez que investiga el caso. M¨¢s dif¨ªcil ser¨¢ devolver a sus familiares la tranquilidad que han perdido.

Egin identific¨® al agente a trav¨¦s del listado de llamadas realizadas desde el tel¨¦fono del piso primero izquierda de la calle Ramiro de Maeztu n¨²mero 6 de Vitoria, donde ten¨ªa su base de escuchas el centro de inteligencia.

Estos datos, que tienen car¨¢cter confidencial, han llegado a poder del diario pr¨®ximo a HB. La gravedad de la filtraci¨®n radica en que no s¨®lo se han desvelado los n¨²meros de tel¨¦fono -y a trav¨¦s de ellos la identidad real- del agente, sino tambi¨¦n, previsiblemente, los de muchos otros miembros, colaboradores, bases y empresas pantalla del Cesid.

Expertos en los servicios de informaci¨®n reconocen que, aunque los agentes destinados en Euskadi no deber¨ªan contactar entre si por razones de seguridad, es habitual que lo hagan, pues carecen de la cultura de clandestinidad con que cuentan los etarras a los que se enfrentan.

De hecho, Egin ya public¨® el pasado d¨ªa 7, procedente de la misma base de datos, un tel¨¦fono de la sede central del Cesid en Madrid al que llamaban los agentes desde el piso de Vitoria.

El diario asegur¨® ayer que los esp¨ªas telefonearon a tres empresas, cuyos nombres reproduc¨ªa, a bancos y a la Universidad Aut¨®noma de Madrid."Egin dispone de una amplia relaci¨®n de tel¨¦fonos con los que los agentes contactaban en diversas provincias de Euskal Herria", a?ad¨ªa.

Los expertos consideran que los n¨²meros a los que se llam¨® desde el piso de la calle Ramiro de Maeztu est¨¢n quemados y lo mismo sucede con aquellos a los que se telefone¨® desde estos ¨²ltimos, si hay peligro de que se filtren tambi¨¦n sus listados.

"El da?o es grav¨ªsimo" agregan, "porque toda la red del Cesid en el Pa¨ªs Vasco puede haber quedado al descubierto y, aunque s¨®lo sea con car¨¢cter preventivo, habr¨ªa que desmantelarla y sustituirla por otra". Lo l¨®gico es que este desmantelamiento comenzara el pasado 31 de marzo, pocas horas despu¨¦s de que se descubrieran las escuchas en la sede de HB de Vitoria.

La infiltraci¨®n de grupos pr¨®ximos a ETA en la Compa?¨ªa Telef¨®nica se ha demostrado ya en varias ocasiones. El caso m¨¢s reciente data de principios de este mes, cuando la Ertzaintza desarticul¨® en Durango (Vizcaya) el comando Mara, integrado por dos empleados de la citada compa?¨ªa, al que la Polic¨ªa Vasca atribuy¨® la colocaci¨®n de explosivos en Castell¨®n y Vizcaya.

La noticia de Egin ha sido elaborada por su equipo de investigaci¨®n, que dirige Pepe Rei, absuelto hace un a?o por la Audiencia Nacional. La sentencia consider¨® probado que alguien del peri¨®dico entreg¨® a ETA 16 informes sobre empresas vascas que fueron utilizados para cometer atentados y exigir el impuesto revolucionario, pero no qued¨® demostrado que fuese el perio