El primer ministro de Canad¨¢ pide a Castro la libertad de cuatro presos

La visita a Cuba del primer ministro de Canad¨¢, Jean Chr¨¦tien, comenz¨® el domingo con un duelo de espadas en el mismo aeropuerto de La Habana. El mandatario cubano, Fidel Castro, recibi¨® a Chr¨¦tien vestido de verdeoliva y con un discurso de barricada. Castro calific¨® el bloqueo de ?nueva versi¨®n del holocausto? y defendi¨® el derecho de Cuba a elegir su propio sistema pol¨ªtico, mientras Chr¨¦tien, m¨¢s sosegado, reiter¨® su conocida posici¨®n de que la mejor pol¨ªtica hacia Cuba es el di¨¢logo. Chr¨¦tien habl¨® de derechos humanos y ayer, durante la primera entrevista a solas, pidi¨® a Castro la libertad de cuatro conocidos disidentes.

La primera actividad de Chr¨¦tien al descender del avi¨®n fue la inauguraci¨®n de una moderna terminal a¨¦rea en el aeropuerto Jose Mart¨ª de La Habana. Canad¨¢ otorg¨® un cr¨¦dito de 29 millones de d¨®lares (m¨¢s de 4.300 millones de pesetas) para ejecutar la obra, valorada en 93 millones de d¨®lares. Al pronunciar las palabras inaugurales, Castro puso como ejemplo de ?todo lo que puede lograrse con el respeto, la cooperaci¨®n y la paz entre los pueblos? la terminal a¨¦rea reci¨¦n concluida, y acto seguido pas¨® a fustigar al Gobierno de EE UU, que no ha ocultado su malestar por la visita de Chr¨¦tien a la isla.

El presidente cubano afirm¨® que el embargo es ?un crimen? y dijo que con ¨¦l se trata de ?convertir una naci¨®n en gueto y aplicarle una nueva versi¨®n del holocausto?. ?Es como usar armas biol¨®gicas, qu¨ªmicas o nucleares?, asegur¨®, para luego subir la parada: ?Los que tales cosas hacen debieran ser llevados ante tribunales internacionales y juzgados como criminales de guerra?.

Castro no mencion¨® en una sola ocasi¨®n la palabra cambio, aunque s¨ª se refiri¨® a los derechos humanos. Por supuesto, para solicitar que cesen de una vez ?todas las infames maniobras y calumnias que la potencia hegem¨®nica realiza en el seno de la Comisi¨®n de Derechos Humanos? de Ginebra (en la ¨²ltima votaci¨®n Canad¨¢ vot¨® junto a EE UU contra Cuba).

Chr¨¦tien tambi¨¦n quiso dejar bien sentada su posici¨®n y su orden de prioridades desde el primer momento: ?Los vientos del cambio soplan a trav¨¦s de todo nuestro hemisferio, y todos los pa¨ªses deben hacer esfuerzos para adaptarse a las nuevas circunstancias?, dijo. Asimismo, se refiri¨® al acuerdo de 14 puntos firmado el a?o pasado entre ambos pa¨ªses, y lo puso como ejemplo de la relaci¨®n de ?participaci¨®n constructiva? con Cuba de su Gobierno. Chr¨¦tien y Castro se reunieron a solas durante dos horas y media y cenaron juntos. Durante una conferencia de prensa ofrecida ayer, Chr¨¦tien inform¨® de que en su primer encuentro con el mandatario cubano dedic¨® casi una hora a hablar de los derechos humanos y de la democracia, y le pidi¨® a Castro la liberaci¨®n de cuatro conocidos opositores. Se trata de los miembros del llamado Grupo de Trabajo de la Disidencia Interna, Vladimiro Roca, Martha Beatriz Roque, Rene G¨®mez Manzano y F¨¦lix Bonne, detenidos en junio de 1997 y acusados de propaganda enemiga. Hoy est¨¢n a la espera de juicio.

El primer ministro canadiense dijo que Castro recibi¨® la petici¨®n sin cara de enfado -?aunque tampoco sonriendo?- y se comprometi¨® a estudiarla. Tambi¨¦n asegur¨® que se est¨¢ trabajando con el Parlamento cubano para crear la figura de un Ombudsman que atienda las quejas de derechos humanos. La impresi¨®n de Chr¨¦tien sobre la posibilidad de que se introduzcan cambios democr¨¢ticos en la isla, no por conocida, dej¨® de ser esclarecedora: ??l es un hombre de ideas firmes, un comunista convencido, y no creo que vaya a haber elecciones libres en Cuba la semana pr¨®xima?, dijo con iron¨ªa.

El primer ministro de Canad¨¢ se mostro cr¨ªtico con el embargo norteamericano y la ley Helms-Burton, pero afirm¨® que para deshacer ese nudo que acogota las relaciones entre ambos pa¨ªses hacen falta ?pasos de ambas partes?. Ayer ambas delegaciones firmaron varios acuerdos de cooperaci¨®n en materia de salud, deportes y coproducci¨®n audiovisual. Chr¨¦tien sostuvo al mediod¨ªa un encuentro con el arzobispo de La Habana, cardenal Jaime Ortega, mientras sus colaboradores se reunieron por la tarde con varios disidentes. Fuentes canadienses dijeron que est¨¢ tambi¨¦n a punto de llegarse a un acuerdo para indemnizar a una compa?¨ªa canadiense de seguros expropiada al triunfo de la revoluci¨®n. La indemnizaci¨®n, de aproximadamente 9 millones de d¨®lares, abrir¨ªa el camino para la firma de un acuerdo de protecci¨®n de inversiones entre ambos pa¨ªses.