La ciudad de los caballos de acero

Jerez es la meta. Lo es para los 150.000 aficionados que, cada a?o por estas fechas, echan lo imprescindible en una mochila, se enfundan en cuero, cogen un pu?ado de dinero y ponen rumbo con sus m¨¢quinas hacia la ciudad andaluza. Y lo es para cualquier amante del espect¨¢culo y las emociones fuertes, porque en Jerez el Mundial de Motociclismo va m¨¢s all¨¢ de las carreras. Este a?o, por ejemplo, los exteriores del circuito de Jerez se transforman en un gran complejo de ocio que tendr¨¢ al rock como protagonista, y es que ya es sabido que motos y rock and roll van cogidos de la mano. Grupos como Spin Doctors o Tah¨²res Zurdos intentar¨¢n que el rugir de sus guitarras se imponga al de los motores. Y para los m¨¢s atrevidos habr¨¢ una torre para practicar puenting y caer desde 58 metros de altura o un circuito de minimotos donde emular a los Biaggi, Harada o Checa. Los moteros, nombre por el que son conocidos estos jinetes sobre ruedas, comenzaron ayer a llegar a Jerez. Son los m¨¢s tempraneros, aunque abren el camino a verdaderos ej¨¦rcitos motorizados que invadir¨¢n en las pr¨®ximas horas las principales localidades de la provincia de C¨¢diz, con la velocidad como arma y la diversi¨®n por objetivo. Algunos n¨²meros para dar cuenta de la magnitud de este circo: 75.000 veh¨ªculos -50.000 de ellos, motos-, 200.000 desplazamientos en las carreteras de la zona y m¨¢s de 1.500 efectivos del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa, Guardia Civil y Polic¨ªa Local controlando el tr¨¢fico, ponen de manifiesto el poder de convocatoria de esta aut¨¦ntica fiesta de la moto que, no es de extra?ar, para Jos¨¦ Luis Le¨®n, jefe provincial de Tr¨¢fico, supone "el peor fin de semana del a?o". Son muchos m¨¢s, desde luego, los que piensan todo lo contrario. Uno de los colectivos que con mayor agrado recibe a los caballos de acero es el de la hosteler¨ªa. Hace un mes que es imposible encontrar una habitaci¨®n en los hoteles de Jerez y las localidades colindantes, y bares y chiringuitos est¨¢n preparados para hacer horas extra. Todo, por supuesto, tendr¨¢ su recompensa con una abultada cuenta de resultados al acabar el fin de semana. El Mundial de Motociclismo supone la mayor inyecci¨®n econ¨®mica, en menos tiempo, de todo el a?o en la provincia gaditana. Nunca se ha llegado a cuantificar el volumen exacto de ingresos pero los beneficios para el sector se cuentan en cientos de millones de pesetas. Lo cierto es que el mayor atractivo de esta fiesta est¨¢ en la calle. El colorido, la adrenalina, el ruido de los motores, el olor a goma quemada... Las calles de Jerez se convierten en improvisados circuitos por lo que el Ayuntamiento elabora cada a?o un completo plan de seguridad. La avenida ?lvaro Domecq, el vial m¨¢s importante del municipio, queda cortada al tr¨¢fico desde primeras horas de la noche del s¨¢bado, y los moteros se hacen due?os del asfalto, ofreciendo aut¨¦nticas exhibiciones sobre dos ruedas. Es dif¨ªcil dormir. En cualquier rinc¨®n de la ciudad, la banda sonora la ofrecen los potentes motores de estas endiabladas m¨¢quinas de velocidad. Y, mientras, el circuito aguarda como la guinda del pastel. Este a?o presenta, entre sus novedades m¨¢s importantes, la reforestaci¨®n que ha te?ido de verde los alrededores de la pista con la plantaci¨®n de c¨¦sped, decenas de ¨¢rboles y plantas con flores de todo tipo. Jos¨¦ Ram¨®n Garc¨ªa, director del trazado, s¨®lo est¨¢ preocupado ya por lo ¨²nico que no puede controlar: el tiempo. "Al motero no le suele importar mucho pero al paquete o acompa?ante, s¨ª. Quiz¨¢ pueda bajar la cifra de espectadores, aunque confiamos en que, como siempre, la gente acuda en masa a Jerez", afirma. Hay multitud de carteles publicitarios por las calles. Uno de ellos reza: "Esto es espect¨¢culo". Y tiene raz¨®n. Pasen y vean.