El presidente asturiano pide dirimir en unas primarias la crisis del PP regional

El PP de Asturias vive un periodo de divisi¨®n marcado por el afloramiento de los individualismos y el enfrentamiento de sus principales cargos p¨²blicos y org¨¢nicos. Apenas tres a?os despu¨¦s de haber logrado por vez primera el Gobierno del Principado -merced a la desuni¨®n de la izquierda, mayoritaria en la C¨¢mara regional-, el PP asturiano protagoniza desde hace semanas un espect¨¢culo de descalificaciones y desplantes entre sus dirigentes, que desconcierta a afiliados y votantes a un a?o de los comicios municipales y auton¨®micos.

El enfrentamiento virulento entre el alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, y el presidente de la comunidad, Sergio Marqu¨¦s, y el m¨¢s sutil pero no menos soterrado entre ¨¦ste y el presidente regional del PP y senador, Isidro Fern¨¢ndez Rozada, ha puesto la mirada de todos en cualquier gesto del todopoderoso vicepresidente primero del Gobierno y secretario general del partido, Francisco ?lvarez Cascos, a quien nada de cuanto ocurre en su regi¨®n natal le es ajeno ni lejano.?lvarez Cascos ya ha hablado. Lo hizo en la reciente convenci¨®n local del PP de Oviedo, en la que ningune¨® al presidente del Principado, Sergio Marqu¨¦s, omitiendo cualquier referencia expresa a su persona; alab¨® sin l¨ªmites a su anta?o opositor Isidro Fern¨¢ndez Rozada y reconvino con amabilidad al alcalde de Oviedo por haber denostado en p¨²blico a Sergio Marqu¨¦s. Sin embargo, y pese a esta llamada a la discreci¨®n en las cr¨ªticas internas en un acto en el que no se permiti¨® tomar la palabra a Marqu¨¦s, la crispaci¨®n no ha dejado de acrecentarse y se ha agudizado la virulencia de los encontronazos.

Un regidor pol¨¦mico

El pol¨¦mico alcalde de Oviedo, anta?o d¨ªscolo y enfrentado a la direcci¨®n del partido, pero que ahora cuenta con el firme respaldo de ?lvarez Cascos -quien lo aval¨® en p¨²blico en sus horas m¨¢s bajas, incluso tras el esc¨¢ndalo de las cuantiosas facturas en gastos de representaci¨®n y hosteler¨ªa del Ayuntamiento de Oviedo-, ha intensificado los ataques p¨²blicos a Marqu¨¦s con cr¨ªticas a su gesti¨®n pol¨ªtica.

El presidente del Principado de Asturias ha replicado desde Latinoam¨¦rica, donde estos d¨ªas visita las colonias asturianas de Argentina, Chile y Uruguay, que tales "impertinencias" las ha archivado convenientemente en el lugar que corresponde: "La papelera".

El presidente regional del PP, Isidro Fern¨¢ndez Rozada, viene haciendo sucesivas llamadas al entendimiento, pero m¨¢s formales que reales, y ha advertido a Marqu¨¦s que a¨²n est¨¢ a tiempo de ser ratificado como candidato a las pr¨®ximas elecciones auton¨®micas si hace suficientes gestos de sumisi¨®n y acercamiento al partido. A esta oferta Marqu¨¦s ha replicado mostr¨¢ndose partidario de que el PP tambi¨¦n se celebren elecciones primarias -frente a la tesis oficial del PP, que las estima innecesarias y propias de partidos hu¨¦rfanos de liderazgo- y ha recordado a la direcci¨®n del Partido Popular que, como han puesto de manifiesto las primarias socialistas, una cosa es lo que piensa y quiere el aparato y otra lo que desean y pretenden las bases del partido.

A Marqu¨¦s se le acusa de haberse distanciado del partido y de haber entrado en colisi¨®n no s¨®lo con la direcci¨®n del PP, sino tambi¨¦n con amplios sectores sociales, como los sindicatos y aun la Iglesia asturiana. El presidente del Principado -al que el alcalde de Oviedo ha acusado de ser "un broncas"- pide respeto a la autonom¨ªa de su acci¨®n de Gobierno desde la lealtad de su gesti¨®n al proyecto pol¨ªtico del PP.

Pero sin prejuicio de tales diferencias de criterio de car¨¢cter estrictamente pol¨ªtico, cobra cada vez m¨¢s fuerza la tesis que atribuye a factores de ¨ªndole personal y privado no pocas de las causas que han precipitado el enconado enfrentamiento que vive el PP asturiano. Se recuerda al respecto que el matrimonio Marqu¨¦s mantiene una gran amistad con la primera esposa de ?lvarez Cascos, mientras que Gabino de Lorenzo tuvo la perspicacia de ofrecer su hospitalidad al vicepresidente y a su actual mujer, Gemma Ruiz, en su mansi¨®n de On¨ªs, donde el alcalde ovetense cr¨ªa caballos.