Un modelo cuestionado

El caso de los contagios de hepatitis C en hospitales valencianos ha supuesto un duro golpe para el modelo sanitario implantado por el Gobierno del PP en la Generalitat, en concreto para la pol¨ªtica de reducci¨®n de las listas de espera quir¨²rgicas. La oposici¨®n critica que el llamado plan de choque contra las listas de espera, inicialmente concebido como una medida de car¨¢cter meramente coyuntural, se haya prolongado hasta convertirse en estructural. Tambi¨¦n denuncia que el fallo de los mecanismos de la Consejer¨ªa de Sanidad encargados de resolver cualquier problema relacionado con la desviaci¨®n de enfermos desde la sanidad p¨²blica hacia los centros privados ha impedido controlar el brote de hepatitis.Seg¨²n la propia Consejer¨ªa de Sanidad, en el llamado plan de choque contra las listas de espera se ha registrado una desviaci¨®n presupuestaria que en 1997 se acerc¨® a los 1.500 millones con respecto a lo inicialmente previsto (de los 1.000 millones presupuestados a los 2.453 facturados). El desfase tambi¨¦n afect¨® a los conciertos habituales con el sector privado: en este caso, la diferencia entre lo presupuestado y lo realmente facturado el a?o pasado fue de casi 4.000 millones (estaba previsto un gasto de 11.160 millones de pesetas y se facturaron 14.960 millones). En conjunto, m¨¢s de 5.000 millones de desviaci¨®n, que ponen de manifiesto lo que la oposici¨®n ha venido denunciando desde hace tiempo: la pol¨ªtica del PP en sanidad pretende ?favorecer? al sector privado mediante el trasvase de recursos desde la sanidad p¨²blica. O, como explicaba recientemente un diputado de la oposici¨®n: ?Situar el inter¨¦s privado por encima del derecho a la salud?.

CC OO opina que ?se est¨¢ produciendo un abusivo desv¨ªo de recursos p¨²blicos hacia la sanidad privada, mientras se mantiene a los hospitales de la red p¨²blica en condiciones de precariedad?. CC OO pide la dimisi¨®n del ?reponsable de este desaguisado?.

?El plan de choque est¨¢ lleno de irregularidades administrativas que bordean la ley?, se?ala Jos¨¦ Mayans, miembro de la secretar¨ªa de Sanidad del PSPV-PSOE. Algunas cl¨ªnicas privadas, denuncian los socialistas, no cumplen los requisitos que exige la Administraci¨®n en cuanto a n¨²mero de m¨¦dicos, instalaciones y medios, lo que no ha impedido su inclusi¨®n en el plan de choque. En relaci¨®n con esta cuesti¨®n los socialistas se?alan a los servicios de inspecci¨®n de Sanidad.

Los datos

Los n¨²meros que han hecho los socialistas, extra¨ªdos de la informaci¨®n oficial proporcionada por la Consejer¨ªa de Sanidad, comparan los datos de los centros p¨²blicos con los correspondientes a hospitales privados: durante 1997, en los 18 hospitales p¨²blicos, que sumaban 4.062 m¨¦dicos, 8.083 camas y 133 quir¨®fanos, se realizaron 84.800 intervenciones quir¨²rgicas. Mientras, en las 10 cl¨ªnicas privadas analizadas, que contaban con 140 m¨¦dicos de plantilla, 960 camas y 51 quir¨®fanos, se efectuaron en el mismo periodo 24.487 operaciones. As¨ª, en La Fe, de Valencia, hospital de referencia de la red p¨²blica valenciana, con 970 m¨¦dicos en plantilla, 3.376 camas y 30 quir¨®fanos, se acometieron el a?o pasado 15.710 intervenciones quir¨²rgicas. En el mismo periodo, el hospital privado Valencia al Mar, con nueve facultativos en plantilla, 153 camas y seis quir¨®fanos logr¨® completar 8.880 operaciones, mientras que en la Casa de Salud, que cuenta con nueve m¨¦dicos fijos, 222 camas y tambi¨¦n nueve quir¨®fanos se qued¨® en 2.148 intervenciones.Aunque matizan que en los hospitales privados no operan s¨®lo los m¨¦dicos de plantilla, los socialistas no dudan en calificar de escandalosos estos datos, al tiempo que rechazan, por falaces, las conclusiones relativas a una mayor efectividad y productividad del sistema privado frente al p¨²blico que se podr¨ªan extraer de los mismos. Como expres¨® un m¨¦dico perteneciente al PSOE en el Consejo de Salud celebrado la pasada semana a ra¨ªz del brote, lo que el caso de los recientes contagios evidencia ?es el propio concepto de asistencia por acto m¨¦dico, las peonadas o conciertos con centros para la eliminaci¨®n de las listas de espera, donde los facultativos despachan r¨¢pidamente una serie de actos quir¨²rgicos, con r¨¢pidos posoperatorios sin control ni seguimiento de los pacientes?.

El consejero de Sanidad, Joaqu¨ªn Farn¨®s, y sus colaboradores han optado por no contestar a estas acusaciones.