Prat de la Riba, joven y panfletario
Han tenido que pasar 81 a?os para que el primer volumen de la obra completa de Enric Prat de la Riba, presidente de la Mancomunitat, viera la luz. Proa y el Institut d"Estudis Catalans han publicado los primeros escritos (1887-1898). Son los art¨ªculos de juventud, pasi¨®n y grandes verdades. Son, por tanto, los m¨¢s panfletarios del que fuera fundador de la Lliga Regionalista, la derecha catalana. Los textos en cuesti¨®n fueron presentados ayer por sus curadores, los historiadores Josep Maria Ainaud de Lasarte y Albert Balcells, que han sacado a la luz 200 folios in¨¦ditos. "Hemos querido mostrar la evoluci¨®n de las ideas de Prat de manera clara, con la exposici¨®n cronol¨®gica de sus art¨ªculos", afirm¨® Balcells. Y tres de estos art¨ªculos son in¨¦ditos. Uno de ellos es La question catalane: l"Espagne et la Catalogne. Notice adress¨¦e a la presse europ¨¦enne par le Comit¨¦ Nationaliste Catalan de Paris. Es un folleto aparecido gracias a la ayuda de Louis Gu¨¦rin, secretario de finanzas de la Liga Antisemita. Prat tuvo contactos habituales con los antidreyfusistas franceses, entre ellos el alcalde de Argel, el antisemita Max R¨¦gis, quien colabor¨® con La Veu de Catalunya, ¨®rgano de la Lliga. El art¨ªculo en cuesti¨®n hace afirmaciones tales como: "Los castellanos, que los extranjeros designan bajo la denominaci¨®n de espa?oles, son un pueblo en el que el car¨¢cter sem¨ªtico es predominante; la sangre ¨¢rabe y africana que las frecuentes invasiones de pueblos del sur les ha inoculado se revela en su manera de ser, de pensar, de sentir y en todas las manifestaciones de su vida p¨²blica y privada. Por eso inspira la atracci¨®n de los extranjeros, por eso los pueblos civilizados de Europa tienen tanta dificultad en entender su manera de actuar". "La unidad de Espa?a es un mito que no ha pasado m¨¢s all¨¢ de ser un deseo de los gobernantes de Madrid", agrega m¨¢s adelante Prat. El fundador de la Lliga acaba apuntando que una de las soluciones para Catalu?a ser¨ªa su anexi¨®n por parte de Francia: "Si las corrientes descentralizadoras y federalistas que est¨¢n naciendo en Francia adquieren un desarrollo r¨¢pido y se traducen en reformas de la actual Constituci¨®n unitaria y centralista de la Rep¨²blica Francesa, la idea anexionista tendr¨ªa entonces muchas posibilidades de triunfar. Una situaci¨®n, un momento propicio de la pol¨ªtica internacional europea y la anexi¨®n ser¨¢ un hecho". As¨ª se hac¨ªa eco Prat de la voluntad de un sector importante de la sociedad catalana de integrarse en Francia. Lo que no imped¨ªa que al poco de aparecer este op¨²sculo le remitiera un proyecto al general Polavieja. Lo hac¨ªa como "catal¨¢n por raza y por nacionalidad, pero espa?ol por la ciudadan¨ªa". ?Qu¨¦ dec¨ªa en esa carta? Pues aportaba su receta para los males de Espa?a y su visi¨®n corporativa y territorial. La Regi¨®n I, por ejemplo, la compon¨ªan Catalu?a, Mallorca, Valencia y Murcia. La capital era Barcelona. Las cr¨ªticas de Prat, que a lo largo de su vida fue madurando del corporativismo a la democracia, se expresan contra la guerra colonial y sus gastos, una postura no siempre entendida por la burgues¨ªa industrial catalana, ante la que Prat se presentaba como postulador de proyecto de futuro. La visi¨®n del fundador de la Lliga qued¨® clara en otro art¨ªculo in¨¦dito que aparece en este primer volumen de su obra completa. Se trata de Als catalans. "Ahora lo ver¨¢ el pueblo catal¨¢n, sobre todo aquella parte del pueblo catal¨¢n que cree cumplir con su deber ocup¨¢ndose s¨®lo de sus negocios; ahora ver¨¢ si es urgente y absoluta la necesidad de que Catalu?a tenga el gobierno de sus intereses interiores y que influya en la direcci¨®n de los exteriores en proporci¨®n de su fuerza; ahora ver¨¢ si ten¨ªamos raz¨®n cuando lo llam¨¢bamos a refugiarse bajo nuestra bandera, dici¨¦ndole que no hab¨ªa suficiente con dominar en asambleas, ministerios y oficinas; cuando le dec¨ªamos, despu¨¦s de tantos siglos de dolorosa existencia, que nuestras ideas eran la ¨²nica soluci¨®n para desarrollar sus maravillosas energ¨ªas; ahora ver¨¢ lo peligroso que es para su prosperidad el actual desequilibrio existente entre nuestra gran fuerza econ¨®mica y la nulidad pol¨ªtica dentro de Espa?a", escrib¨ªa Prat. "El catalanismo", a juicio del historiador Albert Balcells, "hab¨ªa sido muy reacio a la ¨²ltima guerra colonial y el manifiesto de Prat, desde ese catalanismo, era valiente, puesto que apareci¨® 20 d¨ªas antes del desastre de la armada en Santiago de Cuba". Tras este primer volumen de obras completas aparecer¨¢n otros dos. Se ha tardado m¨¢s de 80 a?os en su publicaci¨®n. Como alguien recordaba ayer, las condiciones pol¨ªticas no han sido favorables para su publicaci¨®n: Generalitat republicana, franquismo. Ni siquiera cuando su sucesor, Francesc Camb¨®, inmediatamente despu¨¦s de morir Prat, ocup¨® los ministerios de Fomento y luego de Finanzas bajo la presidencia de Antonio Maura.
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