Emma Thompson cree que la persecuci¨®n contra los Clinton ha sido salvaje
La actriz abre el certamen con "Colores primarios" y prepara un gui¨®n sobre V¨ªctor Jara
Rodeada por un insufrible ruido de taladros y por bronceados ba?istas, Emma Thompson recibi¨® ayer a la prensa en el espol¨®n del hotel Carlton, en La Croisette, el famoso paseo de Cannes. Luc¨ªa su sonrisa gigantesca, el pelo naranja, un fresco traje azul de estilo premam¨¢ y no llevaba zapatos. La actriz est¨¢ aqu¨ª para presentar Colores primarios, con la que hoy se inaugura el festival; una pel¨ªcula sobre el matrimonio Clinton en la que encarna a Hillary y en la que se narra la carrera electoral en las primarias dem¨®cratas de 1992. Thompson afirma que tanto ella como el resto del equipo trataron el gui¨®n como pura ficci¨®n y considera que, despu¨¦s, se produjo una ?salvaje persecuci¨®n? contra los Clinton. ?Si la sociedad es incapaz de aceptar el lado oscuro de la gente y, sobre todo, de los pol¨ªticos, entonces tendremos los pol¨ªticos que nos merecemos?, se?al¨® la actriz.
Falsa guapa o guapamente fea, la actriz, de quien un periodista ingl¨¦s dijo que era una superstar semiir¨®nica, se mostr¨® fin¨ªsima con su acento londinense, marcando mucho los ¨¦nfasis y disparando contra la corriente conservadora desde sus estupendos ojos verdes gris¨¢ceos. ??Que si es sucia la pol¨ªtica? Claro que s¨ª. Pero m¨¢s sucia todav¨ªa es esa carrera por juzgar comportamientos privados de los dem¨¢s en la desesperaci¨®n por atacar a la gente por su vida privada. Es muy dif¨ªcil vivir en la virtud y si uno lo intenta siempre cometer¨¢ errores porque la verdadera virtud no existe. Los h¨¦roes son decentes pero complejos y lo importante es que son complejos. No me interesan nada la decencia ni la bondad?.Aunque el director, Mike Nichols, y John Travolta han negado insistentemente la relaci¨®n de Jack y Susan Stanton con Bill y Hillary Clinton, Colores primarios est¨¢ basada en el libro del mismo t¨ªtulo que escribi¨® el an¨®nimo periodista de Newsweek Joe Klein, que hab¨ªa seguido la campa?a del entonces gobernador de Arkansas.
Ahora ya nadie se ocupa de desmentir la evidente relaci¨®n, aunque Thompson cuenta que al plantearse el trabajo trat¨® de no pensar en que estaba representando a Hillary. ?A pesar de los grandes riesgos del parecido, ten¨ªamos que tratarlo como una ficci¨®n pura. De hecho, est¨¢bamos llevando un libro a la pantalla y eso era un paso m¨¢s que nos alejaba de la realidad y, adem¨¢s, la historia era ya antigua incluso cuando la hicimos. Lo raro ha sido la absurda reacci¨®n que ha venido despu¨¦s, la salvaje persecuci¨®n a la que han sido sometidos los dos?.
Thompson cree que el personaje de la esposa ambiciosa, calculadora y trepa , a la vez que tolerante y permisiva con la infidelidad de su marido -?¨¦l piensa en el pueblo y yo en la historia?, dice uno de los que los rodean-, es una mujer que sufre mucho porque sacrifica su integridad personal en virtud de un objetivo colectivo. La actriz brit¨¢nica se pregunt¨® luego: ??Qu¨¦ queremos de los pol¨ªticos? Me preocupa la manera de c¨®mo vamos a evolucionar. La vida es dif¨ªcil, un negocio en el que es complicado moverse, y la pol¨ªtica es un espejo de esa vida. Tambi¨¦n a las pioneras feministas de principios de siglo las acusaron de inmorales por dejar a los ni?os en casa para irse a trabajar. Si la sociedad es incapaz de aceptar el lado oscuro de la gente y sobre todo de los pol¨ªticos, entonces tendremos los pol¨ªticos que nos merecemos?.
Hablando de integridad personal, ?no siente que tiene que renunciar a muchos principios para formar parte del show business? ?Bueno, mi negocio es otro completamente distinto: consiste en contar historias. Yo no tengo poder. Supongo que hago cosas contrarias a mis principios pero creo que no lo hago para tener m¨¢s poder. Si lo piensas bien la fama no se parece nada a la pol¨ªtica. En los a?os sesenta y setenta se dec¨ªa que el show business era una especie de concesi¨®n al diablo de la corrupci¨®n y es curioso que eso ha desaparecido. Ahora lo habitual es decir: s¨®lo es show business, ?a qui¨¦n le importa?. Yo odio la publicidad y de hecho he renunciado muchas veces a hacerla, pero aqu¨ª estoy promocionando mis pel¨ªculas?.
Encrucijada
A punto de cumplir los 40 a?os, Thompson se siente ?a mitad de camino?. ?Estaba muy relajada con mi edad pero de repente he estado en Suecia y me dijeron que me faltaban 14 meses para cumplir 40. ?Me regalar¨¢s algo, bastardo?, le pregunt¨¦ al que me lo dijo. Me puse hist¨¦rica. Y ahora estoy un poco en una encrucijada. No tengo juventud que perder pero ahora viene el asunto de la inmortalidad, que es m¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa de llevar?.Lo que s¨ª sabe la actriz es que a partir de ahora va a escribir m¨¢s que actuar y que est¨¢ estudiando espa?ol con un profesor franc¨¦s para terminar su nuevo proyecto de gui¨®n cinematogr¨¢fico, un filme sobre V¨ªctor Jara. ?Estoy escribi¨¦ndolo en ingl¨¦s, siento decirlo?.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.