Los ni?os de las calles de Medell¨ªn comparten estrellato con Mira Sorvino

Tras el aperitivo llega la gran comilona. El primer d¨ªa serio de proyecciones del festival fue largo e intens¨ªsimo. Mientras Lulu on the bridge abr¨ªa la secci¨®n paralela ?Una cierta mirada?, con la presencia de Mira Sorvino, Willem Dafoe y su director Paul Auster, arrancaban los pases de la secci¨®n oficial. El colombiano V¨ªctor Gaviria explic¨® ante una vac¨ªa sala de prensa los entresijos de La vendedora de rosas, acompa?ado por los dos actores protagonistas del filme, Lady Tabares y Giovanni Quiroz, que el realizador encontr¨® en las calles de Medell¨ªn.

La naturalidad y simpat¨ªa de los ni?os, sus rostros afilados por el drama y sus ojos llenos de expresi¨®n llenaron el mismo espacio que por la tarde iba a tener el oscarizado William Hurt quien, tal vez por una curiosa metamorfosis inducida, apareci¨® mucho menos contenido y fr¨ªo de lo que suele dejar ver en sus pel¨ªculas.En la que present¨® ayer, Dark city (Ciudad oscura) , lo dirige Alex Proyas, un australiano que tuvo la desgracia de realizar The crow , la pel¨ªcula en la que muri¨® de un disparo accidental el karateca Brandon Lee. La tristeza que le debi¨® producir aquello a Proyas se refleja en esta asfixiante y claustrof¨®bica Ciudad oscura, un thriller con ambiente de ciencia-ficci¨®n que ense?a un mundo dram¨¢tico, dominado por unos mutantes que tras invadir el planeta (en realidad s¨®lo un pueblo) tratan de captar el alma, los recuerdos y la capacidad de amar que tienen los seres humanos.

Comparten los papeles principales Rufus Sewell y un terror¨ªfico Kiefer Sutherland. Hurt, que en Ciudad oscura interpreta a un detective estilo a?os cuarenta, estuvo muy simp¨¢tico y accesible en la rueda de prensa, en la que explic¨® que le fascin¨® el gui¨®n porque ?reflejaba muchos problemas de la gente de hoy: la incomunicaci¨®n, la tristeza sin soluci¨®n, la peque?a esperanza de encontrar lo que no tienes...?. Y a?adi¨®: ?Esa dualidad entre los que quieren controlar el mundo que les rodea y los que tratan de entregar su alma a los dem¨¢s es muy real y muy dram¨¢tica?.

Igual que en la pel¨ªcula

Pero metidos en dramas ah¨ª est¨¢n los de los colombianos Tabares y Quiroz. ?Yo soy igual que lo que se ve en la pel¨ªcula. Vendo flores por la calle, camino por ah¨ª sin rumbo y voy teniendo problemas desde que nac¨ª?, dijo ella. ?Todo lo que se ve en la pel¨ªcula es verdad, aunque a m¨ª me ha cambiado mucho. Ahora he dejado de ser un malo de la calle?, coment¨® ¨¦l.Junto a ellos, un nada paternal Gaviria fue contando la gestaci¨®n de su terrible documento de ficci¨®n: ?Estuvimos 12 meses haciendo investigaci¨®n, conoci¨¦ndonos, viendo c¨®mo eran los movimientos de esos ni?os. Quer¨ªa que la c¨¢mara los acompa?ara con naturalidad, que la puesta en escena se redujera a seguirlos en sus movimientos habituales. Tratamos de hacer una foto realista, antiteatral. Toda la dramaturgia de la fotograf¨ªa consist¨ªa en que ellos conversaban en primer plano sobre sus peque?os secretos?.

Los ni?os hablan el castellano de Medell¨ªn, un lenguaje que seg¨²n Gaviria es pobre y elemental, pero muy intenso. Una de las palabras m¨¢s o¨ªdas es gonorrea, un insulto local que seg¨²n el director significa ?m¨¢s que hijo de puta?.

Gaviria conoci¨® a la ni?a en un internado despu¨¦s de encontrar a otra que le hizo recordar el cuento de Andersen titulado La vendedora de cerillas. Despu¨¦s, descubri¨® a Giovanni viviendo en el l¨ªmite entre un barrio residencial y otro lleno de lo que Gaviria llama ?excluidos?. ?Lady pertenece a ese sector de la sociedad colombiana, que ni siquiera tienen papeles, que ni siquiera tienen la posibilidad de ser explotados. Por eso en la pel¨ªcula no aparecen los explotadores tradicionales, los pol¨ªticos, los capos de la droga?. Pero viendo esa realidad terrible del microcosmos de Medell¨ªn se detecta muy bien toda la realidad macro de Latinoam¨¦rica.

?Me met¨ªa miedo?

La creaci¨®n del personaje de Giovanni es una fusi¨®n entre la vida de ¨¦ste y la de un psic¨®pata que seg¨²n Gaviria era amigo suyo. ?Bueno amigo..., no era tan amigo?, explic¨® el joven de los ojos verdes. ?Lo que pasa es que me met¨ªa miedo?. Al final, Tabares sembr¨® de risas la sala de prensa: ?Venir a Cannes es una gran alegr¨ªa para m¨ª. Me gusta mucho, nunca hab¨ªa salido del pa¨ªs y ojal¨¢ salga muchas veces m¨¢s. Quisiera seguir como actriz. Me gusta mucho actuar y en esta ciudad me siento feliz?.Ahora queda la duda de lo que pasar¨¢ con los actores cuando esto se acabe. Todos los protagonistas de la anterior pel¨ªcula de Gaviria, Rodrigo D. no futuro, fueron asesinados.

En una sala pr¨®xima del festival de Cannes Paul Auster, Mira Sorvino y Willem Dafoe recib¨ªan casi al mismo tiempo la ovaci¨®n del p¨²blico, seguramente agradecido por recuperar im¨¢genes y sensaciones un poco menos descarnadas.