25.000 ni?os de Barcelona salen a la calle para sumarse a la Global March

La Global March, la marcha contra la explotaci¨®n laboral infantil que parti¨® de Filipinas el pasado 17 de enero, hizo escala ayer en Barcelona, donde recibi¨® una calurosa y emotiva acogida de los 25.000 escolares que se concentraron en la avenida de la Catedral. Los integrantes de la marcha partir¨¢n hoy hacia Girona, donde efectuar¨¢n su ¨²ltima parada en Catalu?a. El Parlament aprob¨® una declaraci¨®n en la que anima a instituciones y entidades c¨ªvicas a adoptar medidas para proteger los derechos de los ni?os.

En un ambiente entre festivo y reivindicativo, los escolares llegaron a la avenida de la Catedral procedentes del parque de la Ciutadella, donde los marchadores fueron recibidos por el presidente del Parlamento catal¨¢n, Joan Revent¨®s, y representantes de los distintos grupos pol¨ªticos. Ante las puertas de la C¨¢mara catalana, Jamal, uno de los integrantes m¨¢s j¨®venes de la marcha, aseguraba sentirse "feliz como nunca" y sus negros ojos soltaron algunas l¨¢grimas mientras o¨ªa miles de voces infantiles clamar contra una lacra que ¨¦l ha vivido en su propia carne. Jamal, de 15 a?os, ya no tiene miedo y est¨¢ recuperando parte de su infancia perdida en las calles de Bangla Desh, donde a los ocho a?os aprendi¨® a robar carteras y a lanzar granadas, a cambio de medio d¨®lar, para reventar actos pol¨ªticos. "No puedo olvidar mi pasado, porque s¨¦ que muchos de mis amigos a¨²n siguen en la calle trabajando para las mafias", afirmaba. Velucio, un alegre y menudo brasile?o de 12 a?os, tampoco puede olvidar las duras y largas jornadas laborales en el campo que vivi¨® desde los cuatro a?os. "Ninguna forma de trabajo es buena para los ni?os, ni a veces para los adultos". La hondure?a Marcela, de 17 a?os, relataba el choque que le ha producido sustituir sus jornadas de 12 horas diarias en una f¨¢brica de zapatos por una vivencia "enriquecedora y llena de esperanza" como la que est¨¢ experimentando con su participaci¨®n en la marcha. Las palabras de Joan Revent¨®s, rotas por la emoci¨®n, se correspondieron con el j¨²bilo que se viv¨ªa en la Ciutadella. "Desde que fui nombrado presidente del Parlament, ¨¦ste es para m¨ª el acto m¨¢s emotivo y el m¨¢s importante", dijo Revent¨®s ante los miles de ni?os congregados en los jardines de la Ciutadella. Por la tarde, los marchadores fueron recibidos en el Palau de la Generalitat por el presidente catal¨¢n, Jordi Pujol, quien aplaudi¨® la que se ha convertido en la mayor movilizaci¨®n de la historia contra la explotaci¨®n laboral infantil. "Una iniciativa como esta nos ayuda a pensar y a hacer examen de conciencia", indic¨®, tras saludar uno a uno los integrantes de la marcha. Tras abandonar Catalu?a, la Global March, en la que participan unas 700 ONG de todo el mundo, proseguir¨¢ su andadura por varios pa¨ªses europeos hasta llegar a Ginebra (Suiza), el 1 de junio, coincidiendo con la celebraci¨®n de la conferencia de la OIT. La explotaci¨®n laboral infantil afecta a 250 millones de ni?os en el mundo. En Espa?a, seg¨²n el sindicato UGT, el n¨²mero de ni?os que la sufren podr¨ªa superar los 700.000.