?Queremos algo nuevo?

Unos tres mil estudiantes llegados del medio centenar de universidades de Yakarta y sus alrededores se pasaron desde la diez de la ma?ana a las cuatro de la tarde de ayer ante el Parlamento exigiendo el cambio e insultando a Suharto y su familia. Era una atm¨®sfera festiva que s¨®lo se nubl¨® un instante cuando las decenas de soldados que les cortaban el paso montaron sus fusiles de asalto.Gritos de ??Abajo Suharto!?, ??Suharto no sirve para presidente!?, ??La gente vencer¨¢!?, se mezclaban con insultos de ?perro?, el m¨¢s ofensivo que se usa en Indonesia, o ?ladr¨®n?, y peticiones de que sea colgado. Los estudiantes, que al principio enviaron una delegaci¨®n al edificio para presentar su demandas, tambi¨¦n cantaron desde canciones de los tiempos de la lucha por la independencia contra los holandeses a himnos a los ca¨ªdos en honor a los seis estudiantes abatidos el martes. Un manifestante intent¨® colar rosas en los fusiles de los soldados, pero un coronel no se lo permiti¨®.

Adian era uno de los que protestaban. Habl¨® antes de que lo hicieran el presidente de la C¨¢mara, Harmoko, y el jefe de la fuerzas armadas, Wiranto. ?No esperamos nada del Parlamento. Nunca hace su trabajo: s¨®lo es un grupo de familiares y amigos del presidente. Del ej¨¦rcito esperamos que vuelva con el pueblo, que es su madre. Entonces podremos hacer juntos las reformas?. Prueba de la volatilidad de la situaci¨®n es que por la noche tales palabras podr¨ªan haber sido dichas con el sentido contrario. Adian tambi¨¦n asegur¨® ante los soldados que cortaban el paso: ?Estamos dispuestos a morir?.

Una madre acompa?¨® a su hijo en la protesta. ?Queremos algo nuevo en el pa¨ªs? dec¨ªa ella, a lo que el estudiante agreg¨®: ?Necesitamos reformas?. Pero la madre, a pesar de su aparente desaf¨ªo y ¨¢nimo valeroso al estar entre los soldados y junto a los blindados, ten¨ªa miedo y reprendi¨® al hijo: ?No digas eso, que alguien te puede oir?. Eran dos inocentes protestando por la ruina de Indonesia.