Esther Koplowitz presenta una oferta por la participaci¨®n de su hermana Alicia en FCC

Esther Koplowitz dio ayer un golpe de tim¨®n que puede ser definitivo en la crisis que ha generado su hermana Alicia al poner en venta el 28,2% del capital de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC). Esther, que ha permanecido callada en los seis meses que han pasado desde entonces, se ha destapado con una oferta a t¨ªtulo personal por ese paquete de acciones que quiere poner fin a la larga espera. La francesa Vivendi, el Banco Central Hispano (BCH), Acciona y Ferrovial, las cuatro ofertas presentadas, quedan ahora relegadas. Ayer, el 28,2% de FCC val¨ªa en Bolsa 129.547 millones.

Alicia Koplowitz anunci¨® el pasado 24 de noviembre que pon¨ªa en venta el 28,2% de la constructora FCC, la principal empresa espa?ola del sector. Desde entonces, se sucedieron acercamientos a la menor de las hermanas Koplowitz para interesarse por ese paquete de acciones. Quedaron, al final, sobre la mesa las del grupo franc¨¦s Vivendi (nombre que tiene ahora la anterior G¨¦n¨¦rale des Eaux), Banco Central Hispano, Acciona (antes Entrecanales) y el grupo Ferrovial. Sin embargo, hasta la fecha no ha sido posible alcanzar ning¨²n acuerdo, motivo por el cual Esther Koplowitz, que tiene otro 28,2% de FCC, se ha decidido a presentar ella misma, a t¨ªtulo personal, una oferta de compra.Se abre un periodo en el que las dos hermanas deber¨¢n negociar el precio. Alicia comenz¨® poniendo un precio de 98.000 millones de pesetas, que, posteriormente y a la par de la subida en Bolsa, lleg¨® a valorarse en cerca de 150.000 millones. De la puja no quedan fuera, en teor¨ªa, los otros interesados; pero su situaci¨®n actual queda en segundo plano. La dificultad es alcanzar un acuerdo que satisfaga a las tres partes, la vendedora, la compradora y a la propia Esther, que como accionista de referencia deb¨ªa expresar su consentimiento impl¨ªcito o expl¨ªcito. Su oferta directa despeja, ahora, ese camino.

El total de la participaci¨®n de las dos hermanas est¨¢ depositado en la empresa patrimonial B1998. Es decir, una vez que se materialice la operaci¨®n no parece que se incurriera en la obligaci¨®n de lanzar ninguna oferta p¨²blica de adquisici¨®n (OPA), ya que esa sociedad seguir¨ªa con la misma participaci¨®n, ya superior al 50%.

La intenci¨®n firme de Esther Koplowitz es concluir a la mayor brevedad posible un proceso que se ha demorado m¨¢s de lo deseado por la constructora, seg¨²n fuentes cercanas a ¨¦sta. Con su oferta, Esther trata de poner fin al bloqueo que atraviesa la compa?¨ªa. Seg¨²n las fuentes consultadas, la intenci¨®n de la hermana mayor es permanecer en la empresa como accionista, algo que siempre ha sostenido. Esa vocaci¨®n de permanencia persigue, adem¨¢s, la continuidad de la gesti¨®n y el mantenimiento de los puestos de trabajo (casi 36.000).

Discreto segundo plano

Esther Koplowitz prefiri¨® situarse, desde el principio, en un discreto segundo plano y en ning¨²n momento ha querido interferir en los intereses de su hermana ni perjudicarla en nada. No obstante, la demora -se han cumplido los seis meses recientemente- le ha obligado a decidirse por presentar ella una oferta.La venta del paquete de acciones de Alicia no era tarea f¨¢cil, puesto que deb¨ªa cumplir varios y exigentes requisitos. En primer lugar, deb¨ªa ser un socio de consenso. En el periodo citado y con el terreno de juego claramente delimitado, empezaron a trabajar los asesores de Esther (el banco de inversiones Barings) y Alicia (Goldman Sachs, con el asesoramiento directo de ?scar Fanjul, ex presidente de Repsol). Y por all¨ª pasaron diversos grupos empresariales y financieros, tanto nacionales como extranjeros.

Los planes prefijados inicialmente fueron que la operaci¨®n se realizase antes de antes del fin de 1997. Un plazo demasiado corto, que pronto fue reemplazado por la Semana Santa, que cay¨® a primeros de abril. Y hasta la fecha. Tras la oferta de Esther Koplowitz, la junta general de accionistas que la constructora celebrar¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 23 de junio en Barcelona (sede social de la empresa), puede presentarse, al menos, con las aguas calmadas.

La presencia de las hermanas Koplowitz en el grupo Fomento de Construcciones y Contratas procede de la una empresa anterior, Construcciones y Contratas (CyC), que hab¨ªa fundado su padre. Siempre se mantuvieron en la retaguardia, dejando la gesti¨®n a sus maridos, los primos Alberto Cortina y Alberto Alcocer. Cuando se separaron de ellos, se pusieron al frente de la empresa como vicepresidentas y ocup¨® la presidencia Guillermo Visedo, cargo que ocupa actualmente.