Los militares escoger¨¢n a sus representantes profesionales mediante elecciones democr¨¢ticas

Los cuarteles espa?oles ser¨¢n escenario, por vez primera en su historia, de unas elecciones democr¨¢ticas cuando entre en vigor la Ley del R¨¦gimen del Personal de las Fuerzas Armadas, que el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar este mes. El texto incluye la creaci¨®n de los consejos asesores de personal de los ej¨¦rcitos, en los que estar¨¢n representados todos los empleos y cuerpos militares. Aunque el proyecto no especifica c¨®mo se les designar¨¢, sus miembros ser¨¢n elegidos democr¨¢ticamente, siguiendo el modelo vigente en Francia e Italia, seg¨²n fuentes de Defensa.

La profesionalizaci¨®n total de las Fuerzas Armadas obligar¨¢, seg¨²n admiten los responsables de Defensa, a crear nuevos cauces para que los militares puedan expresar sus inquietudes y preocupaciones. Los mecanismos existentes hasta ahora -el recurso administrativo o judicial, el derecho de petici¨®n y la reclamaci¨®n a trav¨¦s de la cadena de mando, as¨ª como la queja directa al Defensor del Pueblo, siempre con car¨¢cter individual- se han demostrado insuficientes.Pero el ministro, Eduardo Serra, se ha manifestado radicalmente contrario a la legalizaci¨®n de las asociaciones de militares en activo -permitidas en Alemania, Holanda y otros muchos pa¨ªses europeos- y ha advertido que tomar¨¢ medidas contra quienes se afilien a ellas contraviniendo la prohibici¨®n contenida en las Reales Ordenanzas de 1978.

Como alternativa, Defensa se propone instaurar en Espa?a un sistema similar al de Francia e Italia, donde tambi¨¦n est¨¢ prohibido el asociacionismo. El art¨ªculo 162 del anteproyecto de ley de R¨¦gimen del Personal prev¨¦ la creaci¨®n de consejos asesores de los mandos o jefaturas de personal de los tres ej¨¦rcitos, as¨ª como del subsecretario de Defensa, en el caso de los cuerpos comunes.

La funci¨®n de dichos consejos, a los que se atribuye un papel meramente consultivo, consistir¨¢ en "analizar y valorar las propuestas o sugerencias referidas al r¨¦gimen de personal y a la condici¨®n de militar" que formulen los miembros de las Fuerzas Armadas, as¨ª como "informar las disposiciones generales que afecten al r¨¦gimen del personal militar". Se excluyen expresamente de su conocimiento todos aquellos asuntos "directamente relacionados con la disciplina militar y la justicia", cuya ¨²nica v¨ªa de reclamaci¨®n son los recursos.

El texto se?ala que deber¨¢n formar parte de dichos consejos "militares de todas las categor¨ªas [de soldados a generales] y cuerpos del respectivo ej¨¦rcito o del conjunto de los cuerpos comunes de las Fuerzas Armadas".

Futuro reglamento

Aunque la ley se remite a un futuro reglamento para determinar "la composici¨®n y el procedimiento de elecci¨®n de los miembros de los citados consejos asesores", responsables de Defensa aseguran que ya se ha tomado la decisi¨®n firme de que sean elegidos democr¨¢ticamente entre los militares a los que representen, descart¨¢ndose otras f¨®rmulas, como la cooptaci¨®n o el sorteo. "Formar consejos que no fueran representativos ser¨ªa enga?arnos a nosotros mismos", admiten.En todo caso, Defensa se propone hilar muy fino el futuro reglamento, pues se quiere evitar la realizaci¨®n de campa?as electorales en los cuarteles, la creaci¨®n de asociaciones de hecho o la profesionalizaci¨®n de los representantes de los militares.

Aunque para el Ej¨¦rcito espa?ol supone una revoluci¨®n, la idea no es original. En Francia existe desde hace 30 a?os el Consejo Superior de la Funci¨®n Militar, que preside el ministro de Defensa e integran 80 profesionales, de generales a soldados, elegidos por sus compa?eros entre quienes se presentan voluntariamente. Adem¨¢s, hay otros siete consejos por cada arma y cuerpo, incluida la Gendarmer¨ªa, equivalente a la Guardia Civil.

El mandato de los representantes de los militares dura cuatro a?os, aunque la mitad de los consejos se renueva cada dos. Sus deliberaciones tienen car¨¢cter reservado, pero al t¨¦rmino de cada reuni¨®n se aprueba un comunicado, votado por todos sus miembros, que se difunde en el seno de las Fuerzas Armadas. Los representantes de los militares disfrutan de facilidades para ejercer su funci¨®n, gozan de plena libertad de expresi¨®n y pueden recurrir directamente al ministro si se consideran represaliados en su carrera profesional debido a su actividad.

Tambi¨¦n en Italia existe, desde 1978, el Instituto de Representaci¨®n Militar, que se articula en tres niveles, situ¨¢ndose en la c¨²spide el Consejo de Representaci¨®n Central, cuyos informes llegan al Gobierno y el Parlamento.

La decisi¨®n de instaurar en Espa?a un sistema similar al franc¨¦s o el italiano no convence, sin embargo, a la Asociaci¨®n de Militares Espa?oles (AME), hasta ahora limitada a reservistas, que ha decidido abrir las puertas a sus compa?eros en activo despu¨¦s de haber ingresado en Euromil, la federaci¨®n europea de asociaciones de militares.