El PSN y la UGT apoyan la fusi¨®n de las dos cajas de ahorro navarras, que ser¨¢ una realidad antes de cinco a?os
La fusi¨®n de las dos cajas de ahorros navarras es ya un proceso en marcha que culminar¨¢ antes de cinco a?os. La Ejecutiva del Partido Socialista de Navarra (PSN-PSOE), el sindicato UGT y representantes de las secciones sindicales de esta central en Caja de Ahorros de Navarra (CAN) y Caja Pamplona afirmaron ayer que la creaci¨®n de un "nuevo y potente centro financiero" en Navarra es "una necesidad" derivada de la apuesta por el modelo institucional de la Comunidad Foral como autonom¨ªa diferenciada. La caja resultante de un proceso de fusi¨®n acordado ya por los consejos de administraci¨®n de ambas instituciones p¨²blicas, y apoyado por la mayor¨ªa del Parlamento de Navarra, ser¨¢ una entidad con unos recursos unificados superiores a los 800.000 millones de pesetas y una posici¨®n de absoluto dominio del mercado bancario en Navarra. El proceso est¨¢ en marcha. Lo confirm¨® ayer Juan Jos¨¦ Lizarbe, secretario general del PSN-PSOE y miembro del consejo de administraci¨®n de la CAN, durante la reuni¨®n mantenida con Javier Lecumberri, secretario de Acci¨®n Institucional de UGT, y los responsables de las secciones sindicales de ambas entidades, F¨¦lix Ram¨ªrez y Patxi Cabodevilla, que transmitieron al partido y al sindicato la preocupaci¨®n de los empleados por el costo laboral derivado del mismo. Por ello, socialistas y ugetistas se pronunciaron inmediatamente por una fusi¨®n que, en palabras de Lizarbe, "puede conjugar perfectamente la competitividad de la caja resultante con un coste laboral cero". En la actualidad, la CAN, controlada por el Gobierno de Navarra, est¨¢ entre las cajas medianas, con 605.246 millones de pesetas en recursos de cliente. No obstante, es la segunda de Espa?a en solvencia, con un coeficiente del 21,03% y el pasado a?o obtuvo 8.793 millones de pesetas de beneficio neto. Controla el 36% del mercado en recursos de clientes y el 27% en inversi¨®n crediticia, y ha iniciado una incipiente pol¨ªtica de inversi¨®n industrial, fundamentalmente en el sector de las telecomunicaciones (2% del capital de Retevisi¨®n; 2% de Airtel y 3% de Retevisi¨®n M¨®viles). Por su parte, Caja Pamplona, dependiente del Ayuntamiento de la capital, est¨¢ entre cajas de tema?o peque?o. Con 125 a?os de historia, tiene una elevada solvencia y obtuvo en el ¨²ltimo ejercicio 1.345 millones de pesetas de beneficio neto, habiendo superado este a?o la barrera de los 200.000 millones en dep¨®sitos de clientes. Redimensionamiento El reto del euro y la ineludible necesidad de redimensionar sus estructuras para situarse al mismo nivel que las cajas de comunidades lim¨ªtrofes han sido el acicate de un proceso en el que, seg¨²n el PSN y la UGT, cualquier costo laboral deber¨¢ ser razonado y producto de un consenso con los sindicatos. Javier Lecumberri record¨® que ambas entidades tienen en la actualidad subcontratadas ¨¢reas de negocio como la banca telef¨®nica, la obra social, los seguros o los viajes, que podr¨ªan absorber un hipot¨¦tico excedente laboral. Socialistas y UGT, adem¨¢s, entienden que el negocio extrabancario y la clara vocaci¨®n extraterritorial de la CAN (el pasado a?o abri¨® ya siete oficinas en Madrid, Barcelona y La Rioja) deben garantizar un costo laboral nulo. Caja Pamplona posee 376 empleados y 105 oficinas en Navarra, muchas de ellas situadas muy cerca de la red de oficinas de la CAN, lo que puede provocar algunos problemas de duplicidad. Lo que est¨¢ claro en este proceso es que la fusi¨®n de ambas cajas no incluir¨¢, de momento, a ninguna otra entidad. Ambas instituciones son las ¨²nicas de toda Espa?a que no han democratizado sus ¨®rganos de gobierno, controlados casi al 100% por las administraciones propietarias.
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