Ronaldo

... La m¨¢quina de tocar tuvo una peque?a interferencia: el respeto a la historia de Brasil. Holanda ya no pelear¨¢ por el t¨ªtulo porque Holanda no pelea, juega. Perdi¨® el derecho a la final por la crueldad siempre emocionante de los penaltis, pero nos dej¨® un pu?ado de lecciones inolvidables. Hay selecciones que van perdiendo el rumbo, Holanda s¨®lo ha perdido el partido; no hay drama, ni contradicciones, ni pol¨¦micas. Perdieron en su ley, la ley del juego. La historia del f¨²tbol holand¨¦s es reincidente en eso de regalarnos generaciones de buenos futbolistas y equipos que ponen de su parte a la pelota y a los espectadores neutrales. Gracias por la alegr¨ªa y, en lo que a m¨ª respecta, quedan declarados inolvidables.... El juego colectivo de Brasil es irreverente con la Historia, pero el equipo tiene minas vagantes por todo el campo que se encargan de ganar partidos con independencia de que lo merezcan. Y si hablamos de jugadores que amenazan no hay ninguno que intimide m¨¢s que Ronaldo. Nadie tiene su capacidad desequilibrante, su poder desestabilizador, hasta el punto de crear la ilusi¨®n de peligro a¨²n cuando arranca a 50 metros de la porter¨ªa contraria. Sin embargo, me molesta su obsesi¨®n por despegar hacia el gol est¨¦n o no dadas las condiciones. Ronaldo necesita un latifundio para hacer valer esa potencia demoledora que lo caracteriza, pero en espacios peque?os la velocidad no tiene tiempo para ejercer, por eso le conviene tocar y buscar el lugar vac¨ªo (nadie es r¨¢pido dentro de un ascensor). No es que no le salga lo que intenta (¨¦l es capaz hasta de lo imposible) sino que est¨¢ mal el intento, porque incluso los jugadores de otro planeta tienen que respetar las leyes naturales del f¨²tbol. El que ve¨ªa a Pel¨¦ tocar diez pelotas seguidas a un solo toque, empezaba a dudar de que fuera tan grande como se comentaba y cuando la imaginaci¨®n estaba pensando bobadas del tipo: "?¨¦ste es Pel¨¦?", Pel¨¦ inventaba un gol de la nada aprovechando su talento pero tambi¨¦n usando la sorpresa, porque al haberse disfrazado de jugador normal, el rival hab¨ªa bajado la guardia. Ronaldo es un boxeador que quiere siempre dar el golpe de noc¨¢ut... Aun si lo consigue, alguien debe decirle que eso es boxear mal. Pues Ronaldo es el mejor jugador del mundo a pesar de jugar mal.