Los forenses internacionales dicen que el l¨ªder opositor nigeriano muri¨® por causas naturales
El general Abdulsalam Abubakar, el nuevo hombre fuerte de Nigeria, respir¨® ayer tranquilo. El grupo internacional de tres pat¨®logos (un estadounidense, un canadiense y un brit¨¢nico) que practicaron la autopsia al principal opositor del r¨¦gimen militar, Moshood Abiola, muerto el pasado martes en la c¨¢rcel, confirm¨® que la muerte del virtual ganador de las elecciones de 1993 se debi¨® a causas naturales. Mientras Abubakar prometi¨® ayer acelerar la devoluci¨®n del poder a los civiles, Abiola fue enterrado en el jard¨ªn de su casa de Lagos.
"Los primeros indicios muestran que la muerte se debi¨® a causas naturales y que ten¨ªa un alto nivel de colesterol que pudo haber provocado su ataque cardiaco", declar¨® ayer Kola Abiola, hijo del difunto, en un avance de la autopsia. El hijo del disidente m¨¢s famoso del pa¨ªs aprovech¨® sin embargo para incriminar al r¨¦gimen militar de la muerte de su padre por no haberle permitido que recibiera adecuado tratamiento m¨¦dico desde que en 1994 fuera encarcelado por el dictador Sani Abacha. El delito de Abiola fue el de traici¨®n, por haber aprovechado el primer aniversario de los comicios anulados por los militares para autoproclamarse presidente.La ira de los partidarios de Abiola provoc¨® violentos enfrentamientos entre yorubas y hausas, la etnia m¨¢s poderosa del norte nigeriano y a la que pertenecen los cuatro ¨²ltimos dirigentes militares, Abubakar incluido. Al menos 60 personas murieron en los disturbios. El r¨¦gimen accedi¨® a las peticiones de la familia del conocido disidente de que forenses no nigerianos realizaran la autopsia. La publicaci¨®n de la autopsia realizada por especialistas independendientes puede permitir a Abubakar defenderse de las acusaciones de que Abiola, que estaba a punto de ser puesto en libertad, hab¨ªa sido envenenado.
Abiola se sinti¨® indispuesto el martes mientras se entrevisaba con funcionarios nigerianos y con una importante delegaci¨®n estadounidense que hab¨ªa acudido a Nigeria para reclamar a Abubakar su liberaci¨®n y la reinstauraci¨®n de la democracia. La inesperada muerte del dictador, Sani Abacha, el pasado 8 de junio, hab¨ªa dado pie a su sucesor, Abubakar, a iniciar una liberalizaci¨®n del r¨¦gimen cuya piedra de toque era precisamente la puesta en libertad de Abiola y la devoluci¨®n del poder a los civiles. Todo se trunc¨® con el fatal ataque cardiaco que acab¨® con Abiola.
Varios centenares de partidarios de Abiola, entre ellos numerosos estudiantes, interrumpieron ayer el funeral, que se celebraba en la residencia del multimillonario en el lujoso barrio de Ikeja, en Lagos, la capital econ¨®mica de Nigeria, un pa¨ªs que con sus m¨¢s de 105 millones de habitantes es el m¨¢s poblado de ?frica. "Abiola no pertenece s¨®lo a la familia, tambi¨¦n pertenece al pueblo y a los estudiantes", declar¨® un l¨ªder universitario, que pidi¨® que se les permitiera tomar parte en el sepelio. La ceremonia prosigui¨® diez minutos m¨¢s tarde. El cad¨¢ver de Abiola, cubierto con un sencillo sudario blanco, fue depositado en una tumba excavada bajo un cocotero junto a la tumba de su primera esposa, Sumidat, en el jard¨ªn de su mansi¨®n.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, que se hab¨ªa entrevistado hace diez d¨ªas con Abiola en prisi¨®n, declar¨® ayer que Abubakar est¨¢ "seriamente" comprometido con el restablecimiento del poder civil en Nigeria. La puesta en libertad de Abiola se hab¨ªa demorado, al parecer, por sus reticencias a la hora de renunciar a la victoria que presumiblemente estuvo a punto de obtener en 1993. Ayer se public¨® en un diario de su propiedad la carta que Abiola hab¨ªa remitido al movimiento opositor Nadeco en la que negaba que hubiera renunciar a la presidencia como condici¨®n para obtener la libertad.
El dictador, envenenado
Por otra parte, el diario The New York Times public¨® en su edici¨®n de ayer que algunos analistas cercanos al Gobierno de Estados Unidos creen que el dictador Sani Abacha fue asesinado por sus enemigos dentro del c¨ªrculo de poder militar. Pese a sus promesas de democratizar la vida nigeriana -una potencia petrol¨ªfera que sufre una grav¨ªsima crisis econ¨®mica a causa de la corrupci¨®n agravda por el r¨¦gimen militar-, Abacha se hab¨ªa preparado el terreno para ser el ¨²nico candidato en las elecciones previstas para el pr¨®ximo mes de agosto. Seg¨²n funcionarios del Gobierno de Wasington, hay indicios de que el general fue asesinado. Abacha fue enterrado casi de inmediato despu¨¦s de que el 8 de junio se anunciara su muerte.
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