Jacquet: "Yo nunca perdono"
"Yo nunca perdono. Jam¨¢s". Y, con el rostro crispado, se larg¨® para el vestuario. No est¨¢ Aim¨¦ Jacquet para perdonar a quienes le han criticado cada d¨ªa, encabezados por una parte de la prensa, y no piensa olvidar. No es un tipo f¨¢cil. Ni un buen comunicador. Jacquet se remite a lo que dijo cuando se hizo cargo de la selecci¨®n: "Francia puede llegar a la final de la Copa del Mundo y ganarla".No acostumbra a ceder ante la adversidad sino que aprendi¨® a convivir con ella desde que naci¨® hace 56 a?os en el pueblo de Sailt sous-Couzan, muy cerca de Saint ?tienne. Hijo de carnicero y con una carrera corta -curs¨® formaci¨®n profesional-, Jacquet ha sabido transmitir su confianza a un grupo muy heterog¨¦neo.
No hab¨ªa ninguna duda sobre su gran conocimiento del f¨²tbol e inter¨¦s por la preparaci¨®n en el deporte, una dedicaci¨®n que en su d¨ªa le permiti¨® librarse de la Guerra de Argelia. Fue un buen jugador que tuvo la suerte de vivir la ¨¦poca dorada (1961-1973) de los verdes, como se conoce al Saint ?tienne, club con el que gan¨® cinco Ligas y tres Copas y obtuvo la internacionalidad en dos ocasiones, antes de acabar como futbolista en el Ol¨ªmpico de Ly¨®n, equipo con el que comenz¨® su etapa como t¨¦cnico (1976-1980).
Pese a que tambi¨¦n dirigi¨® al Montpellier (1989-1990) y al Nancy (1990-1991), el equipo en el que triunf¨® como entrenador fue el Girondins de Burdeos: tres veces campe¨®n de Liga (1984, 1985 y 1987), dos de Copa (1986 y 1987) y semifinalista de la Copa de Europa en 1985. La selecci¨®n le lleg¨® de prestado, despu¨¦s del desastre del partido contra Bulgaria que dej¨® a Francia sin Mundial de EEUU.
La destituci¨®n de Gerard Houllier dej¨® a su ayudante, Aim¨¦ Jacquet, al frente de la nave, aunque de forma provisional. La interinidad ha durado hasta la consecuci¨®n del t¨ªtulo. Hombre de palabra, ha dejado dicho que no renovar¨¢, e incluso ya se sabe que Jan Tigana, el t¨¦cnico de M¨®naco, es el m¨¢ximo candidato a sustituirle.
Jacquet agradeci¨® el apoyo del pueblo franc¨¦s y se remiti¨® a la profesionalidad de los jugadores. "El pa¨ªs entero ha estado detr¨¢s nuestro", expuso. "Los jugadores han sentido este apoyo y han levantado la zamarra muy alta, con orgullo, sentimiento y con profesionalidad. Ha sido un ¨¦xito del equipo, de su capacidad y de su car¨¢cter".
"Trabajamos desde hace tiempo la Copa del Mundo y llegamos a la final en muy buenas condiciones", a?adi¨® Jacquet. "Preparamos el partido contra Brasil con mucha calma. Sab¨ªamos que enfrente ten¨ªamos al mejor equipo, al m¨¢s fuerte, y s¨®lo lo pod¨ªamos superar jugando de forma compacta, con un buen sistema, y mucha tranquilidad, y as¨ª ha sido". No quiso Jacquet destacar a nadie en particular y se refugi¨® en el azar que rodea el f¨²tbol: "Guivarc"h ha ido en busca del gol y no ha marcado, y Zidane ha metido dos y con la cabeza. As¨ª son las cosas". Y acab¨®: "No es una cuesti¨®n de hablar de uno o de otro. Hemos ido superando los obst¨¢culos como equipo: la expulsi¨®n de Zidane en la primera fase, la de Blanc en las semifinales... muchas cosas que s¨®lo se combaten con esp¨ªritu de equipo".
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