"No se pueden lanzar sospechas as¨ª"
Roussel, director del Festina, rompe su silencio para defender al equipo
Por fin habl¨® Bruno Roussel. El director del Festina comprendi¨® que su silencio era culpable y subi¨® al escenario para defenderse y defender a sus corredores del caso que les ha dejado contra las cuerdas. Las informaciones, cada vez m¨¢s precisas, sobre la acci¨®n policial y judicial contra Willy Voet, uno de los masajistas del equipo, preso en Lille, no le han dejado otra salida. "No se pueden lanzar sospechas as¨ª", dijo, visiblemente a la defensiva. "Llevo cinco a?os en este equipo y no somos actualmente el mejor equipo del mundo m¨¢s que por nuestro trabajo, nuestras estructuras, nuestros medios, nuestra filosof¨ªa y nuestros corredores. Todos los resultados son fruto del trabajo diario".Tras la exculpaci¨®n, los hechos. Una mara?a de la que no pudo salir el director franc¨¦s. "Somos prisioneros de la dimensi¨®n que ha tomado el caso. Es un asunto que nos sobrepasa". Escud¨¢ndose en la investigaci¨®n judicial, Roussel apenas aport¨® detalles, pero admiti¨® un par de cosas que antes hab¨ªa negado: sab¨ªa desde el mi¨¦rcoles por la tarde que la polic¨ªa judicial hab¨ªa registrado el almac¨¦n del equipo en las afueras de Ly¨®n, sab¨ªa que hab¨ªa una investigaci¨®n en marcha y sab¨ªa que Willy Voet deb¨ªa haber cogido el mi¨¦rcoles un ferry para Irlanda y que no lo hab¨ªa hecho. "El masajista", dijo, "cogi¨® el martes el coche en las oficinas del Tour en Par¨ªs y no s¨¦ qu¨¦ hizo despu¨¦s. No, no me preocup¨® especialmente que no viniera el jueves a Dubl¨ªn, pens¨¦ que habr¨ªa tenido alg¨²n problema familiar o que hab¨ªa perdido el ferry por cualquier motivo". Pero, seg¨²n ha revelado la prensa francesa, Willy, de nacionalidad belga, se fue a Suiza y despu¨¦s a Alemania, donde se hizo con las 250 dosis de EPO y varias decenas de somatotropina (hormona del crecimiento) y testosterona (anabolizante). Despu¨¦s viaj¨® a B¨¦lgica e intent¨® entrar a Francia, pero la polic¨ªa, que segu¨ªa sus pasos, le esperaba en el paso de Neuville. Un periplo que no ha dejado de extra?ar a los expertos en la adquisici¨®n de ese tipo de sustancias dopantes, utilizadas porque, exceptuando la testosterona, son indetectables en los an¨¢lisis. "Un equipo serio y bien estructurado no act¨²a de una forma tan chapucera", dice uno. "Quiz¨¢s Willy, utilizando sus contactos, actuara por cuenta de alg¨²n equipo peque?o, sin tantos medios como el Festina".
Roussel se siente "perplejo" y "traicionado". Interpreta que si la polic¨ªa decidi¨® investigar al equipo no era por ninguna raz¨®n especial. "No somos los ¨²nicos a los que nos han registrados los coches y la sede este a?o", dijo. "S¨¦ de otros dos que han sufrido lo mismo". Francia, desde la llegada de la izquierda al Gobierno, ha emprendido una cruzada casi publicitaria contra el dopaje. Se han multiplicado los controles en todos los deportes y se ha intensificado la lucha contra los circuitos clandestinos de compra y venta.
Puede que cuando el Tour llegue a Francia, Roussel sea llamado a testificar. Las consecuencias de lo que pueda pasar son imprevisibles.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.