Crist¨®bal Halffter dirige en La Granja sus "Eleg¨ªas" a tres poetas
En el verano segoviano se conjuntan al modo polif¨®nico cuatro l¨ªneas principales: la internacionalidad, los g¨¦neros de c¨¢mara, la juventud y los po¨¦ticos conciertos entre dos luces. Planteado el esquema se le da un contenido atractivo, significante, de calidad y de cierto inconformismo. Lo espa?ol goza en los ciclos de particular atenci¨®n, como lo atestigua una treintena de nombres, desde Arriaga a los de la ¨²ltima generaci¨®n. En algunos casos las actuaciones cobran car¨¢cter de homenaje, como en el caso de Crist¨®bal Halffter.Ante el palacio de La Granja, en el que naciera don Juan de Borb¨®n, Crist¨®bal Halffter recibi¨® la adhesi¨®n entusiasta que merece la cuant¨ªa, calidad y significaciones art¨ªsticas y human¨ªsticas de su obra. El m¨²sico madrile?o concentr¨® en una obra de 1975 muchos de los rasgos caracter¨ªsticos de su inventiva y de las ideas que la mueven: se trata de las Eleg¨ªas dedicadas a Machado, Hern¨¢ndez y Garc¨ªa Lorca, p¨¢ginas tan dram¨¢ticas como corresponde a la muerte de todos ellos pero tan l¨ªrica y esperanzadora como demandan las tres vidas creadoras.
Al frente de la Sinf¨®nica de RTVE -una orquesta excelente, d¨ªgase lo que se quiera- Halffter llen¨® de serenidad y perspectivas, de dolorido sentir, de sonidos, silencios y explosivos ataques, el ¨¢mbito nocturnal que acota la arquitectura palaciega y humedecen las fuentes y el bosque. Creo que Crist¨®bal Halffter ha dirigido ya sus Eleg¨ªas unas 60 veces, pero es probable que la m¨¢s reciente haya sido tambi¨¦n la m¨¢s emotiva y ver¨ªdica.
Castilla impone y conmociona y el compositor es muy sensible, por naturaleza, a las incitaciones de su pa¨ªs. Del mismo modo, sinti¨®, asumi¨® y metamorfose¨® la m¨²sica de Antonio de Cabez¨®n y de Joan Cabanilles en el Tiento y batalla o expres¨® su voluntad de paz en la eficaz Fanfarria dedicada al violonchelista Rostropovich.
Entre esas p¨¢ginas de vida y de muerte resultaba l¨®gica la inclusi¨®n del poema de Strauss Muerte y transfiguraci¨®n, escrito hace ahora un siglo. Adem¨¢s evidenciaba las ra¨ªces germanas del m¨²sico madrile?o y nos dec¨ªa c¨®mo una transici¨®n de alguien an¨®nimo puede entroncar con el paso de nuestros c¨¦lebres poetas desde la vida fecunda a la muerte transfigurada por la perduraci¨®n en la memoria de su obra. El ¨¦xito de Halffter fue m¨¢s all¨¢ de los largos aplausos; estaba en la emoci¨®n compartida y una audiencia impactada por la suma de dos grandes valores: la verdad y la belleza.
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