Hacienda rechaza una nueva oferta de Tabarot para pagar la deuda del Casino Costa Blanca
El Casino Costa Blanca sigue provocando quebraderos de cabeza a Jos¨¦ Luis Olivas, consejero de Econom¨ªa y Hacienda. Las deudas acumuladas por la entidad con la Hacienda auton¨®mica rondan los 2.000 millones de pesetas, seg¨²n fuentes oficiales, sin contar los pagos pendientes al Ayuntamiento de La Vila Joiosa, en cuyo t¨¦rmino municipal se asienta la sala de juegos. Hacienda rechaz¨® hace unas semanas una nueva oferta de Roch Claude Tabarot, actual gestor de la mercantil Casino Costablanca, SA, para cubrir la deuda acumulada. Tabarot ofreci¨® como aval las instalaciones del casino y los terrenos aleda?os, bienes inmuebles intervenidos junto a la caja de la sala de juegos en febrero de 1997.
El Casino Costa Blanca es la prueba evidente de que no es oro todo lo que reluce. En junio de 1990 la Comisi¨®n T¨¦cnica del Juego se vio forzada a denegar la autorizaci¨®n de explotaci¨®n, que s¨®lo renov¨® en junio de 1993. Pero las tensiones fiscales surgieron casi de inmediato. La ley del juego obliga a tributar en torno a un 50% de la recaudaci¨®n del casino, pagos que se ejecutan trimestralmente. Casino Costablanca, SA, dej¨® pendientes varios pagos trimestrales desde finales de 1993 a Hacienda hasta que la Comisi¨®n T¨¦cnica del Juego, todav¨ªa bajo mandato socialista, cancel¨® la licencia de explotaci¨®n en mayo de 1995, paso previo para convocar un nuevo concurso que permitiera a la Hacienda valenciana resarcir las deudas acumuladas. La mercantil present¨® recurso ante el consejero de Hacienda. Jos¨¦ Luis Olivas recibi¨® el recurso poco despu¨¦s de asumir el cargo, pero todav¨ªa no lo ha resuelto. En septiembre de 1995 los propietarios de la empresa Casino Costablanca llegaron a un acuerdo privado con Roch Claude Tabarot, un ciudadano franc¨¦s afincado en Benidorm, y le cedieron la gesti¨®n de la sala de juegos. Hacienda nunca autoriz¨® la transmisi¨®n de acciones ni traslad¨® la titularidad de la licencia, que sigue estando a nombre de Fernando Pascual de Pobil. Tabarot hizo una primera oferta a Hacienda para pagar las deudas pendientes, que aval¨® con los terrenos de una mercantil a nombre de su esposa sobre los que se constru¨ªa una urbanizaci¨®n de lujo en Finestrat. La constructora CLEOP se vio forzada a suspender pagos por alzamiento de bienes, puesto que contaba con los mismos terrenos como aval de las obras que desarrollaba en la urbanizaci¨®n R&R Golf, seg¨²n consta en la memoria que la constructora entreg¨® en el juzgado en octubre de 1996. Hacienda rechaz¨® la primera oferta de Tabarot. Subasta suspendida La persistencia de la deuda y los nuevos incumplimientos por parte de los gestores del casino llevaron a la Hacienda valenciana a convocar una subasta p¨²blica de los bienes de la sociedad, que deb¨ªa ejecutar la Agencia Estatal Tributaria. La deuda acumulada entonces rondaba los 1.300 millones, pero la subasta de los bienes inmuebles -que no llevaba aparejada ninguna garant¨ªa sobre la concesi¨®n de la licencia de explotaci¨®n necesaria para una sala de juego-, fue convocada por algo menos de 700 millones en primera licitaci¨®n. Hacienda suspendi¨® la subasta el 26 de febrero, un d¨ªa antes de la fecha oficial de convocatoria, e intervino la caja del casino. La intervenci¨®n fue asumida por Pascual de Pobil, en calidad de director general y titular legal de la licencia de explotaci¨®n de la sala de juegos, pero la gesti¨®n sigue en manos de Tabarot. Fuentes oficiales aseguran que desde la intervenci¨®n de la caja -a la que escapan las m¨¢quinas tragaperras porque son propiedad de una segunda empresa, tambi¨¦n en manos de Tabarot-, se han cumplido escrupulosamente las obligaciones trimestrales con la Hacienda valenciana y no se han producido problemas con trabajadores y proveedores. Pero los intereses sobre el principal de la deuda siguen creciendo y la cuenta acumulada ronda los 2.000 millones de pesetas, una cantidad que revisan al alza otras fuentes vinculadas con la sala de juegos. Hace unas semanas, ante la pasividad de Hacienda y siempre seg¨²n fuentes oficiales, Tabarot ofreci¨® pagar al contado 800 millones de pesetas y fraccionar el resto de la deuda en plazos que se extender¨ªan entre cinco u ocho a?os. El empresario franc¨¦s ofreci¨® como aval de la operaci¨®n los bienes inmuebles del casino, actualmente embargados por Hacienda. La respuesta oficial se est¨¢ tramitando y ha paralizado la posibilidad abierta de convocar un concurso de explotaci¨®n, pero fuentes oficiales advierten que s¨®lo aceptar¨ªan la ¨²ltima oferta de Tabarot si contara con un aval bancario.
Pendientes de la n¨®mina
La Consejer¨ªa de Hacienda tiene la posibilidad de cancelar la licencia de explotaci¨®n del Casino Costa Blanca, ejecutar el embargo que pesa sobre los bienes inmuebles de la sala y los territorios aleda?os, y convocar un concurso p¨²blico que le permitir¨ªa resarcirse de la deuda pendiente. Pero fuentes oficiales de la consejer¨ªa alegan que los plazos para tramitar el concurso dejar¨ªan en la calle a los 138 trabajadores que tiene en n¨®mina la empresa durante un m¨ªnimo de cuatro meses. Adem¨¢s, dif¨ªcilmente se puede incluir entre las cl¨¢usulas de un concurso p¨²blico la obligatoriedad de emplear a la plantilla saliente. Los empleados de Casino Costablanca, SA, cobran religiriosamente cada d¨ªa 4 desde que la caja de la sala de juegos fue intervenida por Hacienda, en febrero de 1997, seg¨²n fuentes sindicales. No pueden decir lo mismo los empleados de Hocoba, la sociedad que explota los servicios de restaurauraci¨®n del casino y la sala de espect¨¢culos, que tambi¨¦n es propiedad del empresario franc¨¦s afincado en Benidorm Roch Claude Tabarot. Los empleados de Hocoba han cobrado las n¨®minas correspondientes a los meses de mayo y junio mediante talones bancarios de terceras sociedades y han tropezado con la negativa de los bancos a aceptar cheques que resultaron no tener fondos, seg¨²n las mismas fuentes. Tampoco est¨¢ claro que la sociedad Retra, SA, que explota las m¨¢quinas tragaperras -la parcela m¨¢s rentable del casino- y que tambi¨¦n es propiedad de Tabarot, cumpla con las obligaciones que tiene hacia Casino Costablanca, SA, por alquiler del local y mantenimiento de las m¨¢quinas. Los trabajadores del casino disfrutan de la seguridad que les proporciona la intervenci¨®n de Hacienda, pero temen que la ausencia de iniciativas empresariales que fomenta la propia intervenci¨®n acabe por arruinar el negocio.
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