Moy¨¤ sit¨²a a Espa?a en semifinales

No hubo sorpresas. Todo se produjo seg¨²n el gui¨®n. Carles Moy¨¤, 4? mundial, derrot¨® con solvencia al n¨²mero uno de Suiza, Marc Rosset, 42?, y concedi¨® a Espa?a el punto que marcaba la eliminaci¨®n de los helv¨¦ticos (3-1) y la clasificaci¨®n para las semifinales. Moy¨¤ gan¨® por 7-5, 6-1, 7-5 en 2 horas y 14 minutos. Espa?a se enfrentar¨¢ a Suecia, que elimin¨® a Alemania, y jugar¨¢ de visitante. La otra semifinal la disputar¨¢n estadounidenses e italianos, que ganaron, respectivamente, a B¨¦lgica y a Zimbabue por 3-0, en Estados Unidos. ?lex Corretja, n¨²mero dos espa?ol, pidi¨® jugar el ¨²ltimo punto de la eliminatoria contra George Bastl, cuarto jugador suizo y 252?, en atenci¨®n a los 6.500 espectadores que arroparon al equipo espa?ol toda la eliminatoria. Corretja iba a ser sustuido por Juli¨¢n Alonso en este punto ya intrascendente. Gan¨® por 6-0, 7-5 y dej¨® la eliminatoria en 4-1.Moy¨¤ fue ayer el l¨ªder incuestionable del equipo espa?ol. Asumi¨® la condici¨®n de n¨²mero uno, que detenta desde que gan¨® el torneo de Roland Garros el pasado mes de junio, y llev¨® a su generaci¨®n a su primera semifinal de la Copa Davis. "Puede que eso no se valore debidamente", se?al¨® el mallorqu¨ªn, a punto de cumplir los 22 a?os, "pero para nosotros es muy importante". Espa?a no alcanzaba las semifinales desde 1987 con Manuel Orantes de capit¨¢n y con Emilio S¨¢nchez, su hermano Javier y Sergio Casal en el equipo. Los mejores resultados, sin embargo, fueron las dos finales que disput¨® en Australia los a?os 1965 y 1967 con Manuel Santana, el actual capit¨¢n, como l¨ªder incuestionable.

Para alcanzar aquel estadio queda a¨²n otra eliminatoria que se disputar¨¢ entre el 25 y el 27 de septiembre. Llegar a la final se plantea ahora mismo como algo todav¨ªa lejano. "Sabemos que Suecia nos pondr¨¢ en una pista indoor y que no saldremos de favoritos", se?al¨® Moy¨¤. "Pero tenemos nuestras opciones. Si no, ser¨ªa mejor quedarnos ya en casa. No podemos pretender ganar la Copa Davis jugando s¨®lo en tierra batida".

Hasta ahora ¨¦ste ha sido el gran problema de Espa?a: jugar fuera era sin¨®nimo de derrota. Pero esta generaci¨®n de jugadores parece dispuesta a romper todos los moldes. En Brasil el pasado mes de abril, Moy¨¤ y Corretja ya demostraron que son capaces de controlar la presi¨®n. Y ayer, el mallorqu¨ªn ofreci¨® un nuevo muestreo de sus capacidades. El Rosset que jug¨® contra ¨¦l quedaba lejos del que ha perdido siete veces en primera ronda desde el pasado mes de febrero en el circuito. Fue un jugador incluso distinto al que se enfrent¨® a Corretja en la primera jornada de esta eliminatoria. Estaba m¨¢s asentado y jugaba sin presi¨®n, porque sab¨ªa que salvar la eliminatoria era casi una misi¨®n imposible.

Tal vez por eso despleg¨® su armamento y fue eligiendo con calma y eficiencia cada uno de sus golpes. Jug¨® un primer set muy por encima de lo que puede ofrecer su nivel actual. Pero no logr¨® perturbar en absoluto a Moy¨¤. Rosset apoy¨® su juego en la potencia de su servicio, pero Moy¨¤ logr¨® puntos directos de resto sobre saques que superaban los 200 kil¨®metros por hora.

Incluso en el saque se mostr¨® m¨¢s eficaz el mallorqu¨ªn: en los dos primeros sets cedi¨® s¨®lo 10 puntos con su servicio. No afront¨® ninguna bola de break, mientras que Rosset cedi¨® cinco antes de conceder la primera manga por 7-5 en la primera rotura del partido. El segundo set constituy¨® una aut¨¦ntica exhibici¨®n. Pero en los comienzos de la tercera manga, el mallorqu¨ªn se sent¨ªa cansado y su cabeza iba ya por otros derroteros. Se despist¨® y Rosset se coloc¨® con 3-1. "Para m¨ª", explic¨® Josep Perlas, entrenador de Moy¨¤, "el problema fue que a Carles le faltan partidos (no jugaba desde Wimbledon). Por eso la cabeza se le va en algunos momentos. Pero en cuanto volvi¨® a centrarse, volvi¨® a controlar el partido". Con un break en el quinto juego y otro en el und¨¦cimo, Moy¨¤ se asegur¨® la victoria. Y Espa?a alcanz¨® las semifinales.