La oposici¨®n aplaude la decisi¨®n de la comisi¨®n de urbanismo de rechazar el PGOU de Gil
La oposici¨®n en Marbella -PSOE, PP e IU- ha expresado su satisfacci¨®n por la decisi¨®n de la Comisi¨®n Provincial de Urbanismo de rechazar el Plan General de Ordenaci¨®n Urbana (PGOU) del alcalde, Jes¨²s Gil, que pretend¨ªa recalificar como suelo urbanizable 1.100 hect¨¢reas de suelo forestal incendiado y autorizar construcciones en medio centenar de zonas verdes y de equipamiento. S¨®lo la Federaci¨®n Andaluza de Urbanizadores ha manifestado su preocupaci¨®n por la medida de la Junta de Andaluc¨ªa, que considera que "pone en peligro a este din¨¢mico sector".
El PSOE est¨¢ convencido de que a Gil "le ha sentado muy mal la decisi¨®n cuando cre¨ªa que lo ten¨ªa todo bien atado", despu¨¦s que el alcalde declarase el martes la guerra a la Junta por vetarle el PGOU. Para la portavoz municipal, Isabel Garc¨ªa Marcos, el Gobierno andaluz ha puesto freno a un modelo urban¨ªstico "que amenazaba con desfigurar este municipio y que Gil s¨®lo lo entiende como un negocio". El presidente de los urbanizadores, Ricardo Arranz, sin embargo, augur¨® "consecuencias muy negativas para el sector". Se?al¨® que el rechazo al plan de Gil "condiciona las decisiones de inversi¨®n de los empresarios que tienen proyectos en Marbella". Arranz, aunque apoyaba el proyecto municipal de revisi¨®n, quiso erigirse en mediador entre el Gobierno local y la Junta e inst¨® a ambas administraciones a buscar "el consenso necesario" para sacar adelante el PGOU, que considera "el marco jur¨ªdico indispensable para el buen desarrollo de Marbella". Por el contrario, el concejal de IU Antonio Mart¨ªn cree que los inversores "de bien" no deben preocuparse. Mart¨ªn cree que este veto no crea inseguridad jur¨ªdica porque existe un plan vigente, el de 1986, con el que "se pueden realizar modificaciones urban¨ªsticas dentro de la ley", y pidi¨® la paralizaci¨®n de las obras ilegales que se est¨¢n construyendo para que despu¨¦s no se tenga que llegar a su demolici¨®n. El PP abog¨® por "un PGOU sin gazapos, que elimine el sistema de convenios y se base en intereses puntuales de una planificaci¨®n seria y meditada". Su portavoz, Jos¨¦ Figueroa , entiende que "ya es hora de acabar con las decisiones oscuras y unilaterales porque la prepotencia no llega a ninguna parte". Transacciones Mientras, la Plataforma Ciudadana de Marbella, creada hace un a?o para vigilar la legalidad de la revisi¨®n del PGOU, critic¨® los convenios urban¨ªsticos como forma de hacer un plan de ordenaci¨®n. Inmaculada G¨¢lvez, su portavoz, indic¨® que "las zonas verdes o de equipamiento comunitarios nunca pueden incluirse en transacciones de convenios urban¨ªsticos". El PSOE anim¨® a Gil a "tirar de la manta" al entender su declaraci¨®n de guerra como una forma de "intentar confundir a los ciudadanos y sembrar dudas sobre la honorabilidad de personas, partidos e instituciones". Tambi¨¦n le advirti¨® que la directora general de Urbanismo, Josefina Cruz, no dudar¨¢, "con arreglo a la ley", de demoler los edificios que se est¨¢n construyendo en zonas p¨²blicas". Mientras, el consejero de Obras p¨²blicas, Francisco Vallejo, manifest¨® en Ja¨¦n que la actitud de Gil "es poco defendible", informa Carmen del Arco. En su opini¨®n, existe suelo m¨¢s que suficiente para atender a la importante demanda de viviendas que hay en Marbella, pero que no se puede admitir que se recalifiquen 60 zonas verdes o que se edifique en zonas forestales. Vallejo dijo que hay posibilidades de efectuar estas medidas, pero no en la medida que Gil quer¨ªa hacer. Vallejo pidi¨® al alcalde la elaboraci¨®n de un texto refundido.
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