"Lupita" vuelve a casa

El caos que ha sufrido el aeropuerto de Barajas durante el ¨²ltimo mes no ha afectado s¨®lo a los humanos. Ha habido retrasos de varias horas en los vuelos, miles de maletas perdidas y huelgas, entre otros desastres. Ahora parece que todo este descontrol tambi¨¦n caus¨® problemas a los animales.Aunque tal vez no tenga relaci¨®n directa, en pleno desbarajuste aeroportuario desapareci¨® una perra, una terrier peque?a, marr¨®n y con las patas blancas. Respond¨ªa al nombre de Lupita. Despu¨¦s de 18 d¨ªas sin noticias de la perra, el martes por la noche volvi¨® con sus amos, seg¨²n inform¨® ayer Efe.

La historia comenz¨® el pasado d¨ªa 3, cuando la due?a de Lupita, Andrea Emparanza, viaj¨® desde Santiago de Compostela a Las Palmas de Gran Canaria en un vuelo de la compa?¨ªa Spanair. Andrea, una joven estudiante de Veterinaria, no quer¨ªa separarse de su perra.

Como Lupita pesa 10 kilos, y el l¨ªmite de equipaje de mano est¨¢ en cinco, tuvo que facturarla. "La compa?¨ªa acepta un animal, y debe cuidarlo, pero luego no responde de ¨¦l como un ser vivo", se?al¨® ayer la madre de Andrea, Bego?a Barremengoa.

Andrea hizo escala en Madrid, pero, al aterrizar en Las Palmas, le dijeron que Lupita no hab¨ªa llegado. "Nos dijeron que se hab¨ªa escapado en Barajas, que sali¨® disparada de la bodega en la zona de las pistas", dijo Bego?a Barremengoa. "Pero lo curioso es que el animal iba sedado para un per¨ªodo de seis horas, y ellos nos dicen que se escap¨® tras una sola hora de vuelo. Adem¨¢s, la jaula en la que viajaba tiene dos cierres, y nos la devolvieron intacta", a?adi¨®.

Al presentar un parte de irregularidades descubrieron que la compa?¨ªa no se hac¨ªa responsable de la desaparici¨®n de la perra. Spanair, ampar¨¢ndose en las condiciones del billete, les dijo una semana despu¨¦s que lo ¨²nico que pod¨ªa hacer era devolverles el importe que hab¨ªan pagado por Lupita en concepto de exceso de equipaje.

Sin embargo, la familia quer¨ªa que hicieran m¨¢s. "El ocho de julio Spanair a¨²n no hab¨ªa comunicado a las dem¨¢s compa?¨ªas la desaparici¨®n de Lupita. No hac¨ªan todo lo posible por buscar a la perra", dijo ayer Bego?a. Descontenta con esa actitud, la familia empez¨® a movilizarse. "Han sido dos semanas de molestias y llamadas constantes con el tel¨¦fono m¨®vil. No hemos tenido vacaciones", a?adi¨®.

Avisaron a la Direcci¨®n General de Aviaci¨®n Civil, a asociaciones de ayuda al consumidor, a la Sociedad Protectora de Animales, y, en general, a cualquier persona o instituci¨®n que supusieran que pod¨ªa ayudarles.

El pasado d¨ªa 20, cuando ya desesesperaban de volver a ver a Lupita, recibieron una llamada desde la localidad de Coslada. Lorena Rodr¨ªguez, una joven de 15 a?os, hab¨ªa visto a la perra en su urbanizaci¨®n, a unos dos kil¨®metros de Barajas. "Lorena es la verdadera hero¨ªna de esta historia", dijo Bego?a

Seg¨²n les cont¨® Lorena, desde el d¨ªa ocho, cinco d¨ªas despu¨¦s de desaparecer, Lupita merodeaba por esa zona de la periferia madrile?a, y la joven de Coslada la aliment¨® y le dio agua desde entonces.

Sin embargo, la perra desconfiaba de las personas. "La adoptamos en Lugo, y tal vez no tiene buenos recuerdos de los humanos", se?al¨® Bego?a Barremengoa. S¨®lo varios d¨ªas de cuidados permitieron a Lorena acercarse a Lupita y ver su chapa con los datos de sus due?os. Fue entonces cuando decidi¨® llamar al tel¨¦fono de la residencia de Bego?a en Las Palmas.

Spanair recogi¨® a Lupita en Madrid y la llev¨® a Santiago. Ayer por la noche lleg¨® a Lugo, donde vive Andrea. La perra parece estar bien, pero no se podr¨¢ afirmar con seguridad hasta conocer los resultados del reconocimiento que se le practic¨® ayer en el veterinario.

Bego?a Barremengoa cree que la compa?¨ªa no va a ofrecerles ninguna compensaci¨®n por los da?os morales sufridos durante estos 18 d¨ªas. Y se plantea acudir a la justicia si no le satisface la soluci¨®n que se les proponga.

Adem¨¢s, puede haber otras consecuencias imprevistas de todo este suceso. "Lorena nos dijo que hab¨ªa visto a un perro cubriendo a Lupita", dijo ayer Bego?a. "La perra estaba en celo cuando escap¨®. As¨ª que no querr¨ªamos que, por culpa de su aventura madrile?a ahora tengamos que hacernos cargo de los cachorros".