Un doblete sim¨¦trico a los de Indur¨¢in
Coppi, Anquetil, Merckx, Hinault, Roche, Indur in... y Pantani. El doblete Giro-Tour, una haza?a que ya se cre¨ªa s¨®lo al alcance de s¨²per hombres en un ciclismo cada vez m¨¢s de especialistas, de hombres de un mes, ha sido alcanzada en 1998, definitivamente el a?o de los milagros, por el corredor m¨¢s inesperado, por un escalador que se pensaba limitado a las gestas sin d¨ªa siguiente. Coppi (1949 y 1952), Anquetil (1964), Merckx (1970, 72 y 74) e Hinault (1982 y 1985), fueron campeon¨ªsimos que marcaron una ¨¦poca. Roche (1987, con el a?adido del Mundial) aprovech¨® un a?o m¨¢gico. Indur¨¢ in (1992 y 1993) cre¨® un nuevo estilo, el de la econom¨ªa, que le permiti¨® con golpes certeros sacar el m¨¢ximo rendimiento de su maquinaria excepcional. ?Y Pantani?La prensa italiana, evidentemente, le parangona con Coppi. Es f¨¢cil el s¨ªmil (grandes haza?as monta?eras en solitario, un mito social), pero es falso. Coppi fue el campeon¨ªsimo de una era en que un ciclista pod¨ªa permitirse ser el mejor de enero a diciembre, ganar cl¨¢sicas, grandes vueltas y Mundiales. No, Pantani no es Coppi, no anuncia el advenimiento de un nuevo ciclismo. El doblete de Pantani es un doblete a lo Indur¨¢in, un campe¨®n de la era moderna, pero al rev¨¦s. Es el reflejo sim¨¦trico del navarro. La econom¨ªa es la misma. Uno, Indur¨¢in, marcaba las diferencias en la contrarreloj y las aguantaba en la monta?aa; Pantani las hace en la monta?a, es el ¨²nico capaz de ello, y resiste, m¨¢s que ning¨²n otro escalador, en las contrarreloj. Y tambi¨¦n hay simetr¨ªa en la forma de abordar los objetivos. Para Indur¨¢ in, el prioritario fue siempre el Tour: ganaba el Giro de camino, mientras se preparaba para el Tour; para Pantani, el Giro: puso todas sus energ¨ªas en el intento, pero a¨²n le sobraron para hacer un Tour econ¨®mico, relajado y sin presi¨®n: tres golpes escogidos en monta?a y ya est¨¢. El resto fueron un c¨²mulo de circunstancias favorables: pudo recuperarse del Giro por el retraso en el inicio del Tour, ausencia de cortes y batalla en los d¨ªas llanos, fragilidad mental de Ullrich, miedo de todos. El mito moderno de la imposibilidad de dos grandes un mismo a?o qued¨® roto.
"Claro que se pueden ganar dos grandes un mismo a?o", dice Pantani. "Si yo lo he hecho... Tuve la ventaja de ganar el Giro y llegar tranquilo al Tour, sin pensar m¨¢s que en ganar un par de etapas. No me empe?¨¦ en cosechar donde era imposible; simplemente he atacado donde era posible para mis caracter¨ªsticas: tres flechazos y diana. Crisis de Ullrich y unos cuantos minutos".
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