Finlandia refleja su vitalidad musical en Kuhmo y Savonlinna

En los c¨ªrculos musicales se mira a Finlandia con admiraci¨®n. Proliferan compositores (Rautavaara, Saariaho, Linbeg...) e int¨¦rpretes (Salonen, Mattila, Salminen...) de talento. La calidad -y cantidad: m¨¢s de 2.000- de los coros es asombrosa. Las casas discogr¨¢ficas (Ondine, Finlandia) tienen cat¨¢logos sugestivos. La ense?anza de la m¨²sica es ejemplar. Finlandia es, musicalmente hablando, el pa¨ªs de moda. Su vitalidad se refleja en los festivales veraniegos de Kuhmo y Savonlinna, que acaban de celebrarse.

Ambos son los dos escaparates musicales finlandeses m¨¢s emblem¨¢ticos. El primero, dedicado a la m¨²sica de c¨¢mara, es el m¨¢s sorprendente; el segundo, centrado en la ¨®pera, es el m¨¢s cosmopolita, con un 20% de asistencia de extranjeros entre sus 60.000 visitantes anuales.Kuhmo es una peque?a poblaci¨®n de 12.000 habitantes, situada a 600 kil¨®metros de Helsinki, a un paso de la Karelia rusa. El aeropuerto m¨¢s cercano, Kajaani, se encuentra a unos 100 kil¨®metros, en el centro geogr¨¢fico del pa¨ªs. El Festival de M¨²sica de C¨¢mara se celebr¨® este a?o del 19 de julio al pasado domingo y estuvo precedido por un concurso para d¨²os de viol¨ªn-piano y de violonchelo-piano. El n¨²mero de conciertos se eleva a 91, con algunos temas conductores -Haydn en Londres, Villalobos y la m¨²sica brasile?a- y con int¨¦rpretes que van desde cuartetos como el Borod¨ªn hasta pianistas como Sokolov. A ello hay que a?adir las sesiones improvisadas de los 200 estudiantes de los cursos de verano. El festival respira un ambiente espont¨¢neo, al estilo del de Aspen (Colorado, EE UU) y Kitakyushu (Jap¨®n). La mejor m¨²sica de c¨¢mara se desarrolla en el ¨²ltimo rinc¨®n del planeta y con un auditorio asombroso.

Una idea de 29 a?os

El crecimiento del festival de Kuhmo ha sido espectacular en sus 29 a?os de existencia. El alma de esta aventura es el violonchelista Seppo Kimanen, int¨¦rprete del cuarteto Sibelius, en el que tambi¨¦n interviene su mujer, la violinista Yoshiko Arai. La idea se le ocurri¨® a Kimamen cuando era un estudiante de 21 a?os. Ahora sigue siendo el director. Empezaron en 1970 con un presupuesto de 21.000 pesetas y 800 espectadores. En los ¨²ltimos a?os, rondan los 140 millones y el p¨²blico no desciende de 40.000 personas. Su estatus lo han conquistado paso a paso: un a?o compraron el piano; el punto culminante del progreso ha sido la inauguraci¨®n, hace cinco a?os, de un auditorio al lado del lago, que complementa los conciertos en la iglesia o en lugares m¨¢s informales. Sorprende el n¨²mero de int¨¦rpretes de primera fila que han pasado por Kuhmo, pero mucho m¨¢s el nivel art¨ªstico de los instrumentistas finlandeses.Lo de Savonlinna es otra historia. Aprovecha el impresionante castillo medieval de Olavinlinna, en una isla, para ofrecer ¨®peras de repertorio -una magn¨ªfica nueva producci¨®n de La fuerza del destino de Verdi en la presente edici¨®n, con estupenda utilizaci¨®n del espacio esc¨¦nico por Michael Hampe y vibrante direcci¨®n musical de John Fiore- y de compositores finlandeses.

El Festival de Savonlinna est¨¢ sustentado por una orquesta de alto nivel y un coro sensacional de m¨¢s de 100 personas. Surgi¨® como una iniciativa de la soprano Aino Ackt¨¦ en 1912 para favorecer la ¨®pera finlandesa. Fue un intento que no dur¨® demasiados a?os, pero el proyecto se retom¨® y ahora funciona de forma continuada desde 1967. El 66% del presupuesto procede de la venta de entradas. Algunos t¨ªtulos como Macbeth de Verdi, La Flauta m¨¢gica de Mozart, El holand¨¦s errante de Wagner o las ¨®peras del compositor finland¨¦s Aullis Sallinense se han convertido en la imagen del festival.

La disposici¨®n de los asistentes es mod¨¦lica y no dudan en ir a la ¨®pera con mantas en los d¨ªas en que el viento amenaza con colarse entre las rendijas del gigantesco patio cubierto, utilizado como teatro y celosamente protegido por las gaviotas.