La gran Lewinsky

DE PASADAHaga la prueba. Diga que se ha ido de vacaciones a Quintanar de la Orden o a Villajoyosa y ver¨¢ la cara de extra?eza con que le miran. ?A qui¨¦n se le ocurre? ?Irse de vacaciones a Palencia! Qu¨¦ cosas tiene Ram¨®n Barrenechea, t¨¦cnico de sonido de Radio Sevilla. Y todos los a?os hace este medio camino de Santiago a su patria chica. ?Hay que ser hortera y corto de miras! Con el sugerente abanico de ofertas de Sem¨ªnola Tour: la ruta de los guerreros mogoles, la estela de los fabricantes de ¨¦bano, la visita a las casas de los ex maridos de Zsa Zsa Gabor, los peces de colores de las Maldivas, el safari antropol¨®gico por la NBA de los pigmeos. ?Palencia! C¨®mprate un atlas, t¨ªo, y elige al azar entre el h¨¢bitat del igl¨² groenland¨¦s o las secuelas ed¨ªpicas seg¨²n Freud en las barriadas perif¨¦ricas de Tananarive. Un alma de Conrad encerrada en una br¨²jula de Ignacio Aldecoa. Si Palencia no existe, que se la invent¨® Ram¨®n Carande y Thovar. Y su tocayo, Ram¨®n Barrenechea, ha perdido el tiempo miserablemente. ?A qui¨¦n le puede interesar que Carda?o de Abajo viva momentos de esplendor y que en Carda?o de Arriba llegara la luz cuando ya se fue el ¨²ltimo habitante? Ha desaprovechado el sinf¨ªn de ofertas del Caribe y se tiene que conformar con la historia local de Fidel Castro, un palentino hijo de emigrantes que naci¨® en La Habana y que volvi¨® al terru?o castellano para abrir una tienda de comestibles. La vida sigue con los interrogantes de siempre. ?Qu¨¦ fue de Laura Pausini? Pas¨® de largo, como Las Vulpes. Paco Lobat¨®n est¨¢ de vacaciones y nos quedamos con la miel de la curiosidad en los labios. Conato de canci¨®n del verano Chica salvaje, te hartas de potaje. ?A qui¨¦n le dar¨¢n el Oscar, al gran Lebowski o a la peque?a Lewinsky? La becaria juega a Lolita pero Humbert Humbert la descartar¨ªa por su parecido con Florinda Chico. Para el camino de Santiago se requiere buen calzado. Ya no se puede comprar en la tienda de Carmelo Orozco, en la calle Regina, que cerr¨® y dej¨® en la cuneta a sus trabajadores. Entidad protegida con sistemas de alarma, se lee en el escaparate. ?Qui¨¦n proteg¨ªa a los trabajadores de este caso flagrante de alarma laboral? En Carmelo Orozco pasa como en Carda?o de Arriba. Cuando llegue la luz ya no habr¨¢ nadie. Y el due?o de los zapatos se habr¨¢ puesto las botas. Siempre pasa lo mismo. En ese sentido, Palencia es una met¨¢fora del mundo.